Grecia: ¡Gran elección de la izquierda!

Grecia
Gran elección de la izquierda

Miguel Lamas

Las elecciones parlamentarias en Grecia (el Parlamento elige al gobierno) fueron una catástrofe para los partidos del brutal ajuste impuesto por la Unión Europea, Nueva Democracia (ND, conservadores) y PASOK (socialdemocracia) que gobernaron juntos en los últimos meses. ND ganó, pero con solo el 19% y el PASOK obtuvo el 13%. Ambos suman el 32%, cuando en anteriores elecciones alcanzaron el 78%). Esto se agrava aún más teniendo en cuenta que hubo un 40% de abstención: el porcentaje real de ciudadanos que votaron a ambos partidos no supera el 20%.
La izquierda tuvo un tremendo avance, alcanzando entre las distintas fuerzas un 33%. El segundo partido fue la Coalición de la Izquierda Radical-SYRIZA, que logró el 17% de los votantes. Esta coalición, que obtuvo 51 diputados, propone el fin del ajuste y no pagar la deuda, aunque contradictoriamente habla de permanecer dentro de la zona del euro.
El KKE, PC stalinista, obtuvo el 8%. El otro frente de izquierda (anticapitalista) ANTARSYA, sacó el 1,2%, triplicando su votación de 2009. ANTARSYA reclama suspender todos los pagos de deuda, nacionalizar sin pago los bancos, romper con la Unión Europea y control obrero de grandes empresas.
Los neonazis de Aurora Dorada el 7% (su eje de campaña es contra el ajuste, contra los inmigrantes y contra la izquierda).
Los diarios europeos hablan de una “pesadilla” en Grecia y nadie sabe qué gobierno puede formarse con el Parlamento absolutamente fragmentado (es necesaria alguna mayoría parlamentaria). Aunque la primera minoría, el mayoritario, ND en este caso, es “premiado” con 50 diputados adicionales (con lo que suma 108 sobre 300), ni siquiera así llega a formar una mayoría junto al PASOK (que además está en crisis total, con sectores que se niegan a seguir apoyando el ajuste).
Para el pueblo trabajador griego está claro que el ajuste fue abrumadoramente rechazado, tanto en las 17 huelgas generales realizadas los dos últimos años, como por la votación popular que, incluyendo la abstención, fue de un 80% contra el ajuste. Por eso, el combate para derrotarlo en las calles puede unificar a esta gran mayoría.
Ante la crisis política que revela la elección y la posibilidad cierta de que se forme un débil gobierno de derecha pro ajuste, se plantea la necesidad de seguir la lucha para derrotar el ajuste, imponer un plan económico al servicio de las mayorías populares y avanzar en el camino revolucionario para imponer un gobierno de las organizaciones obreras y populares junto a los partidos de izquierda