Socialistas Revolucionarios se pronuncian sobre la Gripe A H1N1
Este jueves 11 de junio se ha conocido la declaración de la Organización Mundial de la Salud, en la que se califica a la Gripe A H1N1 como una pandemia moderada y se conmina a los estados y gobiernos a tomar las previsiones del caso, para hacer frente a una enfermedad que se sigue propagando a nivel internacional y que en el caso venezolano ha disparado las alertas dado el crecimiento exponencial de casos de personas afectadas. En sólo dos días se supo a través del Ministerio del Poder para la Salud que los casos confirmados de personas afectadas, pasaron primero de 14 a 25 y luego a 37 casos confirmados.
Este jueves 11 de junio se ha conocido la declaración de la Organización Mundial de la Salud, en la que se califica a la Gripe A H1N1 como una pandemia moderada y se conmina a los estados y gobiernos a tomar las previsiones del caso, para hacer frente a una enfermedad que se sigue propagando a nivel internacional y que en el caso venezolano ha disparado las alertas dado el crecimiento exponencial de casos de personas afectadas. En sólo dos días se supo a través del Ministerio del Poder para la Salud que los casos confirmados de personas afectadas, pasaron primero de 14 a 25 y luego a 37 casos confirmados.
Si bien es cierto los índices de infección solo afectan por ahora al 0,0000002 de la población venezolana, que por fortuna no se han presentado decesos en el país a causa de esta enfermedad y que la mortalidad que se registra a nivel mundial no rebasa el 0,06, no por ello es menos cierto que estamos ante una amenaza que pone en riesgo la salud de las personas e impacta económicamente sobre la población y las finanzas del Estado, las cuales ya vienen siendo duramente golpeadas por la crisis económica capitalista internacional y las medidas adoptadas por el gobierno nacional frente a ella.
No se descarta además que la propagación de virus se incremente por efectos climáticos, por estar en una temporada de fuertes lluvias en el país y el inicio de la estación de invierno en los países del sur del continente, que de una u otra manera impactarán sobre nuestra nación.
Los socialistas revolucionarios no podemos dejar de responsabilizar directamente de la generación y propagación del virus a la irracionalidad del modelo económico capitalista. A la burguesía internacional le tiene sin el menor cuidado la contaminación ambiental que generan las insensatas formas de relacionarse con el medio ambiente; la exploración y explotación ilógica de los recursos naturales y la producción a gran escala de bienes y servicios que tienen fuerte impacto negativo sobre los componentes vitales sobre la Tierra, el mar y el aire.
No descartamos tampoco las hipótesis que cada día cobran más fuerzas, de que el origen del nocivo virus sea fruto de pruebas irresponsables de laboratorios con el objetivo de generar la enfermedad y sacar provecho con la venta de sus productos farmacéuticos, o que sea el resultado del fortalecimiento de cepas de virus en las granjas mecanizadas, en las cuales los animales son reducidos a condiciones de inmovilidad altamente insalubres y reciben grandes cantidades de antibióticos. Y denunciamos en forma clara y categórica, que el imperialismo, los Estados y gobiernos capitalistas quieren hacer uso de la propagación de este terrible virus como una cortina de humo para distraer la atención de la población sobre otros problemas más graves como son el desmantelamiento de la seguridad social universal, y los efectos nocivos y perniciosos que causa sobre los bolsillos y las familias de los trabajadores, la crisis financiera internacional capitalista.
Un Plan Nacional Transicional para atender la emergencia
Teniendo en cuenta las reflexiones anteriores, no es justo que sean las finanzas del Estado o los maltrechos bolsillos de los pobladores los que cubran el costo de las investigaciones, análisis, planes de prevención, atención médica, recuperación y rehabilitación de las personas afectadas. Máxime si se tiene en cuenta que desde hace más de veinte años de forma ininterrumpida, desde aquel febrero de 1989, nuestro pueblo viene luchando para impedir que las lacras y efectos perniciosos del capitalismo recaigan sobre las espaldas de los pobres.
En virtud de lo anterior emplazamos al gobierno para que asuma las siguientes medidas de transición y llamamos al conjunto del pueblo a que se movilice para que se concreten, para enfrentar la grave crisis de salud pública que se cierne sobre el país.
1. El gobierno nacional brindará información completa, oportuna y veraz sobre la enfermedad, sus riesgos y las medidas básicas que debe tener en cuenta la población para evitar el contagio y proliferación. Rechazamos las actitudes asumidas en el pasado reciente por las autoridades sanitarias, como cuando se presentaron los casos del Mal de Chágas en el estado Vargas. El gobierno y el ministerio de salud pretendieron negar su existencia y esconder sus efectos, con el perverso argumento de que si lo hacían ello podría generar pánico y caos entre la población. Los verdaderos socialistas revolucionarios decimos que la información oportuna, completa y veraz jamás será la causante de pánico y zozobra, por el contrario, lo que origina el caos son las mentiras y el interés mezquino de gobiernos y gobernantes, de pretender ocultar información para evadir sus responsabilidades.
2. Creación de un Comité Nacional Interinstitucional e Interdisciplinario, en el que confluyan autoridades de salud, organismos de prevención y manejo de emergencias, autoridades políticas locales, estadales y nacionales, para que conjuntamente con organizaciones sindicales, populares y comunales, hagan seguimiento, evaluación y definan los planes para la prevención, atención y gestión de la recuperación de personas afectadas.
3. Este Comité Nacional hará uso de los medios de comunicación públicos, privados y en manos de las comunidades, para transmitir la información pertinente. Se sancionará a quien pretende hacer uso político de la información, a quien exagere, minimice y tergiverse la información suministrada. Los diarios, programadores de televisión, radios, páginas web destinarán al menos un 20% de sus espacios para difundir la información presentada por el Comité Nacional y para desarrollar actividades pedagógicas que permitan a la población comprender las dimensiones de la enfermedad, cómo prevenirla y cómo tratarla.
4. En particular exigimos que se revoque la decisión del Ministerio de Agricultura y Tierras, de la supresión del Servicio Autónomo de Sanidad Agropecuaria (SASA) y se reinstale en sus puestos de trabajo, bajo condiciones de estabilidad laboral plena y de respeto a sus derechos a los 2.969 empleados de la institución. La inconveniencia y arbitrariedad de suprimir este importante ente, queda en evidencia con la presente crisis sanitaria que vive el país.
5. Expedición de un Decreto Nacional de Emergencia para atender la pandemia con el rango de valor y fuerza, en el que se contemplen entre otros, los siguientes aspectos:
– Obligatoriedad a todos los centros médicos y asistenciales, públicos y privados, de atender en forma gratuita a todos los pacientes que sospechen ser portadores del virus. Serán sancionados con pérdida de licencia para operar y juicios penales a aquell@as funcionari@s, médicos o personal paramédico que se niegue a atender a personas que presenten la sintomatología de la Gripe A H1N1.
– El Gobierno Nacional redefinirá las partidas presupuestales destinada a la salud y aportará recursos adicionales suficientes. Al menos el 50% de los recursos existentes actualmente en el Fondem deben ser destinados, para el mejoramiento de la infraestructura hospitalaria, prestación de mejores servicios y la dotación de todas las entidades encargadas de atender la salud pública. Igualmente, un mínimo del 25% de los excedentes petroleros deberán ser destinados en la presente coyuntura para atender la coyuntura.
– Todos los centros médicos, clínicas, hospitales y demás centros asistenciales, tanto públicos y privados que conforman el Sistema Nacional de Salud, la destinación del 15% de sus presupuestos y el 10% de sus plantillas de empleados, personal médico y paramédico, para que adecuen las instalaciones, instalen Pabellones Especiales para atender a las posibles personas afectadas y cubrir los costos de los servicios de laboratorio y atención a los pacientes.
– Confiscación, sin indemnización de los reactivos, productos químico-farmacéuticos y medicinas requeridas por el servicio médico para hacer las pruebas de despistaje, que estén en posesión de laboratorios, farmacias y todo tipo de distribuidores de medicamentos. Todas estas acciones serán realizadas de común acuerdo con organismos de control, fuerza pública y la participación directa de las comunidades a través de sus representantes.
– En vista de que el calendario educativo en las modalidades de pre-escolar, primaria y liceos han cumplido más del 90% de su pensum, se den por terminadas las clases a partir de este 18 de junio y sólo se reinicien clases del nuevo año lectivo una vez se tenga pleno control de la emergencia. Esta medida no afectará salarios, prestaciones y derechos contractuales de personal docente. Durante este tiempo, los docentes y sus organizaciones sindicales deben promover la realización de charlas educativas y acompañamiento pedagógico a las comunidades para hacerle conocer los riesgos existentes y las medidas preventivas y manejo de casos potenciales de enfermedad.
– Instalación de puntos de vigilancia epidemiológica en terminales de transporte terrestre, aeropuertos y puertos marítimos, con personal idóneo que esté en capacidad de atender con índices de calidad y esmerada atención a transeúntes internos y personas llegadas del exterior.
– Las empresas químico-farmacéuticas, los laboratorios, las empresas que controlan la distribución y comercialización de medicamentos y las empresas aseguradoras que cubren pólizas de Hospitalización, Cirugía y Maternidad, estarán obligadas a entregar un aporte especial correspondiente al 25% de sus utilidades netas anuales. Con dichos recursos se conformará un Fondo Nacional de Emergencias, que será manejado en forma transparente por el Comité Nacional Interinstitucional e Interdisciplinario, y bajo permanente auditoría de los organismos de vigilancia del Estado y la Contraloría Social.
– El personal médico y paramédico existente en el país, quedará a plena disposición del Comité Nacional Interinstitucional e Interdisciplinario, para que atienda todas las emergencias que se presenten en el territorio nacional e incluso para atender casos que se presenten en naciones hermanas. Para ello se les brindarán todas las garantías para que presten sus servicios bajo estándares de calidad apropiadas con la naturaleza de la emergencia. Sus servicios profesionales serán dignamente remunerados con recursos del Fondo Nacional de Emergencias.
– Se sancionará ejemplarmente a quien discrimine de cualquier forma a pacientes que sospechen estar afectados por la enfermedad o se les haya comprobado que son portadores del virus. Todo hecho de corrupción asociado al manejo doloso de recursos destinados para atender esta emergencia será penalizado severamente.
Los socialistas defenderemos estas propuestas, llamamos al pueblo a que se movilice para que se materialicen y apoyaremos todas aquellas iniciativas que de una u otra forma permitan hacer frente a la pandemia generada por el virus de la Gripe A H1N1.
Estas son las medidas de transición básicas que un genuino gobierno revolucionario de los trabajadores y el pueblo debe adoptar frente a situaciones de esta naturaleza.Del mismo modo conminamos a los trabajadores y al pueblo en general para que se disponga a tener la mejor actitud solidaria, propia de nuestra idiosincrasia, y poner de manifiesto nuestra vocación de voluntariado para contribuir en el manejo de esta emergencia sanitaria nacional e internacional.
Caracas, 12 de junio de 2008
Por la Unidad Socialista de Izquierda: Orlando Chirino, Miguel Ángel Hernández, José Bodas, Emilio Bastidas, Armando Guerra, Simón Rodríguez Porras.