Bolivia: Voto castigo y derrota del MAS
Por: La Protesta
31 de marzo 2015. A sólo 4 meses de las elecciones nacionales, en las que el gobierno masista cantaba victoria, con un 61%, ayudado por el fraude del TSE (Tribunal Electoral), las recientes elecciones Departamentales y municipales resultaron en una fuerte derrota electoral del gobierno a escala nacional que sufrió un masivo voto castigo de la base popular.
El MAS perdió las alcaldías de las cuatro ciudades principales, La Paz, El Alto, Santa Cruz y Cochabamba. Pierde además la mayoría de las ciudades, como Oruro, Tarija, Trinidad, Cobija, Yacuiba. Sólo logra ganarle en Sucre al candidato fascista Barrón y en Potosí gana gracias a que proscribió al ex senador del MAS Eduardo Maldonado, el único que se opuso a la ley minera proimperialista. Respecto a gobernadores, gana en Cochabamba, Oruro y Potosí, pierde en los Departamentos de La Paz (que antes dirigía el MAS), Santa Cruz y Tarija. y deberá disputar en segunda vuelta las de Chuquisaca y Beni, donde es casi segura la derrota del MAS.
Voto Castigo
Lo ocurrido sólo puede explicarse, sobre todo en Departamentos como La Paz o en la populosa zona sur de la ciudad de Cochabamba, dónde siempre había ganado el MAS, como un masivo voto castigo, en gran parte de la propia base popular que en elecciones anteriores votaba por el MAS.
El voto castigo al gobierno es porque no hubo los cambios prometidos, porque la mayoría sigue en trabajos precarios, sueldos míseros o sin trabajo, vendiendo en la calle, porque la producción campesina no fue respaldada, porque el Fondo Indígena, una conquista de la movilización indígena campesina en el 2005, fue usado para la corrupción de los dirigentes y la división de las organizaciones. También pesó en muchos distritos, especialmente en el campo, el “dedazo” de Evo Morales que pasó por encima de la decisión de las organizaciones, en muchos casos eligiendo derechistas.
Esta decisión popular de voto castigo tomó aún más fuerza después de la amenaza chantaje de Evo Morales diciendo que “aunque no les guste deben votarlos” a sus candidatos, porque “si no los votan no habrá obras”.
Gobierno contra derechos democráticos, contra el instrumento político y contra el PT
El gobierno de Evo Morales hizo de todo para impedir reales expresiones del pueblo que cuestionaran su política. En primer lugar con su ley electoral de Banzer, un tribunal Electoral mañudo y sometido y dirigentes traidores de la COB, impidió la legalización del PT (Partido de los Trabajadores). Después persiguió, incluso con la cárcel en el caso de Shinaota, a todos los que desde las mismas bases del instrumento político intentaron volver a sus tradiciones, de que las bases decidan en asambleas y cabildos. En Potosí impidió que se presentara a elecciones a alcalde el ex senador Eduardo Maldonado, En Chuquisaca intentaron impedir que la Futpoch (Federación de Trabajadores Campesinos de Chuquisaca) presentar a sus candidatos, y sólo lograron que se presentara con sigla prestada y ganara las elecciones a la gobernación y en muchos municipios rurales.
La antigua derecha no es alternativa a favor del pueblo
Ni Soledad Chapetón en El Alto, del brazo de Doria Medina y Unidad Nacional, ni Revilla en La Paz continuidad del MSM que viene también de la antigua derecha, ni Felix Patzi que habla de un “Tercer Sistema”, pero va aliado a Revilla y defiende el mismo sistema capitalista que los otros, ni José María Leyes cuyo “curriculum” es apalear campesinos, ni su patrón, el derechista cruceño Rubén Costas, pueden dar ninguna alternativa a favor del pueblo. Ellos intentarán ahora unirse para decir que son alternativa al MAS. Pero todos ellos defienden, igual que el gobierno de Evo Morales, el saqueo de las petroleras y mineras transnacionales, la agroindustria terrateniente. Esto en un contexto de caída de los precios del gas y minerales significa que se unirán para aplicar un ajuste antipopular.
Reconstruir un instrumento político de los trabajadores de la ciudad y el campo, campesinos, indígenas y el pueblo
Lo ocurrido muestra que necesitamos urgentemente que las organizaciones sindicales, la Csutb, las Federaciones Campesinas, la COB, las Federaciones y Confederaciones sindicales de los trabajadores, la Fejuve de El Alto, rompan con el gobierno, saquen a los dirigentes vendidos al gobierno y las bases puedan elegir a auténticos dirigentes representativos, por la inmediata devolución de sus sedes usurpadas por el gobierno, a la Conamaq orgánica y Cidob orgánica. Necesitamos a nuestras organizaciones para luchar por nuestras demandas, por salarios acordes a la canasta familiar, porque el derecho a la sindicalización y la ley de trabajo sean para todos los trabajadores, por recuperar el Fondo Indígena administrado democráticamente para fortalecer la producción campesina, por expulsar a las transnacionales y que todo lo que hoy se llevan sirva para industrializar y crear trabajo, por terminar con el latifundio entregando tierras a los campesinos productores, y para luchar por esta perspectiva, formar un verdadero instrumento político de las organizaciones, con la Futpoch de Chuquisaca, con el PT, con los dirigentes de Shinaota que se han opuesto al dedazo de Evo, con Luis Alfaro y las organizaciones que lo apoyaron en Tarija, y con todas las organizaciones que vayamos recuperando.
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