Enrique Plata «El Rey»

Él, sale de su casa ubicada en el Sector Los Chorros de Milla al norte de la ciudad de Mérida escoltado por motos «Mosca» de esas que acompañan a las suntuosas caravanas de Reyes y Príncipes, pero de menor cilindrada. Al volante de esas motos y como parrilleros, ex-PoliChoros de las Fuerzas Armadas Policiales del Estado Mérida (FAPEM) le van abriendo paso entre semáforos y colas propias de una ciudad colapsada por la alta afluencia vehícular y la ineficiencia de la Policía Víal del Municipio.

Los merideños se asombran y se preguntan ¿y quién será ese al que vienen escoltando y abriéndole paso? ¿Será acaso un Ministro?, ¿Será acaso algún Embajador?, ¿Será acaso el Presidente?, ¿Será que resucitó el de Ali-Lente?, ¿Será que acaso vino el Papá?

¡Pues no! Es el Rey, ¡Allí viene, es Enrique Plata, el Rey!

Él, sale de su casa ubicada en el Sector Los Chorros de Milla al norte de la ciudad de Mérida escoltado por motos «Mosca» de esas que acompañan a las suntuosas caravanas de Reyes y Príncipes, pero de menor cilindrada. Al volante de esas motos y como parrilleros, ex-PoliChoros de las Fuerzas Armadas Policiales del Estado Mérida (FAPEM) le van abriendo paso entre semáforos y colas propias de una ciudad colapsada por la alta afluencia vehícular y la ineficiencia de la Policía Víal del Municipio.

Los merideños se asombran y se preguntan ¿y quién será ese al que vienen escoltando y abriéndole paso? ¿Será acaso un Ministro?, ¿Será acaso algún Embajador?, ¿Será acaso el Presidente?, ¿Será que resucitó el de Ali-Lente?, ¿Será que acaso vino el Papá?

¡Pues no! Es el Rey, ¡Allí viene, es Enrique Plata, el Rey!

Luego él, (El Rey Enrique) Amo y Señor de la Zona Educativa Nº 14 del Ministerio del Poder Popular para la Educación correspondiente al Estado Mérida, llega al fin a la Avenida 4 entre calles 21 y 22 donde está su Palacio, allí los motorizados «Moscas» que le venían escoltando desde su hogar y los que venían dentro del vehículo cuidándolo en un primer anillo, detienen el tráfico atrás mientras otros le hacen otro anillo de seguridad para que él camine entre quienes cree sus vasallos. Algunos le sonríen y saludan (unos con adulación y otros con rabia contenida): ¿Cómo está su majestad? ¡Bienvenido a Palacio! Uno de sus vasallos preferidos, gordito él, de pelo rapado y ojos achinados le abre la compuerta de la camioneta o del vehículo que ha utilizado para trasladarse ese día. Si acaso estuviere lloviendo ese mismo gordito u otro de sus vasallos incondicionales camina junto a él cubriéndolo con un Paragüas. Y así comienza el día entre saludos hipócritas y ovaciones.

Si algún trabajador lo aborda de manera normal para preguntarle algo, enseguida varios ex-polichoros recién contratados por ÉL para su protección le rodean y marcan distancia con mirada amenazante. No importa quién se acerque a preguntarle algo pues enseguida sus «guarda espaldas» rodean a quien pregunta mientras otros de su seguridad monárquica le vigilan a pocos metros por si acaso hiciera falta proteger a él, Rey de una pregunta incómoda.

Casi siempre que alguien con necesidad de saber algo respecto al estatus de algún trámite atrasado se le acerca, el Rey Enrique le comienza a alzar la voz y a hacer señas desesperadas con la cabeza y las manos para que sus ex-polichoros escoltas estén atentos y rodeen a quien pregunta.

Los trabajadores que se niegan a ser sus vasallos son tratados vilmente por el Rey Enrique. No hay quien pueda negársele con razón a ninguna orden sin que sea castigado, señalado, amenazado. Es el Rey.

El pasado Día del Maestro como caía Sabado 15 de Enero, el Rey, para congraciarse con su Plebe celebró una Fiesta el Viernes 14 por todo lo alto en El Club Militar. Pero la fiesta no fue sólo para los maestros que bien se lo merecen, sino que fue un agasajo a todo el Personal de Planta y de toda las instituciones pertenecientes a la Zona Educativa. Y eso que apenas acababan de iniciar las clases tras la emergencia por las lluvias.

Hubo Cerveza, Ron, Whisky y Coca-cola. Y luego dice el propio Rey que las cosas están muy mal económicamente y que por eso no hay pagos para esto y para lo otro. Cosas de Reyes, Reyesuras.

Mientras esto ocurría en el Club Militar, a las puertas del Palacio, es decir, de la Zona Educativa un numeroso grupo de trabajadores protestaba y pintaba pancartas exigiendo el pago del retroactivo del cestaticket correspondiente al año 2010 el cual aun les deben y ya se van sumando también estos meses del 2011 que van corriendo. También ocurre que en la Comarca del Rey Enrique Plata el PAE apenas se está cumpliendo en un 8 % de las instiuciones. Esta irregularidad se viene presentando hace ya más de un año pues durante casi todo el período 2009-2010 no hubo PAE en casi ninguna institución y eso es algo que lo sabe todo el mundo en Mérida.

Pero eso no es todo, este sábado pasado 12 de Febrero 2010, el Rey y sus más cercanos colaboradores celebraron en el Hotel Valle Grande en San Javier del Valle, los años de gestión que ÉL tiene ya Reinando. Impresionante agasajo. También hubo unas cuantas cajas de Whisky del bueno. Dicen que en el Ministerio del Poder Popular para la Educación las cosas están mejorando, pues ahora en vez de Jefes de Zona, los Ministros o Ministras contratan Reyes para esos cargos.

Como el Rey Enrique está ubicado en lo más alto de su Palacio, para llegar a sus predios hay que dejarse humillar por sus ex-plichoros escoltas. A profesores, visitantes, administrativos y obreros hay que revisarles a fondo no vaya a ser que haya alguien que quiera atentar contra su Majestad. No importa que la persona que se acerca a los predios del Rey tenga probada moralidad y trayectoria igual debe dejarse humillar por ex-polichoros recién contratados por su majestad para su cuidado personal. Ex-polichoros que por cierto fueron ya despedidos de las fuerzas policiales por andar en grises y delicados asunticos que se comentan en toda la comarca. Entonces son estos cuestionables de dudosa conducta y comportamiento quienes exigen a profesores, obreros, empleados y visitantes, el someterse a sus tratos delictivos.

Mucha gente en la Comarca del Rey Enrique se queja de que los han dejado por fuera al momento de asignarles el cargo fijo que merecen por haber estado trabajando como cotratados durante años. O por haber realizado infinitas suplencias muchas aun ni siquiera pagas aunque lo hayan hecho bien y hayan salido excelente en consecutivas evaluaciones de desempeño. Eso al Rey no le importa. Los dejan por fuera para que puedan entrar Súbditos (Esclavos) de él. De esta manera el Rey se asegura su permanencia en el reinado, desplazando a trabajadores honestos y colocándo súbditos en todos los rincones de la Comarca el Rey se garantiza ovaciones y buenos conceptos hacia él.

En las pasadas elecciones un familiar cercano al Rey, desconocida por todos en la Comarca, sorprendió a todos en el Reino lanzándose a Candidata. Llovieron ofrecimientos de cargos, carpetas van carpetas vienen, curriculums que aperecen y otros que desaparecen, sonrisas iban y sonrisas venían. Todos en Palacio tuvieron que hacer Campaña por ella, pues se trataba de una orden dada por el Rey, pues la familia del Rey debe ser tratada con la Majestad que merece así que la orden fue: ¡Votando por ella Votas por el Rey!, y así han continuado ocurriendo episodios en la Comarca.

Hoy en día siguen lloviendo ofrecimientos, carpetas van y carpetas vienen, unas que aparecen otras que desaparecen, todo por orden del Rey.

¡Viva el Rey!

¡Que su reinado sea Eterno! gritan los más súbditos, Enrique Plata, Rey de la Zona Educativa Nº 14 del Ministerio del Poder Popular para la Educación, por encima de un Ministro o Ministra manda un Rey, por encima de un Presidente también, por eso muchos están con él lo escoltan a donde vaya, a pie o en carro. Así vaya al Consejo Legislativo que queda en la esquina de la Plaza Bolívar, a la Gobernación o a algún otro virreinato o Distrito, ahí están los guarda espaldas siempre rodeándolo y cuidándolo no se sabe de qué, de quién o de quiénes.

Y es que Enrique Plata quiere imponer su ley como todo Rey a costa de lo que sea. Aunque no tenga trono ni reina él asegura que sigue siendo el Rey Si hay que violar o inventar su ley él lo hace. Para eso se hizo Rey.

Y la gente se pregunta: ¿Pero, y qué habrá hecho de malo su excelentísima majestad, Enrique Plata para hacerse escoltar desde que sale de su hogar hasta que regresa, dentro y fuera del vehículo siempre habrá algún escolta, dentro o fuera de su despacho también, cuando desayuna, o almuerza, o cena, o merienda también están allí. ¿Y cómo hará cuando va al baño?.

A otros Reyes como Juan Carlos de Borbón o al mismísimo Principe Carlos no se le ha visto tan protegido. Mucho menos a Ministros o cualquier otro funcionario. Será por aquello de que Rey es Rey.

¿Y qué dirá a todas estas la nueva Ministra?

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