Chávez y el imperialismo abogan por salida negociada en Libia
Caracas, 5 de marzo.- El presidente venezolano, Hugo Chávez, mostró ayer nuevamente su talante reaccionario, al invocar la mediación del ex presidente yanqui Jimmy Carter en Libia. Un día antes, Chávez había insistido en la necesidad de una salida negociada en Libia, para evitar que la revolución se extienda a otros países «Eso es un polvorín que se podría extender hacia el Mediterráneo. Es la hora de la política, evitemos una nueva guerra», dijo.
Caracas, 5 de marzo.- El presidente venezolano, Hugo Chávez, mostró ayer nuevamente su talante reaccionario, al invocar la mediación del ex presidente yanqui Jimmy Carter en Libia. Un día antes, Chávez había insistido en la necesidad de una salida negociada en Libia, para evitar que la revolución se extienda a otros países «Eso es un polvorín que se podría extender hacia el Mediterráneo. Es la hora de la política, evitemos una nueva guerra», dijo.
La propuesta de Chávez de crear un grupo mediador internacional para que interceda entre los rebeldes libios y la dictadura proimperialista de Gadafi, fue aceptada por éste último, no así por los rebeldes, que exigen el fin inmediato de la dictadura.
Una carta con fecha del 3 de marzo, firmada por el canciller libio, Musa Imhemmad Musa, confirma la aceptación de la propuesta de Chávez, y le autoriza para «seleccionar los miembros (de la comisión) y coordinar su participación en el diálogo».
De hecho, el propio dictador Gadafi ha planteado en numerosas ocasiones su disposición a dialogar con los rebeldes, una vez que sus maniobras militares han fracasado en el intento de aplastar la revolución, pese a producir centenares de víctimas civiles. La propuesta de negociar obedece a la debilidad del régimen, que se aferra a la capital, Trípoli, mientras que los rebeldes toman el control del resto del país. Gadafi parece ver la negociación como su única salvación, ante el avance indetenible de los rebeldes.
«Estoy sorprendido porque tenemos una alianza con Occidente para luchar contra Al Qaeda, y ahora que combatimos contra los terroristas nos han abandonado», declaró hace unos días Gadafi a la cadena de televisión estadounidense ABC, añadiendo que Barack Obama es «un buen hombre», aunque «desinformado». Desde hace más de una década, Gadafi mantiene una estrecha alianza con el imperialismo.
Los cancilleres de Bolivia, Ecuador, Cuba, Bruno Rodríguez, y el vicecanciller de Nicaragua, se reunieron con Chávez ayer en Caracas para expresar su respaldo a la creación de una comisión internacional mediadora para Libia.
No es la primera vez que los países del ALBA promueven la negociación con una dictadura, en vez de apoyar la movilización popular. Cuando el presidente hondureño Manuel Zelaya fue derrocado por un golpe de Estado, Chávez y los demás gobiernos del ALBA apoyaron la mediación de la OEA y Hillary Clinton. En esta ocasión, Gadafi es además un cercano aliado de Chávez.
Chávez pide la intervención del ex presidente yanqui Jimmy Carter
Chávez planteó ayer que el ex presidente yanqui Jimmy Carter debía formar parte de la misión internacional. «Carter pudiera ayudar, creo que es un hombre de buena voluntad, así lo ha dicho Fidel (Castro) varias veces, a mi me consta su buena voluntad por lo que hizo aquí en Venezuela», dijo, haciendo alusión a la mediación de Carter entre el gobierno venezolano y la derecha en el año 2003. Carter también concertó una reunión de Chávez con el magnate capitalista Gustavo Cisneros, realizada en el año 2004, que fue un paso decisivo para la normalización de las relaciones del gobierno venezolano con la burguesía opositora.
Chávez también dijo que podría invitar a varios premios Nobel de la Paz para participar en la mediación.
Chávez coincide con el imperialismo en la búsqueda de una salida negociada
Casi simultáneamente a la gestiones de Chávez, la Secretaria de Estado Hillary Clinton declaraba sobre la necesidad de una «solución multilateral negociada» para detener la revolución libia. “Seguimos consultando con nuestros aliados de la OTAN y en Naciones Unidas, para determinar cuáles son las maneras constructivas y productivas de hacer frente a la situación”, dijo, descartando la posibilidad de una intervención militar.
Algunos voceros de la rebelión libia han planteado la necesidad de nacionalizar los hidrocarburos que Gadafi ha entregado a las transnacionales europeas. Esto ha encendido las alarmas en Europa y EEUU, y ha llevado a esos gobiernos a buscar una salida negociada y controlada a la crisis en Libia, de tal manera de garantizar sus intereses económicos ante la posibilidad cierta de que Gadafi no pueda seguir salvaguardándolos.