Dictador sirio se compara a sí mismo con un cirujano cuyas manos están ensangrentadas

3 de junio.- El jefe de la dictadura siria, Bashar Al Assad, admitió hoy que sus manos están ensangrentadas, pero se justificó alegando que su tarea se asemejaba a la de un médico que opera a un paciente y que debe llenarse las manos de sangre para lograr su propósito. De esa manera, la dictadura responde a las denuncias por la salvaje represión contra la población civil. «Cuando un cirujano en un quirófano… hace cortes, limpia y amputa, y la herida sangra ¿alguien le dice que sus manos están manchadas de sangre? ¿O le damos las gracias por salvar al paciente?» exclamó Assad en un mensaje televisado desde el Parlamento.

3 de junio.- El jefe de la dictadura siria, Bashar Al Assad, admitió hoy que sus manos están ensangrentadas, pero se justificó alegando que su tarea se asemejaba a la de un médico que opera a un paciente y que debe llenarse las manos de sangre para lograr su propósito. De esa manera, la dictadura responde a las denuncias por la salvaje represión contra la población civil. «Cuando un cirujano en un quirófano… hace cortes, limpia y amputa, y la herida sangra ¿alguien le dice que sus manos están manchadas de sangre? ¿O le damos las gracias por salvar al paciente?» exclamó Assad en un mensaje televisado desde el Parlamento.

Recientemente, en la ciudad de Hula, un grupo armado progubernamental realizó una masacre en la que fueron asesinadas más de un centenar de personas, la mayoría de ellas eran niños.

Assad anunció que mantendrá su campaña militar contra la población que ha insurgido en su contra. Alegó que se trata de una campaña librada por extremistas. «No vamos a ser indulgentes», aseguró.

La revolución siria arrancó en mazo de 2011, como parte del levantamiento popular que recorrió a todo el mundo árabe, inspirado por la revuelta tunecina, pero el gobierno sirio optó por ahogar en sangre las movilizaciones. Incluso las procesiones funerarias en las que se llevaba a las víctimas de la represión, eran abaleadas por las fuerzas represivas de la dictadura. El ejército empezó a resquebrajarse y tuvo un importante número de deserciones, con lo cual el conflicto desembocó en una lucha armada.

Más recientemente, grupos paramilitares del gobierno sirio han atacado a sectores sirios opositores en norte de El Líbano. El ejército sirio ha bombardeado campamentos de refugiados palestinos en territorio sirio, debido a la simpatía y participación de grupos de la resistencia palestina en las protestas contra la dictadura de Assad. Pero a pesar de los crímenes de la dictadura y la represión, la lucha del pueblo sirio sigue en pie.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *