6 noviembre, 2024

Chile: El modelo chileno en crisis

3 de agosto de 2011 Nro. 199
El Socialista es una publicación de Izquierda Socialista
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Escribe:

Federico Novofoti
Enviado especial a Chile

3 de agosto de 2011 Nro. 199
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Federico Novofoti
Enviado especial a Chile

El modelo chileno en crisis

El modelo chileno de Piñera es calificado por el imperialismo y varios gobiernos como ejemplo de “desarrollo” y “apertura al mundo” en la región. Sin embargo, las luchas estudiantiles y populares lo vienen poniendo en crisis porque es un “modelo” neoliberal sustentado en la represión para garantizar el saqueo de los recursos naturales y una creciente explotación de los trabajadores.
Masivas movilizaciones han puesto en jaque a Piñera
Masivas movilizaciones han puesto en jaque a Piñera

Fuimos invitados por compañeros que participan en la ACES (Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios) a conocer la “segunda revolución pingüina”. Gracias a ellos participamos en su asamblea, junto a voceros (representantes) de 40 colegios de Santiago, recorrimos las universidades en paro e infinidad de colegios tomados, y conocimos a los estudiantes en huelga de hambre. En una primera mirada resulta evidente que el gobierno de Piñera atraviesa una verdadera crisis política. Su popularidad cayó a menos del 30%. Ante el cuestionamiento, optó por la represión abierta y descarada e ilegalizó las movilizaciones estudiantiles. Todos los días, estudiantes menores de edad son detenidos y golpeados por carabineros, como sucedió con Recaredo Gálvez, presidente de la Federación Universitaria de Concepción, a quien le rompieron el cráneo y detuvieron estando inconciente.

La lucha estudiantil comenzó en mayo. Estalló tras el anuncio del recorte de becas, como parte de un paquete de medidas para terminar de privatizar y elitizar la educación. La respuesta estudiantil fue contundente. Movilizaciones semanales con hasta 300 mil personas, 700 colegios tomados y 22 universidades en paro. Los estudiantes reclaman Educación estatal y gratuita, pase (boleto) escolar gratuito, mejoras en colegios técnicos y fin del lucro en Educación. En Chile no existe la educación gratuita. Sólo el 15% del presupuesto educativo es aportado por el Estado. El 85% restante es aportado por los estudiantes y sus familias, que deben endeudarse con créditos usureros para pagar altos aranceles en establecimientos privados, semi y estatales. La continuidad de la lucha obligó a Piñera a dar marcha atrás y anunciar el GANE (Gran Acuerdo Nacional por la Educación). Con éste, Piñera prometía una inyección de 4 mil millones de dólares para becas, baja de interés en créditos (al 4%) y otras medidas. Al mismo tiempo, legalizaba el lucro educativo que, a pesar de ser ilegal, el gobierno apaña. Un nuevo rechazo estudiantil obligó al presidente a cambiar, el 18 de julio, casi todo su gabinete de ministros, empezando por Lavín, de Educación.

Piñera cambió su gabinete porque el conflicto estudiantil canalizó el descontento social general. Las movilizaciones son estudiantiles y populares. Asisten profesores, trabajadores, pobladores (habitantes de las villas miseria destruidas por el terremoto), mapuches y otros. 2011 es un año de ascenso en las luchas. A inicios de mayo, se dio la pelea contra HidroAysén y por una “Patagonia sin represas”. Todos los viernes se movilizaron hasta 100 mil personas en Santiago contra la construcción de una mega represa en la localidad de Aysén (Patagonia), que iba a hacer desaparecer parques naturales y comunidades enteras. El movimiento logró frenar la obra. El 11 de julio se realizó un paro nacional de los trabajadores del cobre, que denunciaron la privatización encubierta de Codelco (empresa mixta). 3 mil trabajadores en La Escondida (Antofagasta, norte) exigen aumento salarial ligado a la productividad, y los contratistas (tercerizados) de El Teniente (Rancagua, centro) reclaman pase a planta, aumento salarial y renacionalización del cobre, una industria que genera 35 mil millones de dólares anuales. Las luchas parciales llevaron a un cuestionamiento del modelo neoliberal y al régimen que lo garantiza. Comienza a reclamarse una reforma profunda de la Constitución, instaurada en 1980 por Pinochet. Por la presión popular, la CUT (Central Unificada de Trabajadores) debió llamar a paro nacional el 24 y 25 de agosto por reforma tributaria, salud y educación para todos, nuevo código del trabajo, modificaciones al sistema previsional y una nueva Constitución.

Es necesario solidarizarnos con la lucha del pueblo chileno. Hay que denunciar la brutal represión a los estudiantes y sectores en lucha. Apoyar sus reclamos por la estatización, gratuidad y el fin del lucro educativo. Y el reclamo de los trabajadores por la renacionalización del cobre, cuyas ganancias resolverían los problemas educativos y sociales de la mayoría del pueblo chileno. La CUT debe convocar a medidas de fuerza en los tiempos que marca el movimiento de lucha, no sólo a convocatorias alejadas en el tiempo. Todo en el marco de impulsar la movilización para terminar con un gobierno y un régimen sustentado en la represión y la ilegalización de los movimientos de lucha.

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