Detenido en Venezuela activista de la izquierda radical autónoma alemana
El pasado 12 de julio fue detenido en la ciudad de Mérida el alemán Bernhard Heidbreder, quien desde el año 1995 había huido de su país debido a la persecución en su contra debido a sus actividades políticas en la izquierda radical alemana. Heidbreder, quien participaba en la organización «Das K.O.M.I.T.E.E», es un feroz crítico del militarismo europeo y las políticas de inmigración del gobierno alemán. En 1995 fue acusado de participar en el intento de volar con explosivos la reconstrucción de la cárcel de máxima seguridad para inmigrantes ubicada en Berlín-Grünau. El centro de detención, que se encontraba desocupado en esos momentos, no llegó a ser explotado pues minutos antes la policía descubrió los preparativos de la acción. Desde ese momento huyo de su país, donde estuvo varios años en Colombia y, recientemente, comenzó a vivir con otra identidad en Venezuela.
Según la información oficial difundida a través de los medios «Bernhard Heidbreder, ciudadano alemán de 53 años de edad, estaba solicitado por ser sospechoso su país de haber organizado un grupo para la perpetración de actos terroristas y que tenía alerta roja por Interpol, fue detenido a las 2:00 pm del 7 de este mes, en el estacionamiento del hotel Venetur de Mérida. El fiscal 5º de esa entidad está a cargo de este caso. La Embajada de Alemania había notificado a Interpol Caracas sobre la solicitud de este hombre. Las averiguaciones adelantadas por las autoridades alemanas indicaban que el solicitado vivió varios años en Colombia y en 2001 logró la identidad falsa de Jhon Jairo Londoó Smith, nacido el 4 de diciembre de 1967 en Granada, Cundinamarca. Luego con el 10 de abril de 2012 se conoció que un colombiano con los mismos nombres y apellidos le concedieron en este país la cédula de identidad venezolana paa extranjero número 84.3253215». Actualmente se encuentra detenido en la sede de interpol Caracas que queda en Parque Carabobo a la espera del inicio del juicio de extradición por parte del Tribunal Supremo de Justicia. Fuentes allegadas al caso, que conversaron con El Libertario, han alertado sobre las inhumanas condiciones de privación de libertad de Heidbreder, quien permanece todo el día sentado y esposado en una silla, duerme en una colchoneta esposado y sólo le permiten ir al baño en breves intervalos de tiempo. Según los testimonios la sede de Interpol Caracas no cuenta con la infraestructura para tener a personas detenidas.
«Das K.O.M.I.T.E.E» fue una organización militante autónoma clandestina que funcionó en Alemania desde 1994 hasta finales de los años 90´s . Durante sus años de actuación cometieron ataques contra establecimientos (nunca contra personas) que denunciaban como ejecutores de»la política represiva de la República Federal de Alemania para el interior y exterior» y en contra de «Alemania [como] el partido de la guerra en el genocidio en el Kurdistán «, como por ejemplo un edificio de las Fuerzas Armadas Alemanes a quien responsabiliaban de las violaciones de derechos humanos en Turquía, debido a que suministraban armas al gobierno para los ataques contra los grupos disidentes. Su intento de derribar la cárcel de alta seguridad de Berlín-Grünau, descubierto por las autoridades, sería la acción más significativa en las acciones del grupo. Hay que agregar que minutos antes de la hora prevista para el atentado, el grupo distribuyó volantes a los alrededores alertando sobre la «demolición de la cárcel» para que ninguna persona saliera malherida. El Estado alemán, como lo recuerda el caso de Ulrike Meinhof, no garantiza el derecho a la vida de los activistas políticos detenidos en sus cárceles.
El grupo de apoyo a Heidbreder en Venezuela informó a El Libertario que están solicitando que Venezuela niegue la solicitud de extradición realizada por el gobierno alemán: «Esta extradición -declararon las fuentes- fortalecería la política expansionista y militarista del gobierno alemán, quien suministra armas y tecnología a gobiernos violadores de derechos humanos». El grupo de apoyo rechaza que a Heidbreder sea calificado como terrorista: «Las motivaciones de sus actos, que nunca dañaron a ninguna persona, eran claramente políticos, para denunciar los abusos del gobierno alemán contra inmigrantes y países vecinos». Este rechazo es clave en la estrategia de defensa pues todos los tratados bilaterales y multilaterales suscritos por Venezuela no contemplan la extradición cuando se trata de «delitos por motivaciones políticas». En cambio, delitos tipificados como «terrorismo» significarían, juridicamente, la extradición automática. ¿Cuál va a ser la categoría que asumirá el Tribunal Supremo de Justicia? Hay que recordar que el máximo tribunal del país han venido tipificando como terroristas a las personas detenidas en manifestaciones, al aplicarle -a petición de la propia Fiscal general- delitos previstos en la reciente ley antiterrorista aprobada por el gobierno venezolano a petición de los organismos multilaterales. Por otra parte, ¿pesará en la decisión los diferentes acuerdos económicos realizados por el Estado venezolano con estados internacionales?