Show electorero en el Palacio de Miraflores
Caracas, 15 de abril.- En un acto desde uno de los balcones del Palacio de Miraflores este viernes 13 de abril, Chávez realizó un discurso cargado de retórica religiosa, con relación a su enfermedad. Además de anunciar sus intenciones de cancelar su asistencia a la Cumbre de las Américas, debido a recomendaciones médicas, el presidente-candidato también repitió de manera obsesiva insultos en contra del candidato derechista Capriles Radonski, e incluso dijo haber creado un «comando antigolpe».
Caracas, 15 de abril.- En un acto desde uno de los balcones del Palacio de Miraflores este viernes 13 de abril, Chávez realizó un discurso cargado de retórica religiosa, con relación a su enfermedad. Además de anunciar sus intenciones de cancelar su asistencia a la Cumbre de las Américas, debido a recomendaciones médicas, el presidente-candidato también repitió de manera obsesiva insultos en contra del candidato derechista Capriles Radonski, e incluso dijo haber creado un «comando antigolpe».
El Presidente dijo que la MUD no aceptaría los resultados de las elecciones de octubre, y que estaría conspirando contra él. «He decidido nombrar un comando especial antigolpe y ese comando ya está funcionando», dijo Chávez, agregando que su función «va a ser elaborar en las próximas semanas el plan especial antigolpe, un plan integral que tiene que ver con todos los ámbitos de la realidad nacional».
«La conspiración está en marcha… si (a la MUD) se le ocurriera desconocer los resultados y la victoria del pueblo todo el mundo a la calle, todo el pueblo a la calle. Y no solo el pueblo, pueblo y soldados a la calle», dijo.
¿Otro bluff chavista?
En todos los procesos electorales, el gobierno chavista utiliza en términos publicitarios el golpe de abril de 2002, para cohesionar sus bases. Lo cierto es que hoy en día muchos de quienes apoyaron ese golpe son miembros del gobierno chavista, o tienen alianzas con él, como en el caso de Arias Cárdenas o el magnate Gustavo Cisneros. Desde hace más de siete años, las relaciones del gobierno con los sectores empresariales que apoyaron el golpe se han normalizado, e incluso con la Iglesia Católica el gobierno tiene grandes acuerdos y le otorga millonarios subsidios. Pero en el presente proceso electoral, Chávez ha admitido ante sus seguidores en discursos recientes que se encuentra en situación de «empate» con el candidato de la oposición de derecha. Esta situación indudablemente genera nerviosismo en las filas gubernamentales, no sólo afectadas por una creciente ruptura de su base social sino además enfrentadas a la incertidumbre de una enfermedad presidencial de extrema gravedad. De ahí que no sea extraño que Chávez hable de crear un comando antigolpe, aunque en realidad el escenario en el que se mueven tanto el Psuv como la MUD es el electoral.