Trabajadores petroleros protestaron en Refinería de Puerto La Cruz exigiendo nuevo contrato colectivo

Puerto La Cruz.- La situación está que arde entre los trabajadores petroleros, debido al desmejoramiento cada vez más profundo de sus condiciones laborales y la postergación de la firma del contrato colectivo, que ya lleva año y medio vencido. Este lunes en la mañana la rabia se hizo incontenible y los petroleros protestaron de manera contundente en los portones de la Refinería de Puerto La Cruz, en el estado Anzoátegui, exigiendo que se firme inmediatamente un nuevo contrato que actualice las cláusulas económicas a la realidad del país con la inflación más alta de América Latina.

Puerto La Cruz.- La situación está que arde entre los trabajadores petroleros, debido al desmejoramiento cada vez más profundo de sus condiciones laborales y la postergación de la firma del contrato colectivo, que ya lleva año y medio vencido. Este lunes en la mañana la rabia se hizo incontenible y los petroleros protestaron de manera contundente en los portones de la Refinería de Puerto La Cruz, en el estado Anzoátegui, exigiendo que se firme inmediatamente un nuevo contrato que actualice las cláusulas económicas a la realidad del país con la inflación más alta de América Latina.

José Bodas, Secretario General de la Federación de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), encabezó la protesta, e hizo un llamado a continuar en movilización permanente y a conformar comités de base en defensa del contrato colectivo en todo el país, hasta lograr el objetivo de obligar a Pdvsa y a la burocracia sindical del Psuv a firmar un nuevo contrato.

Bodas explicó que sólo con la movilización autónoma de la clase será posible torcer el brazo al gobierno, cuya política antiobrera se ha traducido en una depauperación de los trabajadores petroleros, muchos de los cuales deben recurrir a la economía informal para poder mantener a sus familias, debido a que los salarios en la industria petrolera son miserables. «Como todo capitalista, este gobierno quiere mano de obra barata, y con su política de destruir los ingresos de los trabajadores también favorece a sus socios imperialistas de las transnacionales petroleras, como por ejemplo la Chevron o la Repsol entre otras, las cuales tienen el 40% del negocio en la mayor parte de la industria petrolera», afirmó el dirigente sindical.

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