Condena a Rubén González pretende intimidar a sindicatos

Miércoles, 02 de marzo de 2011

Yadith González, esposa de González coincide con el Foro por la Vida: “Está tras las rejas por reivindicar el derecho a exigir derechos”.
“La sentencia es una clara demostración que el gobierno le teme al protagonismo popular que interpela a los poderes públicos. Le teme al surgimiento de un movimiento sindical clasista que imponga una agenda social de lucha por mejorar las condiciones de vida y trabajo de los trabajadores”, concluye el manifiesto de la coalición de organizaciones de derechos humanos en el país: Foro por la Vida. Ni siquiera la posición de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), a favor del dirigente sindical, ha sido tomada en cuenta por el Gobierno nacional como garante del cumplimiento de los convenios que privilegian la libertad sindical y el derecho a huelga.

Repulsión laboral

Representantes del movimiento sindical manifestaron su repulsión a la sentencia contra Rubén González y preparan acciones contundentes para exigir su liberación. Dirigentes oficialistas tampoco ocultaron su molestia. “Esto no puede pasar por debajo de la mesa”, afirmó el directivo de Sutiss José Meléndez. La presidencia del sindicato siderúrgico guardó silencio.

La dirigencia sindical, en general, amaneció molesta. La sentencia de siete años y medio contra el secretario general de Sintraferrominera, Rubén González, logró despertar algunas voces que -tras casi dos años de privación de libertad- se habían mantenido calladas.

La respuesta a la sentencia pretendía ser contundente, siempre y cuando contara con el apoyo de los trabajadores. Algunos dirigentes intentaron generar ese ruido en las principales arterias viales con quema de cauchos, pero en cuestión de minutos la Policía del Estado Bolívar disolvió la intención.

No había trabajadores en las calles pero en casi todas las estatales se comentaba lo mismo: la sentencia contra el hombre que liderizó junto a los trabajadores la huelga en Ferrominera Orinoco.

Donde sí no hubo referencia a lo ocurrido el lunes en el Palacio de Justicia fue en la asamblea de trabajadores convocada por el secretario de organización, Alfredo Spooner, quien acompañado por dirigentes de la Fuerza Bolivariana de Trabajadores (FBT), invitó a los ferromineros a ejercer el derecho a la protesta.

En la asamblea reiteraron que no enviarán mineral a Sidor y Orinoco Iron hasta tanto las empresas cancelen las deudas que van por encima de los Bs. 600 millones. Trabajadores de la gerencia de ferrocarril y PMH informaron a los presentes que el lunes no hubo despacho, tal como consta en los documentos leídos en el portón 1.

Mientras la FBT aludía al carácter combativo del Movimiento 21, otro grupo de dirigentes sindicales fue hasta la tribuna ferrominera sin encontrar mayor eco de los trabajadores.

Realizaron dos asambleas en paralelo. En una, Spooner mandaba a los dirigentes a ocuparse de los asuntos de sus empresas y en la otra, el secretario de acta y correspondencia de Sintraferrominera -Omar Marcano- exhortaba a los trabajadores a perder el miedo y defender lo que les corresponde con la verdad por delante.

No hubo encontronazos. La dirigencia sindical dio una discusión amplia donde participaron militantes de diferentes partidos que coinciden en que la condena a González es un “grave” precedente que desdice del talante obrerista del Ejecutivo y su equipo político.

“En los tribunales se hizo un acto criminal”

“Enjuiciaron al verdadero secretario general de Sintraferrominera. Lo único que hizo Rubén González fue ponerse al frente de la lucha de los trabajadores, como es su responsabilidad. Rubén acudió al llamado e hizo lo que siempre ha hecho: ser un luchador social”, dijo Marcano en rueda de prensa junto a los dirigentes Alejandro Álvarez (Sidetur), José Cedeño (Edelca), José “Acarigua” Rodríguez (Sidor), Jhonny Luna (Sidor), Benjamín Moreno (FMO), Henry Arias (Alcasa), entre otros.

También hablaron en nombre de José Morocoima (Bauxilum), Estilito García (Venalum), Emilio Campos (Sutracarbonorca) y demás dirigentes que se han unido en un frente por la defensa de la libertad sindical y en especial de Rubén González.

“Los trabajadores de ferrominera podemos decir que tenemos una rabia y un dolor por dentro, muy profundo, por esta decisión que acaba de tomar el tribunal (…) Sabemos que este es el camino para acabar con la democracia sindical que durante años ha defendido los derechos de los trabajadores, como lo es la convención colectiva”.

La dirigencia aseguró que se mantendrá en las calles y que continuarán organizando una movilización que estaba pautada para el 26 de marzo y que, probablemente, sea adelanta.