Agenda Parlamentaria al servicio del pueblo trabajador
Los candidatos del partido Unidad Socialista de Izquierda nos comprometemos a impulsar en la Asamblea Nacional un «Paquete Nacional de Leyes de Emergencia» para enfrentar la crisis económica, política y social que vive el pais e impedir que sean los trabajadores y los sectores más desprotegidos de la sociedad los que carguen con el peso de la crisis económica nacional e internacional. Entre las leyes más importantes destacamos las siguientes:
Los candidatos del partido Unidad Socialista de Izquierda nos comprometemos a impulsar en la Asamblea Nacional un «Paquete Nacional de Leyes de Emergencia» para enfrentar la crisis económica, política y social que vive el pais e impedir que sean los trabajadores y los sectores más desprotegidos de la sociedad los que carguen con el peso de la crisis económica nacional e internacional. Entre las leyes más importantes destacamos las siguientes:
* Reforma de la Ley Orgánica del Trabajo, que garantice el aumento del empleo digno reduciendo la jornada laboral a 6 horas sin rebaja del salario, el derecho a huelga y la contratación colectiva, que defienda la autonomía sindical y la no injerencia estatal en la vida gremial.
* Ley de Salario Mínimo equivalente a la canasta básica, con ajustes automáticos trimestrales de acuerdo a los índices de inflación. Decreto de aumento general de sueldos y salarios en un 50% para todas y todos los trabajadores del país. Revisión de salarios anualmente con la participación de los trabajadores y sus organizaciones sindicales, para erradicar la práctica de los aumentos unilaterales de salario mínimo y la congelación salarial.
* Ley de emergencia del sistema de salud, por un sistema público integral, coordinado, de excelencia y gratuito desde la prevención, medicación y atención hospitalaria, para toda la población.
* Nueva ley que de tierras a los campesinos pobres que la trabajan, otorgándoles crédi-tos para la producción, herramientas y tecnología; termine con el latifundio y garantice la producción nacional de alimentos.
* Ley del Control Obrero sobre la producción y la administración de empresas estatales, sin mediación de burócratas y con pleno respeto a los derechos de organización sindical autónoma, negociación de contratos colectivos y huelga.
* Ley de soberanía petrolera y minera que restablezca el control por parte del Estado del 100% sobre nuestros recursos petroleros y mineros, que derogue la autorización de creación de empresas mixtas, y se asegure que el total de los ingresos sean utilizados para cancelar la enorme deuda social existente del Estado con el pueblo y los trabajadores venezolanos.
*Regímenes de pensiones, de salud, de recreación y vivienda, de la Ley de Seguridad Social.
* Ley de nacionalización del sistema financiero y bancario. Las multimillonarias utilidades del sistema serán utilizados para el emprendimiento de un Plan Nacional de Obras Públicas que reactive el empleo productivo digno con salarios justos
* Ley del Poder Obrero y Popular que impulse el verdadero protagonismo y poder de decisión de los trabajadores, los campesinos, los indígenas y las comunidades populares en la gestión política, económica y social del país. Con una ley de estas características podremos superar la mezquina, castrante y clientelista Ley de Consejos Comunales promovida por el gobierno, la Asamblea Nacional y el PSUV.
* Ley de amnistía para los dirigentes obreros, campesinos, e indígenas sometidos a procesos judiciales por defender sus derechos. Por la libertad inmediata e incondicional de Rubén González y Sabino Romero, insignes luchadores sociales que llevan largos meses presos sin juicio.
* Ley Anti-Corrupción que investigue y sancione ejemplarmente a los promotores de este terrible flagelo que desacredita la gestión pública y atenta contra el desarrollo económico y social de la nación. Mientras esta Ley se tramita abogaremos por la Apertura de una investigación parlamentaria acerca de las causas de la crisis eléctrica, cuyas desastrosas consecuencias ha sufrido el pueblo y el crimen de lesa humanidad de la pérdida de 130 mil toneladas de alimentos.