Trabajadores de la nueva cárcel de Uribana exigen sus pagos con acciones de calle

Uribana, estado Lara. El 10 de diciembre de 2009 cesaron funciones los 210 hombres que disponen de su fuerza física para edificar la nueva cárcel de Uribana, salieron de vacaciones y por tanto la construcción, a cargo de la empresa Vialpa, se paralizó. Con ansias esperaban a que les depositaran el arreglo que se hizo efectivo el 23 de diciembre a las 5pm y de acuerdo con sus testimonios de manera incompleta.

Uribana, estado Lara. El 10 de diciembre de 2009 cesaron funciones los 210 hombres que disponen de su fuerza física para edificar la nueva cárcel de Uribana, salieron de vacaciones y por tanto la construcción, a cargo de la empresa Vialpa, se paralizó. Con ansias esperaban a que les depositaran el arreglo que se hizo efectivo el 23 de diciembre a las 5pm y de acuerdo con sus testimonios de manera incompleta.

Desde entonces no han recibido más dinero ni el pago quincenal. De acuerdo con explicación de los trabajadores, esta semana debieron reiniciarse las labores de construcción, pero llegaron a la obra, justo al lado del penal que actualmente está en servicio, y no hubo ningún representante de la empresa que ganó la licitación para la construcción de la obra.

Ante la ausencia de una respuesta y personal representativo de Vialpa, los trabajadores decidieron trasladarse a la Gobernación para pedirle al gobernador que medie por ellos ante el Ministerio de Interior y Justicia, y exponga la situación por la cual atraviesan.

Esperaron media hora y nadie los atendía, entonces optaron por hacer presión obstaculizando el tránsito y se acostaron en la carrera 19 con pancartas en mano reclamando el dinero que les adeudan y expresando que son sus familias quienes padecen la falta de dinero para suplir una necesidad básica como es la alimentación. El gobernador no estaba pero los atendió el director de Seguridad y Orden Público de Lara, general José Maldonado Dupuy.

El presidente de Suticel, Pedro Peña, explicó que «la empresa Vialpa no ha dado la cara para decirle a los trabajadores cuál es el problema por el cual no les pagan utilidades y salarios. Nadie da la cara, no se han acercado a la obra y tampoco contestan teléfonos».

El Fonep informa

En comisión se han trasladado al Fondo de Edificaciones Penitenciarias (Fonep), desde donde suministran los recursos a la constructora, para solicitar información y la única solución que les aportan es esperar, «pero aquí los trabajadores no pueden porque los hijos no esperan, el hambre no espera a nadie. Hay niños que no pueden ir a la escuela, hay esposas hospitalizadas», señaló.

En Caracas sólo les dijeron que deben esperar, por eso «vamos a ver si el gobernador puede hacer una conexión con el Ministerio de Justicia ya que es la primera autoridad del estado y debe interceder por esta situación, también debe tener el interés de que esa obra tenga el presupuesto para ser terminada».

Algunos trabajadores que acudieron al Fonep manifestaron que desde allí le habrían entregado el recurso económico a Vialpa para la ejecución de la primera parte de la obra, pero aseguran que también la constructora tiene el contrato para la reconstrucción de un tramo vial de Guarenas hacia oriente.

Además manifestaron que el ingeniero residente en la obra de la cárcel dice ser el primo del ministro Tareck El Aissami. «Con eso nos trata de amedrentar cada vez que ha habido quejas y protestas por los pagos», señalaron.

También mencionan como un hecho curioso la adquisición de unas maquinarias nuevas entre las cuales mencionan cuatro grúas telescópicas que dispusieron para la construcción de la cárcel.

Pendientes

De acuerdo con información aportada por miembros del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción del estado Lara ninguna construcción de carácter público ha iniciado actividades formalmente, entre ellas mencionaron El estadio Metropolitano, nuevo terminal de pasajeros, Transbarca, Sistema Hidráulico Yacambú-Quíbor y cárcel nueva.

En esta lista también apuntaron a la torre del Central Banco Universal, en la avenida Venezuela, la cual pertenece a la entidad financiera que ahora forma parte del Bicentenario y es de administración pública y de la cual desconocen cuándo honrarán compromisos con los contratistas.

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