UPTAB de Barquisimeto: Balance de una lucha que aún no termina

Foto referencial

Por Notas Obreras (JOC)

Presentación

Inflación y especulación fue la nota que marco tanto el final, como el inicio del presente año. El viejo refrán volvió: “Mientras los salarios suben por la escalera, los precios suben por ascensor”. Situación que hizo comentar a alguien, ¡este es el único país donde la gente se asusta cada vez que hay un aumento de salario! Durante el transcurso del año 2018 ocurrió un hecho que había desaparecido: diversos sectores obreros comienzan a reivindicar salario, los educadores son uno de ellos; allí se manifiestan varias posiciones tanto políticas como ideológicas, pero hay un denominador común: ¡Un nuevo surgir de un Movimiento Obrero! Gracias a la gestiones de Emisael “Chino” Torrealba, corresponsal en Barquisimeto, Notas Obreras conversó con el profesor Jonny Peicone, profesor de la UTP de Barquisimeto, universidad que está en huelga luchando por el salario, exigiendo se respete el acuerdo de acta convenio firmada con el ministerio de Educación y el Ministerio del Trabajo.

A continuación la conversa…

Los trabajadores y sus organizaciones

La UTP de Barquisimeto cuenta hoy con 5 sindicatos; uno abiertamente de oposición que centra su lucha en la salida de Maduro, y cuatro restantes que se inscriben en el ámbito del chavismo. Todos afiliados a la Federación de Trabajadores Universitarios de Venezuela (FUTV), afiliada a la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores (CBST). Adicionalmente tenemos otra instancia organizativa, el Consejo de Trabajadores, el cual se conformó en septiembre del 2017. La conformación actual de la organización de los trabajadores viene a partir de 1999 con la llegada del chavismo al poder y la reorganización que se impulsa desde el gobierno al movimiento sindical. De la IV República venían tres organizaciones que agrupaban este sector de trabajadores educacionales: uno de obreros, otro de personal administrativo y uno de docentes. Era un sindicalismo que representaba las tendencias de AD y Copei, se distinguían la representación obrera por un lado, y los docentes por otro, que venían a representar una especie de clase media sindicalizada, vinculada a las tendencias de los partidos tradicionales. En el sindicato de personal administrativo predominaban los sectores de izquierda.

Incrementos salariales disparan el conflicto

En Mayo-Abril del 2018 se decretan aumentos salariales. Para la época el salario había llegado a 1 millón 800mil Bs y el aumento los lleva a 3 millones. El valor real del salario posibilitaba comprar medio kilogramo de queso. El ritmo de los precios (de las subidas) dejaba atrás al salario. La situación se tornaba muy difícil para los trabajadores. La Federación (FUTV) llama asamblea y se desarrolla un plan de acción en torno a la defensa del salario. El movimiento reivindicativo logró tener resonancia nacional. Para el momento se declararon los educadores en asamblea permanente, y en cada escuela se conformaba un comité por la defensa del salario. Del mismo modo varias iniciativas se hicieron a nivel local y nacional.Se realizaron varias acciones en Caracas. Tomamos la sede del Ministerio de Educación Universitaria en pleno centro de la ciudad. La movilización fue efectiva y la presión se hacía sentir a nivel nacional, cuyo producto fue haber logrado unas mesas de trabajo entre los sindicatos y el Ministerio de Educación Superior.

La Mesa logra un acuerdo

La convención colectiva preveía que para la nivelación de sueldos se realizaría en base a 1,5 salarios básicos que establecía la convención colectiva y se acordó llevarlo a 4,75 salarios base. Eso significaba algo así, como por ejemplo: si el salario eran 4,5 millones se llegaba a 14 millones BsF. El Acta convenio fue firmada por el Ministro del Trabajo, El Ministro de Educación, personeros del gobierno y los sindicalistas de la Federación, junto con sus sindicatos. La aplicación del acuerdo se dio en Julio 2018; además de la aplicación del salario, también tenía incidencia en el resto de las prestaciones sociales y demás beneficios económicos del contrato colectivo. En agosto día 28, el gobierno aplica las medidas de la reconversión monetaria (que no fue más que una maniobra matemática). Se aumentó el 6 mil por ciento en el caso de haberse mantenido la fuerza del bolívar; sin embargo, le quitaron cinco ceros a la moneda. Nos quedamos estrellados, sacando cuentas hasta que nos dimos cuenta de la trampa. Llegaba octubre para despejar las dudas. Volvimos entonces a retomar la convención colectiva y el acta convenio firmada por el Ministerio del Trabajo y el Ministerio de Educación. Debía aplicarse a nuestro salario el 4,5 veces del salario base, tal y como fue acordado. Esto no ocurrió. La dinámica de lucha nos hizo centrarnos en el contrato colectivo. Para diciembre se decreta otro aumento, pasamos de 1.800 a 4.500 Bs soberanos. Luego, en enero 2019 se anuncia el aumento de 4.500 a 18.000 Bs soberanos. El ritmo entre costo de la vida versus inflación, destruía a los pocos días el valor del salario.

Se inicia la huelga

Llamamos asamblea en la Universidad a los cuatro sindicatos, dejamos por fuera al sindicato de la oposición que tenía su propia dinámica. El 16 de enero la asamblea decide paralizar las actividades en el UPT. Fue el último recurso, ya que se habían agotado todos: asambleas permanentes, comisiones, llamados a las autoridades, comunicados de prensa, reuniones a diversos niveles, otros. Al principio la Federación había convocado a un paro, el cual fue acatado por todos los sindicatos. Se sumaron varias UPT (hay alrededor de 30 en todo el país). Luego de la respuesta de los trabajadores, comenzaron las presiones del gobierno a los sindicalistas de la Federación y la Central Bolivariana.

Una huelga, diversos sectores

Las luchas de poder dentro de la Central y la Federación ponían de manifiesto que la burocracia sindical chavista pone sus intereses políticos y personales por encima de los intereses de los trabajadores. Esto se hacía evidente en las posturas contradictorias frente al desarrollo de la lucha y el paro de actividades. El proceso fue como sigue: primero pararon los obreros, a la semana siguiente se incorporan los de la administración, y luego los docentes. Este paro fue iniciado y sincronizado con la Federación; sin embargo los sindicalistas fueron cediendo a presiones y prebendas. No mantenían una línea firme de acción, mantenían el juego inseguro según sus acuerdos y ventajas. Entonces, se convoca a una asamblea en nuestra sede para discutir la situación y allí se decidió seguir en huelga independientemente de los acuerdos y juegos de la Federación. La huelga continúa hasta hoy (abril) desde enero que la comenzamos. La única Universidad que quedó, que se mantuvo en huelga, fue la UPT de Barquisimeto.

Una lucha a contracorriente

La lucha por el salario se hace difícil ya que los trabajadores pelean contra un enemigo de clase muy fuerte. En primer lugar, el Estado patrón, quién es responsable directo de la situación que viven los trabajadores dela Educación. En segundo lugar, el Gobierno quién es el encargado de las políticas educativas y laborales a partir de sus ministros representantes, junto con las inspectorías y la del Trabajo; además de contar con la burocracia sindical que actúa como como correa de trasmisión de las políticas del gobierno. Un caso emblemático lo representa Carlos López, quien funge como dirigente de la Federación de la Central Bolivariana, y a la vez es alto funcionario del Ministerio. Por supuesto, nunca se sabe cuándo habla como sindicalista, o cuando como representante del Ministerio.

El Consejo de Trabajadores en la UPT Barquisimeto

La lucha en la Universidad (UPT) de Barquisimeto ha logrado desarrollarse por encima de todas las barreras y obstáculos gracias a la unidad de los trabajadores, la cual se constituyó a partir del Consejo de Trabajadores, que ha permitido en gran medida la unión de los trabajadores de la sede. Este es un aspecto que debe destacarse, además de enfrentar una patronal muy fuerte como lo es el Estado y sus diversas instancias administrativas, educativas y laborales. La estructura sindical que se desarrolló en la universidad divide a los trabajadores según su condición de vida y trabajo. El sindicato no los agrupa como totalidad de trabajadores, sino en base a una especie de áreas: administración, obreros, docentes, y así. Por la vía de los hechos, al sindicato lo convierten en una especie de asociación profesional, y no como la integralidad del trabajo y la vida como que trabajadores.
Cuatro sindicatos en una misma área de trabajo y pertenecientes a una misma corriente ideológica representan por un lado, la intensión de dividir los trabajadores en parcelas que alimentan feudos de la burocracia sindical; por otro lado, en tanto que un conflicto general no pueden dar respuesta cada sindicato por su lado, es necesaria la unión. En la experiencia de la huelga, fue cuando El Consejo de Trabajadores asumió este papel, el de coordinación y unidad de los sindicatos y trabajadores en la lucha.

Surgimiento del consejo de trabajadores

La UPT de Barquisimeto es la única universidad que tiene Consejo de trabajadores. Se fundó en septiembre de 2017, tiene año y medio de funcionamiento. Los Consejos de Trabajadores aparecen en la ley para agosto de 2017. Estábamos de vacaciones cuando aparece la información. Los compañeros nos convocamos y reflexionamos sobre la importancia de esta instancia. Hay que tener en cuenta que aunque son instancias de trabajadores, son intervenidas por los jefes; es decir, por los funcionarios gerentes que conforman la patronal del Estado. La patronal la convoca, y por supuesto la interviene y la ponen al servicio de la empresa o la institución patronal. Esas fueron partes de nuestras reflexiones. Finalizando las vacaciones y comenzando clases, enseguida nos movilizamos y comenzamos a constituir el Consejo de Trabajadores. Se convocó luego la asamblea de sindicatos donde quedó conformada. ¡Le amanecimos temprano a la patronal!

Las maniobras continúan

Hoy por hoy, la burocracia sindical cambio la estrategia y los objetivos de la lucha. Para febrero, Carlos López convocó nuevamente a unas mesas de trabajo; allí participaron un sector de los trabajadores. Su objetivo es hacer una “revisión” de la contratación colectiva. La propuesta está planteada engañosamente como una manera de encontrar una salida al problema salarial; sin embargo, se ve claro es que intentan desmontar la discusión y los derechos presentes en Contratación Colectiva. En el fondo se derrumba todo el entramado que han logrado construir los trabajadores en tanto tiempo, borrando el reconocimiento de las conquistas obreras en la legislación laboral venezolana.

Situación actual

Tenemos casi tres meses de huelga y las perspectivas son inciertas por varios elementos que tornan compleja la lucha. Podemos enumerar algunos:
.- Hasta ahora el gobierno no da respuesta ninguna a nuestras peticiones.
.- A nivel gubernamental no hay pronunciamiento en torno a la realidad salarial de los trabajadores, ni una política clara y definida.
.- Las pugnas internas a nivel del Ministerio de Educación hacen más difícil la llegada de planteamientos de la base de los trabajadores. Los funcionarios se han desentendido.
.- Estamos aislados prácticamente. Hemos intentado superar el aislamiento tomando contacto con otras bases de otras regiones o ciudades; pero se hace muy difícil. Otros obstáculos para la lucha.
.- Las condiciones de vida y trabajo están cada vez más deterioradas, lo que hace que la gente está pendiente principalmente, de lo vital, subsistir.
.- En la realidad, lo que existe es un paro técnico, ya que la gente no tiene prácticamente ni para el pasaje.
.- La agenda internacional, con las agresiones de los EE.UU. nos tiene arropados. Luchar por salario no es lo prioritario en el ambiente político, por tanto las reivindicaciones inmediatas pasan a segundo plano. Trabajar en condiciones especiales. No se puede obligar a los trabajadores a trabajar con las mismas condiciones como si nada pasara, tendrían que establecerse condiciones especiales para ejercer el trabajo; por ejemplo:
.- Horarios especiales de trabajo, de manera de atender las necesidades de los estudiantes.  Es necesario crear diversas formas creativas de atender la población estudiantil.
.- Proveer un subsidio de alimentación, tipo cajas o bolsas clap, de manera de paliar la deficiencia del salario y el golpe que produce la inflación junto a la especulación.
.- Asegurar ciertas medicinas para el tratamiento permanente de algunas y algunos compañeros.

Estudiantes de los sectores populares

La UPT no había parado en 20 años que tiene funcionando. Los sindicatos hemos tenido contacto con el Consejo Popular Estudiantil y sus voceros. Ellos comparten con nosotros el motivo de nuestra lucha, y plantean la necesidad de los estudiantes de no perder el año escolar, ya que significa un gran esfuerzo tanto material como de sus expectativas y esfuerzos, que estarían perdidos. La Universidad se ha caracterizado por contener en su plantilla el 95% de estudiantes hijos de trabajadores y de los sectores populares; es una reivindicación popular lograda que no se debe perder.

Horizontes

En la próxima etapa estamos considerando replantearnos como abordar la situación. Hoy la situación internacional y el contexto de agresión hegemoniza la atención de la opinión pública. Si vas a denunciar a los medios y dices que eres sindicato que lucha por salario, nadie te pone atención salvo si el medio le interesa como propaganda contra el gobierno, y entonces los partidarios del gobierno te señalan de traición. Varios son los recursos que hemos implementado son: escritos ante la Defensoría del pueblo; visitas a las Unidad Territorial del Ministerio de Educación (Lara). Todas iniciativas han sido pasando por encima de la Federación. Hemos estado en la sesión del Consejo legislativo del Estado Lara, donde recibimos apoyo de algunos concejales. La situación es muy dura, más nos llama a replantear la lucha y situarnos ante el contexto por el cual pasa el país, que afecta a todos los trabajadores. Hemos desarrollado una práctica basada en la unidad de los trabajadores como algo transversal a partir del Consejo de Trabajadores. Su función original burocrática era, contraloría social o funciones complementarias. Nosotros lo convertimos en una instancia de coordinación para la reivindicación y el reclamo. Los Consejos de Trabajadores son utilizados, generalmente por los patronos funcionarios en esa visión hegemónica tradicional. El sindicato como expresión de la unidad de base, y no su fraccionamiento, es garantía de respuesta de los trabajadores a su situación.

Nota: Jonny Peicone es vocero del Consejo de Trabajadores de la UPTA. Universidad Política Territorial Andrés Bello, sede Barquisimeto. Miembro del Consejo regional de prevención. Trabajó con Pedro Abarca, reconocido especialista y dirigente de los trabajadores larenses, en la temática de seguridad y prevención de trabajadores, hoy funcionario del MinTra. Peicone es especialista en medicina laboral. Su visión clasista de la lucha la obtuvo a partir de la dinámica de trabajo con los trabajadores.

Barquisimeto, Abril 2019.

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