Dirigente de la MUD se reunió con el genocida Henry Kissinger
Caracas, 29 de abril.- El dirigente de la Mesa de la Unidad Democrática en el estado Carabobo y ex candidato presidencial Henrique Salas Römer, asistió a un homenaje brindado por la Universidad de Yale al genocida Henry Kissinger. Kissinger, un alemán nacionalizado estadounidense, fungió como Secretario de Estado durante los gobiernos de Nixon y Ford, y fue el arquitecto de algunos de los crímenes contra la humanidad más aberrantes del siglo XX. La participación de la MUD en este acto reafirma el carácter retrógrado y proimperialista de esa coalición partidista. Un hijo de Salas Romer, Henrique Salas Feo, ocupa actualmente la gobernación del estado Carabobo.
Caracas, 29 de abril.- El dirigente de la Mesa de la Unidad Democrática en el estado Carabobo y ex candidato presidencial Henrique Salas Römer, asistió a un homenaje brindado por la Universidad de Yale al genocida Henry Kissinger. Kissinger, un alemán nacionalizado estadounidense, fungió como Secretario de Estado durante los gobiernos de Nixon y Ford, y fue el arquitecto de algunos de los crímenes contra la humanidad más aberrantes del siglo XX. La participación de la MUD en este acto reafirma el carácter retrógrado y proimperialista de esa coalición partidista. Un hijo de Salas Romer, Henrique Salas Feo, ocupa actualmente la gobernación del estado Carabobo.
A la universidad, ubicada en el estado de Connecticut, también asistieron varios miembros del alto gobierno de los EEUU, para participar en el homenaje.
Un criminal cuyas víctimas se cuentan por millones
No es exagerado afirmar que se trata de uno de los peores criminales de guerra con cuyos servicios ha contado el imperialismo. Kissinger fue el encargado de diseñar políticas genocidas como los bombardeos masivos contra el pueblo vientamita, que sufrió alrededor de 4 millones de muertes durante la invasión imperialista. Miles también murieron en Camboya y Laos por los bombardeos secretos perpetrados por los yanquis.
También diseñó la intervención en Chile para apoyar un golpe de Estado contrarrevolucionario y la instauración del régimen de Pinochet, apoyó el establecimiento de dictaduras fascistas en Argentina y Uruguay, y concibió el Plan Cóndor, para la coordinación de las dictaduras del Cono Sur en la persecución, tortura y desaparición de activistas de izquierda.
Además de genocida, Kissinger es un furibundo racista. Son conocidas sus expresiones dirigidas hacia la población de la India, a la que considera una «raza inferior».
Al justificar el apoyo a un golpe contra el pueblo chileno, Kissinger expresó una frase que se ha hecho tristemente célebre: «No veo por qué tenemos esperar y permitir que un país se vuelva comunista debido a la irresponsabilidad de su propio pueblo».
Kissinger también apoyó a grupos terroristas de derecha en Angola y Mozambique, para oponerse a la lucha anticolonial en esos países. Apoyó la invasión marroquí del Sahara Occidental, la horrenda «Marcha Verde», así como la cruenta invasión de Timor Oriental por parte del régimen militar indonesio.