Bolivia: ¡Viva el paro de maestros de La Paz y la lucha de los normalistas!

La Federación de Maestros Urbanos de La Paz convocó para el viernes 12 de marzo a un paro con movilización. Los docentes paceños determinaron movilizarse en protesta a la suspensión del pago de los bonos de frontera y de zona, en demanda de un incremento salarial consonante al alza del costo de la canasta familiar y por la paralización administrativa en la Dirección Distrital de Educación de El Alto.

El ministro de Educación, Roberto Aguilar ha dicho que “la protesta no está en el marco de la ley” y que «no hay razón para que sigan amenazando a los estudiantes con un paro, lamentablemente están en un marco de desesperación de carácter sindical». Además amenazó con sanciones y descuentos. El MAS está intentando movilizar a sectores de los padres contra la huelga.

La respuesta del ministro a un legítimo reclamo sindical es igual a la que sistemáticamente utilizaban los anteriores gobiernos neoliberales. ¿Por qué esta “fuera del marco de la ley” un reclamo de aumento salarial? ¿Por qué el gobierno miente con las estadísticas y dice que “no hay inflación”, cuando cualquier persona que compre en los mercados sabe que sí la hay? Calificar de “ilegal” un reclamo de aumento salarial es una actitud propia de un gobierno patronal. El reclamo de un aumento salarial que compense la inflación es una medida de defensa mínima que deberían tomar todos los dirigentes del sector asalariado con la COB a la cabeza. Porque en realidad es tan solo pedir que con el salario se pueda comprar lo mismo que antes. La inflación nos roba parte del salario. Nos rebaja el salario real. Pedir compensar la inflación es pedir que sigan pagando lo mismo en valores reales.

También es muy grave que se apele a los padres de los niños en edad escolar, para intentar oponerlos a los maestros de sus hijos que piden algo totalmente legal y legítimo. ¿Qué enseñanza puede quedar para un niño que ve a su padre enfrentar a su maestro que solo pide un salario digno?

Conversamos con el compañero Mario Darío Tola, dirigente estudiantil UPEA, dirigente vecinal y de Junta Escolar del Distrito 6 de El Alto, nos señaló que las juntas vecinales tienen su propio proyecto de educación que están reclamando desde hace mucho al gobierno, que incorpore la educación técnica, preparación para el trabajo. Y que ante la huelga de maestros están proponiendo la unidad a los maestros para apoyar el paro de los maestros, pero que los maestros apoyen también sus peticiones de cambios a favor de la educación popular.
Este es un ejemplo de lo que hay que hacer: unir los reclamos populares y de los trabajadores, reclamos totalmente legítimos que el gobierno se niega a atender.

Algo similar ocurre con la lucha de los normalistas. La compañera Lida Mamani, ex dirigente de la FUL de la UPEA y miembro de la Comisión de padres de normalistas, nos informó que la policía arremetió contra los estudiantes el pasado viernes en La Paz. ¡Son jóvenes reclamando su derecho a estudiar!

Es vergonzoso que los dirigentes nacionales del magisterio y la COB permanezcan mudos frente a estos conflictos. ¿O es que el aumento de los precios no afecta a los maestros de Cochabamba, Santa Cruz, Oruro y otros departamentos? ¿O es que no afecta al conjunto de los trabajadores? ¿El derecho a estudiar no es también un derecho de todas las familias populares?
Y este derecho se afecta cuando existe un déficit de miles de cargos en educación. En muchos distritos se hacinan alumnos en lugares chicos, sin mobiliario adecuado, cargando el trabajo sobre el maestro.

La dirección de la COB, que viene postergando el congreso da la organización y que tiene su mandato vencido hace más de un año, permanece subordinada al gobierno. Los dirigentes derecho a tener simpatías por el gobierno o ser parte del MAS, pero en primer lugar se deben a sus bases. Si no actúan en defensa de sus bases, que renuncien y pidan un cargo oficial o trabajen en sus oficios. Pero no pueden ignorar los reclamos y necesidades de los trabajadores. Puede ser incluso que muchos trabajadores digan que está todo bien y que no necesitan reclamar más salarios o que no quieren hacerlo para no afectar los planes del gobierno. Pero, en caso de ser así, esto debe resolverse democráticamente, en asambleas, congresos democráticos de las organizaciones, y no porque los dirigentes lo digan.

En cualquier caso, creemos que es obligación de cualquier dirigente sindical o de la FEJUVE expresar su apoyo a la lucha de los maestros de La Paz y a la movilización de estudiantes normalistas. Estas luchas por el salario y la educación popular interesan a todos los trabajadores y oprimidos. Llamamos a todos los trabajadores, y especialmente a los de La Paz y El Alto, así como a los dirigentes vecinales y populares a apoyar a los maestros y normalistas y a denunciar cualquier medida de represión o sanción contra una lucha totalmente legítima.