Votan mañana en Honduras consulta para reformar la constitucion

Tegucigalpa, 27 de junio (Télam).-Los hondureños votarán mañana en una consulta no vinculante que busca una reforma constitucional, considerada ilegal por la Justicia y que el jefe de las fuerzas arma

Tegucigalpa, 27 de junio (Télam).-Los hondureños votarán mañana en una consulta no vinculante que busca una reforma constitucional, considerada ilegal por la Justicia y que el jefe de las fuerzas armadas, Romeo Vásquez, se negó a organizar, mientras el presidente Manuel Zelaya explicó hoy que el militar está «suspendido» en sus funciones pero no destituido.

El material electoral para la consulta popular, organizada por el Instituto Nacional de Estadísticas, ya fue repartido y el comicio, no obligatorio, será custodiado por 14.000 policías.

La Casa Presidencial dijo que 15.000 urnas fueron distribuidas desde el viernes en los 18 departamentos del país, y se espera que alrededor de dos millones de personas, de los 7,5 millones de habitantes que tiene Honduras, vayan a votar, informó la agencia noticiosa italiana ANSA.

La directora del Proceso de Encuesta de Opinión, Fedra Tibot, sostuvo que unas 45.000 personas voluntarias participan en la actividad y que la policía «garantizará la seguridad y transparencia del proceso, e incluso una misión de acompañamiento de la Organización de los Estados Americanos (OEA) estará presente».

La votación comenzará mañana a las 7 locales (1 GMT) y concluirá a las 4 de la tarde, y las urnas serán colocadas en parques, escuelas, colegios, mercados y otros lugares públicos.

Zelaya declaró anoche que el general Vásquez «debía obedecer sus órdenes a fin de que se mantenga en el cargo», informó la agencia alemana DPA.

El mandatario, que sostuvo que el jefe de las fuerzas armadas es objeto de «extorsión de los grupos de poder», conformados por poderosos círculos empresariales y dueños de medios de prensa, también ordenó a los militares que regresen a los cuarteles y se retiren de las calles de la capital hondureña.

Las conservadoras bancadas de los partidos Liberal y Nacional, que dominan el Congreso y apoyaron la desobediencia del general Vásquez, estaban decididas a declarar inhabilitado al presidente Zelaya, «pero desistieron después de recibir llamadas de diversos lugares, inclusive del Departamento de Estado estadounidense», afirmó la diputada Doria Gutiérrez, del izquierdista partido Unificación Democrática (UD).

Zelaya consideró superado el riesgo de golpe de Estado, pese a que aún continúa la tensión política en el país, gracias al apoyo internacional que recibió su gobierno y la democracia hondureña por parte de la OEA, la Casa Blanca y los países de la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA).

A esos apoyos se sumó el pleno «respaldo a la institucionalidad democrática en Honduras» del Grupo de Rio, según un comunicado emitido por la Secretaría pro témpore a cargo de la cancillería mexicana.

El Grupo de Río está integrado por Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.

La oposición al presidente hondureño, conformada por sectores políticos conservadores, empresariales, dueños de medios de comunicación, la jerarquía de las iglesias católica y evangélica, y miembros de organizaciones de la sociedad civil, trató infructuosamente de detener a Zelaya para que no realizara la consulta.

El referendo es apoyado por organizaciones obreras, campesinas, indígenas, magisteriales, estudiantiles, algunos gremios profesionales y el partido UD.

«¿Cómo va a ser anticonstitucional una encuesta que no tiene carácter vinculante? Es un ejercicio democrático. Pero un juez influenciado por grupos de poder declaró que era ilegal», aseguró Zelaya, citado por el diario mexicano La Jornada.

El resultado de la votación no es vinculante y «se enmarca en la Ley de Participación Ciudadana, aprobada el 27 de enero de 2006», abundó.

Por su parte, la candidata independiente a la presidencia de la república y dirigente nacional de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras, Bertha Cázares, aseguró que estuvieron este viernes en la capital respaldando al presidente, «pues las fuerzas armadas y la oligarquía han querido dar un golpe de Estado».

«Atemoriza que el pueblo decida, por eso recuperamos de la fuerza aérea el material electoral que había sido secuestrado para impedir la encuesta», dijo.

Bertha Cázares enfatizó que la del domingo es una encuesta de opinión que el pueblo ha solicitado por escrito al presidente, y ésta fue convovada por conducto del Instituto Nacional de Estadística

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