La inflación avanza y cierra el 2011 en 27,6%

La inflación en Venezuela sigue punteando en Latinoamérica y el hemisferio occidental. Con una escalofriante tasa del 27,6 por ciento cerró este año, de acuerdo con las cifras del Banco Central de Venezuela. En un contexto de congelamiento de salarios en gran parte del sector público y aumentos del salario mínimo magros, este indicador económico demuestra el rápido deterioro al que se se ven sometidos los escasos ingresos del pueblo trabajador en la tierra del capitalismo chavista.

A diferencia del desastre que significa este aumento en los precios al consumidor para la mayoría de la población, los sectores poderosos de la economía privada mostraron enormes ganancias, particularmente el sector bancario, el comercio importador y las telecomunicaciones.

«Estimaciones preliminares del BCV indican que, en este año que finaliza, el PIB registró una expansión de 4 %, el doble de la meta presupuestada. Resultado que estuvo determinado por el crecimiento del sector no petrolero (4,3 %) y el ascenso del sector petrolero (0,6 %)», dice un comunicado de fin de año del BCV.

El sector comercio creció 6,6%. La burguesía del sector construcción logró un crecimiento del 3,4 %, apuntalado por los negocios con el Estado.

La oferta de divisas extranjeras a precio oficial (subsidiado) aumentó en 12,7 %, lo cual también favoreció ampliamente al empresariado.

La sumatoria del índice de desempleo y el del trabajo informal alcanzó el 52,2%, según el INE. Indudablemente, en el 2011 la crisis del pueblo fue el botín de los explotadores.