Sutins sostiene que acciones de calle «son inminentes»

Puerto Cabello, octubre 31 (Foto archivo).- Trabajadores de Diques y Astilleros Nacionales C.A. (Dianca) decidirán este martes en asamblea general cuáles serán las acciones que tomarán para exigir a la gerencia de la empresa que respete los beneficios laborales y las reglas internas de la industria. El anuncio fue hecho a través de un comunicado de prensa por la directiva del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Naval y sus Similares (Sutins), documento en el que indican que «las acciones de calle son inminentes» e invitan a la masa laboral a asistir a la reunión pautada para las primeras horas de la mañana.

Los integrantes de Sutins sostienen que el eje costero está convulsionado por la situación existente en las empresas y que Dianca es uno de esos casos. Aseguran que la gerencia de la estatal sigue incumpliendo los pagos, entre ellos: el último decreto presidencial, la aplicación de la escala y el tabulador salarial, evaluaciones por desempeño y reclasificaciones. Asimismo, refieren que la cancelación de las utilidades se hizo sin tomar en consideración tales aumentos; por tanto, refieren una desmejora económica.

Sutins denuncia además que los trabajadores del astillero son víctimas de «amedrentamiento y amenazas por parte del patrono», situación que aseguran se repite con los delegados de prevención y dirigentes sindicales. «Es un hostigamiento permanente que no vamos a seguir permitiendo», sentenciaron.

La directiva sindical agrega en el comunicado que hay trabajos pendientes y urgentes en algunas embarcaciones, sobre todo labores relacionadas con soldadura, fabricación y mecánica; no obstante, dichas tareas son asignadas a personal recién ingresado, «lo que se tradujo en que estas personas cobrasen casi la misma cantidad en utilidades que personal con más de 10 años de servicio». Acerca de la contratación colectiva, la junta directiva de Sutins destaca que sigue sin avanzar por falta de voluntad, ya que «el patrono no quiere sentarse con la nueva dirigencia sindical».

Sostienen que desde hace 36 meses no reciben aumentos por concepto de contratación colectiva y que por ello se ha generado una retroactividad de al menos 60 mil bolívares fuertes, «sin contar con todos los beneficios socioeconómicos que dejamos de disfrutar que estarían contemplados en un anteproyecto que nunca se concretó y que sobre esto la ex directiva sindical anterior y la alta gerencia solo querían negociar 4 mil bolívares fuertes».

Adicionalmente, enfatizan que les adeudan 12 dotaciones de uniformes e implementos de seguridad y denuncian que existe inestabilidad para el personal mercerizado, pues no les conceden préstamos ni ayudas.