Refinerías afectadas por fallas y falta de equipos y repuestos

Miércoles 8 de junio de 2011. La situación operativa de las refinerías, terminales y otras instalaciones petroleras de Pdvsa genera preocupación, tras una serie de incidentes y fallas en la seguridad industrial. En los últimos tres meses el Complejo Refinador Paraguaná (CRP), uno de los más grandes del mundo, y con capacidad para procesar cerca de 945 mil barriles diarios de crudo, ha sufrido explosiones de calderas, apagones parciales y totales, e incendios en diferentes áreas, que han afectado las operaciones de las refinerías Amuay y Cardón.

Y sobre el estado de las instalaciones, José Bodas, secretario ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros (Futpv), indicó que «la no inversión en mantenimiento en general, ha ocasionado que se arriesgue la vida de los trabajadores. Hay incendios en separadores de crudo, caídas del flujo eléctrico, y otros incidentes en los que se corre peligro. Y esa situación no es solo en el CRP».

El dirigente sindical advierte que además «se han incrementado los eventos en la refinería El Palito en Puerto Cabello y en la refinería en Puerto La Cruz». El recuento de incidentes incluye problemas en las calderas para generar vapor y electricidad; así como fallas en el suministro e inventario de repuestos para corregir equipos defectuosos.

Bodas detalla que el problema con los repuestos ha ocasionado que se usen partes de equipos fuera de servicio para reparar o enmendar otros. «Hay bombas y compresores que deben operar con un sistema auxiliar, pero que están funcionando sin ese respaldo en el caso de eventualidades».

El problema de los suministros ya fue reconocido por Petróleos de Venezuela en su memoria y cuenta de 2010, donde se especifica que parte de los retrasos en los procesos de procura se debió «al retardo en los pagos a las empresas proveedoras de obras, bienes y servicios».

Lesionados

Los problemas de seguridad industrial no son exclusivos de Paraguaná. José Bodas asegura que en hay instalaciones en tierra así como barcos y lanchas operando en Anzoátegui donde no hay aire acondicionado ni detectores del nocivo ácido sulfíhidrico (conocido como H2S).

«En dos meses ha habido 7 accidentados en el Terminal de Almacenamiento de Embarque (TAE) en Anzoátegui. Hubo un grupo de 4 trabajadores que, trabajando con crudos mejorados, sufrió un envenenamiento por H2S porque los obligaron a laborar pese a que se habían quejado porque no tenían los equipos de protección adecuados», lamentó Bodas.

A su juicio, el abandono de las labores de mantenimiento ha ocasionado que equipos que deben revisarse cada dos años, ya hayan durado hasta tres años sin ningún tipo de mantenimiento. «Hay que hacer las revisiones y tener repuestos. Si esto no ocurre se incrementan los accidentes. Y en el caso del CRP, ello implica que baje la producción de gasolina».

La memoria y cuenta 2010 de Pdvsa explica que el sistema nacional de refinación tuvo un promedio de utilización de su capacidad de 66% el año pasado. En el caso del CRP, la media alcanza 71%, en un período en que las fallas del sistema eléctrico afectaron en general a la industria petrolera.

El Complejo Refinador Paraguaná hace tres semanas se paralizó por completo en la refinería Cardón y parcialmente en la de Amuay por una falla eléctrica, y además sufrió este lunes un incendio en la plana de hidrógeno, por lo que José Bodas considera que «debe estar en un nivel de producción de aproximadamente 700 mil barriles diarios».

Asimismo, los incidentes en los hornos de la planta catalítica afectán el refinamiento de gasolina. «Esos hornos aún se están reparando, y ello incide directamente en las gasolinas y combustibles para jet», asevera Bodas.

También subraya el dirigente de la Futpv que «hay muchos cuellos de botella en el procesamiento, en la carga de los buques, en el embarque y en el despacho de los productos, a causa de las deficiencias de dotación. Todo esto obliga a que se disminuya la carga de procesamiento de crudos en las refinerías».