Se debatió en la UCV sobre propuestas económicas de los tres principales candidatos presidenciales

Caracas, 4 de julio.- El martes, 3 de julio, se realizó un debate organizado por el Club de Macroeconomía de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Central de Venezuela, en el cual una nutrida asistencia de estudiantes y profesores pudo contrastar las propuestas y visiones de las tres principales candidaturas presidenciales que se medirán el 7 de octubre. Judith Valencia, en representación del Psuv, José Guerra por la MUD, y Miguel Angel Hernández a nombre del Partido Socialismo y Libertad (PSL), explicaron los principales aspectos de las propuestas económicas de dichas opciones políticas.

Caracas, 4 de julio.- El martes, 3 de julio, se realizó un debate organizado por el Club de Macroeconomía de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Central de Venezuela, en el cual una nutrida asistencia de estudiantes y profesores pudo contrastar las propuestas y visiones de las tres principales candidaturas presidenciales que se medirán el 7 de octubre. Judith Valencia, en representación del Psuv, José Guerra por la MUD, y Miguel Angel Hernández a nombre del Partido Socialismo y Libertad (PSL), explicaron los principales aspectos de las propuestas económicas de dichas opciones políticas.

Judith Valencia, planteó que la propuesta económica del presidente Chávez se basa en la concepción de un mundo multipolar. Además de realizar una disertación filosófica acerca del surgimiento de la economía de mercado, Valencia planteó que existen «dos visiones del mundo», una de las cuales estaría representada por la opción del presidente Chávez y la otra por la opción de la MUD. Reivindicó el ingreso de Venezuela al bloque de libre comercio sudamericano Mercosur, alabó al Alba como mecanismo de integración económica, y aseguró que la nueva Ley Orgánica del Trabajo y los Trabajadores y Trabajadoras (Lottt), contiene mecanismos para la «domesticación del capital».

José Guerra planteó como prioridad del programa económico de Capriles y la MUD el objetivo de lograr cierta eficiencia administrativa. Defendió la necesidad de generar «empleo de calidad», y reconoció que en la MUD no hay «ningún problema con las empresas mixtas en el sector petrolero», añadiendo a renglón seguido que el equipo de Capriles defiende ampliar los convenios de empresas mixtas para incorporar capitales de empresarios venezolanos.

En representación de Orlando Chirino y del PSL, el profesor Miguel Ángel Hernández explicó los aspectos centrales de la propuesta económica de dicha candidatura obrera y de izquierda. Hernández criticó el duro plan de ajuste que el gobierno del presidente Chávez ha aplicado desde el año 2008 hasta el presente, incluyendo el aumento del IVA, congelamiento de salarios, devaluación de la moneda y desregulación de los precios de los alimentos. Añadió que la MUD no se ha opuesto a estas medidas adoptadas por el gobierno.

Desmintió, apoyándose en cifras oficiales, la pretensión del gobierno de que estamos transitando hacia el socialismo. Citó informes del Banco Central de Venezuela en los que se refleja que durante el gobierno del presidente Chávez el sector privado ha crecido y el sector estatal se ha reducido, e incluso la apropiación de la riqueza por parte de los patronos ha crecido y ha disminuido la participación de los asalariados en la distribución de la riqueza. Mientras tanto, la economía venezolana se ha hecho más dependiente de la exportación de petróleo, rubro que representa más del 90% de las exportaciones venezolanas.

En cuanto a las propuestas, Hernández destacó el planteamiento de nacionalizar en un 100% la industria petrolera, de la cual las transnacionales son actualmente copropietarias. A partir de la reapropiación del recurso petrolero sería posible apalancar el desarrollo de la agricultura y la manufactura, recuperando las empresas básicas de Guayana e impulsando un plan nacional de obras públicas, explicó Hernández. Agregó que el salario mínimo debe ser igual a la canasta básica, tal y como lo establece la Constitución, y que debe eliminarse el IVA y sustituirse por impuestos a las ganancias del capital. Concluyó proponiendo un bloque regional de países deudores para suspender conjuntamente el pago de la deuda externa, debido a su carácter ilegal, así como la necesidad de denunciar los tratados contra la doble tributación, que permiten a las transnacionales evadir impuestos por un monto estimado de 17 millardos de dólares anuales.

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