Carbonorca lleva 17 días sin producir
El nivel de oxígeno que durante 2009 alargó la vida del sector aluminio se ha reducido aceleradamente en los primeros 77 días del 2010.
El nivel de oxígeno que durante 2009 alargó la vida del sector aluminio se ha reducido aceleradamente en los primeros 77 días del 2010. Ramón Espino, director laboral de Carbonorca, concluye que “la Corporación del Aluminio sólo funciona en teoría, más no en la práctica”. A lo largo de 17 días ha sido testigo de la falta de complementariedad de las empresas que mantienen operativo el circuito industrial. Las tribulaciones de la estatal se deben a la imposibilidad de disponer de “brea alquitrán” fundamental para el proceso de fabricación de ánodos de carbón, lo que a su vez son esenciales para producir aluminio.
Por falta de materia prima la productora de ánodos de carbón no arranca desde hace 17 días, obstaculizando el suministro del insumo que CVG Carbonorca le vende a Alcasa para que esta última pueda producir aluminio.
Ramón Espino (en la foto), director laboral de la carbonífera, planteó que la interrupción se suma a la reducción de la meta productiva para adecuarse a las exigencias del racionamiento, deteriorándose aún más las finanzas de la estatal.
El circuito productivo del aluminio que establecen Carbonorca y Alcasa está bloqueado, dejando a las dos empresas al margen de una paralización indefinida si no se inyecta capital para el pago de las deudas a proveedores y adquisición de materia prima y equipos.
Las altas deudas de la pionera del aluminio de Guayana (Alcasa) con sus proveedores, le han cerrado las puertas para comprar insumos, entre estos la “brea de alquitrán”, que es la materia prima que le hace falta a Carbonorca.
El convenio que establecían estas dos industrias, consistía en el intercambio de “brea de alquitrán” suministrada por Alcasa por ánodos de carbón proveniente de Carbonorca.
La solución a corto plazo podría venir de un préstamo de “insumo” por parte de Venalum, que posee un inventario de 7 mil toneladas de este subproducto de la destilación del bitumén de origen orgánico.
“En la teoría solamente existe la Corporación del Aluminio, mas no en la práctica. Nuestra planta hoy está agonizando y pidiendo solamente por un insumo. Este mal es producto de que no existe brea de alquitrán, que existe solamente en CVG Venalum, Alcasa no lo tiene”, dijo Espino.
Incomunicación gerencial
También apuntó la falta de complementación entre las presidencias de las compañías públicas. “Los presidentes de estas empresas no se ponen de acuerdo, y en definitivo el carbón es uno de los eslabones más importantes para producir el aluminio primario”.
La fabricación anual en condiciones normales de Carbonorca es de 112 mil toneladas que las venden a su único cliente Alcasa. Pero la crisis energética que ha obligado a las empresas a ajustarse al plan de racionamiento eléctrico, rebajó las expectativas de producción a 74 mil toneladas. Esta meta podría ser más baja aún de prolongarse la falta de “brea de alquitrán”.
“En estos 17 días Carbonorca ha tenido pérdidas bastante importantes. Vemos como la Contraloría General de la República, como el Estado venezolano, en fin los entes responsables de este patrimonio de los venezolanos no se preocupan de investigar quiénes son los responsables. En este caso los administradores, porque los trabajadores no tienen nada que ver en esto”.
Espinó describió la situación de Alcasa como “oscura, preocupante, que no hay un camino, una salida de esta crisis y mucho menos cuando no se consultan a los trabajadores ni a los directores principales”.
La clave para la solución estaría “en las manos del ministro Sanz (Minería e Industrias Básicas) él sabe de la situación. A él le toca decidir si la brea viene a través de Venalum o una compra directa por Alcasa”. (CNR)
Poder en manos de pocos
“Desde hace cinco meses aquí no se hace una junta directiva. El presidente Juan José Méndez aprueba personalmente las prórrogas de contrataciones, como por ejemplo los seguros de los vehículos. Aquí las contrataciones, incluso las que pasan de las 5 mil unidades tributarias, pasan solamente por manos del Presidente, el gerente de finazas y la consultora jurídica”, expuso Ramón Espino, quien añadió que en estilo de gerencia no se le da cabida al control obrero.
