Líderes religiosos critican a Hawking por describir científicamente el origen del universo
Varios líderes religiosos arremetieron contra el astrofísico Stephen Hawking por explicar que el concepto de Dios no cumple ningún papel en las teorías vigentes sobre el origen del universo. El arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, y el rabino jefe, Jonathan Sacks, atacaron a Hawking. De manera sorprendente, Sacks aseguró que «la ciencia desarticula las cosas para ver cómo funcionan. La religión las junta para ver qué significan. Son dos empresas intelectuales distintas. Incluso ocupan diferentes hemisferios del cerebro», afirmaciones extrañas y carentes de fundamento.
Varios líderes religiosos arremetieron contra el astrofísico Stephen Hawking por explicar que el concepto de Dios no cumple ningún papel en las teorías vigentes sobre el origen del universo. El arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, y el rabino jefe, Jonathan Sacks, atacaron a Hawking. De manera sorprendente, Sacks aseguró que «la ciencia desarticula las cosas para ver cómo funcionan. La religión las junta para ver qué significan. Son dos empresas intelectuales distintas. Incluso ocupan diferentes hemisferios del cerebro», afirmaciones extrañas y carentes de fundamento.
Pero lo peor es que el arzobispo de Westminster y primado de la Iglesia católica de Inglaterra y Gales, Vincent Nichols, dijo suscribir totalmente las palabras de Sacks. Ibrahim Mogra, presidente del Consejo Islámico de Gran Bretaña se sumó a los ataques y dijo que «si uno mira el Universo, todo apunta a la existencia de un creador que le dio origen».
Ninguno de los líderes dijo si había leído el libro de Hawking, «The Grand Design», o si lo habían entendido.
El Big Bang, la gran explosión en el origen del Universo, fue consecuencia inevitable de las leyes de la física, argumenta el científico británico, que ha escrito el libro al alimón con el físico estadounidense Leonard Mlodinow.
En opinión de Hawking, es probable que existan otros universos.
Para Hawking, la teoría-M, proposición que unifica las distintas teorías de las supercuerdas, es la teoría unificada con que soñaba Einstein, capaz de reconciliar la teoría cuántica, que da cuenta del mundo subatómico, con la de la gravedad, que explica la interacción de los objetos a escala cósmica.
El biólogo Richard Dawkins, autor del libro «El Espejismo de Dios», declaró a The Times que «el darwinismo expulsó a Dios de la biología, pero en la física persistió la incertidumbre. Ahora, sin embargo, Hawking le ha asestado el golpe de gracia».