10 noviembre, 2024

El bolívar fuerte se debilitó, en menos de 2 años

La devaluación implicará un aumento de todo lo que compramos y continuaremos dependiendo del precio del barril de petróleo mientras sigamos en el capitalismo parasitario venezolano.

La devaluación implicará un aumento de todo lo que compramos y continuaremos dependiendo del precio del barril de petróleo mientras sigamos en el capitalismo parasitario venezolano.

Con las medidas tomadas respecto al Bolívar Fuerte y su cambio con el dólar, es evidente la devaluación del bolívar y el reconocimiento público y legal del mercado paralelo también llamado dólar permuta. La devaluación llamada por el gobierno como el ajuste, se presenta en tres niveles, uno pasando de 2,15 a 2,60 BsF/dólar, es decir desvalorizado 21% y para unos rubros bastantes restringidos; el segundo nivel (a 4,30 BsF/dólar, con una desvalorización del 100%) donde se incluyen la mayoría de los elementos de consumo y necesarios para los venezolanos; el tercero para lo todo lo demás, libre o fluctuante de acuerdo a la intervención del BCV y a los compradores de bonos, con el agravante que por intermedio de tal institución del Estado al pretender equipararlo al dólar de 4,30 fomentará el uso de parte de los dólares con que PDVSA vende su petróleo para continuar la fuga de divisas y el negocio de unos pocos de vender dólares en el mercado negro.

En la actual situación de crisis económica tanto mundial como nacional, nuestra estructura o marco que generó una moneda no ha cambiado, nuestras condiciones son cada vez más débiles en donde el 90% del ingreso de divisas es producto de las ventas al exterior de petróleo y el presupuesto nacional cerca de también el 90%, comparte sus ingresos provenientes por la venta de petróleo y por los impuestos que también se derivan de una economía con base a la producción petrolera. Esto no ha cambiado y con las medidas se vislumbra en futuro peor aun.

Ahora es mucho mayor para el gobierno la necesidad de iniciar las bases para un desarrollo alterno, armónico y con mayor autonomía de la economía. Desde el punto de vista capitalista había condiciones más favorables cuando los ingresos tenían una base con el precio del barril de petróleo por encima de los 100 dólares. Hoy todavía se basa el despegue de la economía con referencia al precio del barril del crudo y la posibilidad de su aumento así como de aumentar la producción del mismo, lo que conllevaría a una situación cada vez peor para los trabajadores y como siempre con alternativas desde una condición de la economía donde la banca, los créditos, las importaciones, las inversiones se tasan o se valorizan de acuerdo al capital, hoy las respuestas son más criminales, en la misma semana de la devaluación monetaria, mantenemos y ampliamos el endeudamiento tanto externo como internamente.

Veamos, el Banco Central de Venezuela, (BCV) lanza una segunda ‘subasta’ de bonos cero cupón a 90 días, por 50 millones de dólares. Este bono llamado, El Bono Cambiario Venezolano 2, tendrá un precio único de 116,25 por ciento, pagadero en bolívares a una tasa de cambio de 4,30 bolívares por dólar y los papeles podrán ser negociados en el mercado secundario nacional e internacional luego de su liquidación. También en esta primera quincena de Enero, PDVSA contrató a los bancos China Development Bank Corp. y Banco Espírito Santo SA para un préstamo de US$1.500 millones, estos intermediarios son los coordinadores globales y colocadores de la línea de crédito a tres años a 450 puntos base sobre la tasa Libor.

También partimos de los resultados del año recién finalizado donde la inflación fue de un 26% y la de alimentos algo mayor al 30%, además dentro de los insumos para importar con dólares al primer nivel de cambio, es decir 2,60 bolívares (21% devaluado), se cuentan los alimentos básicos y algunas medicinas, lo que indica que nuestra economía todavía sigue siendo obtenida de la compra de buena parte de lo indispensable para subsistir de negocios en el comercio exterior. Pero ya el año anterior se venía vislumbrando las salidas capitalistas a la crisis. Mientras los trabajadores terminamos pagando con más IVA las necesidades presupuestarias para llenar el hueco fiscal producto de la bancarrota capitalista que en la medida que la contracción económica redundaba sobre el consumo haciéndolo cada vez menor, el gobierno ofrecía a la burguesía 1.000 millones de dólares para proyectos conjuntos que al igual que hoy son de nuevo ofrecidos pero transformados en 2.600 millones de bolívares fuertes. En otras palabras, mientras apenas se les ofrece a los trabajadores un pírrico aumento del salario mínimo en 10% a partir de marzo, los especuladores harán su agosto en estos dos primeros meses del año, a la burguesía se le ofrece revaluado otro millardo de dólares.

Si el bolívar se revaluó respecto del dólar permuta, por fin reconocido oficialmente como otro valor de dólar legal, el salario mínimo que es el único que aumenta por decreto, (nada de aumentos generales de salario), se devaluó en la misma medida porque si antes era el más alto de América Latina tomando como base 2,15 BsF por dólar, ahora tomando el 4,30 BsF por dólar o el del mercado, sería la mitad o peor aún, es decir el engaño sale por sus mismos argumentos, todavía peor incluyendo la cesta ticket como salario sin serlo, para abombarlo, el miserable salario mínimo se ha convertido en el salario para casi todos al no decretarse nunca aumentos de salarios generales. De paso, el Estado y PDVSA terminaron endeudándose con 11.000 millones en colocación de bonos en esa divisa mientras a la banca privada se le pedía 33.000 millones de bolívares fuertes para poder acometer el gasto público.

Mientras tanto Chávez en entrevista exclusiva con José Vicente Rangel admite que se han establecido contactos de alto nivel con el gobierno de Obama buscando la distensión de las relaciones entre ambos países. En conclusión, no hay salidas para la crisis económica con medidas que pretenden seguir dentro de unas relaciones capitalistas de la producción y distribución de las mercancías. Solo se logra a costa de la creación de mayores penurias para la población.

Partiendo de la economía y cómo se desarrolla la producción y el comercio en los actuales momentos, la alternativa única para salir de este desastre es la Nacionalización de la Banca. Todos los grandes bancos no pueden seguir aumentando sus beneficios a costa del dinero de los venezolanos. Las transacciones financieras de PDVSA hasta de la nómina de los trabajadores adscritos a la empresas del Estado o del sector público se realizan mediante bancos privados, así mismo los principales ejes de la producción del país además del petróleo, como son el hierro y el aluminio, ya que somos dueños de las materias primas y hasta dueños también de la generación y distribución de la energía eléctrica, por lo tanto es el estado el gran dueño de las principales motores de la economía del país, lo que justifica aún más tales nacionalizaciones, para que sean controladas todas las inversiones, los créditos, y hasta los beneficios de la rentas sean utilizados para todos los venezolanos, de manera que toda la contabilidad, el control, el registro, las estadísticas y los cálculos de todo el dinero sea dirigido para realizar y emprender a satisfacer las imperiosas necesidades de los venezolanos. Se debe invertir, comprar, importar, exportar, dar créditos, para mejorar y dar prioridad a las condiciones de vida de los trabajadores, empleo, salarios, salud, educación, vivienda, servicios y eliminar la miseria en vez de continuar haciéndolo como lo hace el gobierno bolivariano con los capitalistas y su clase burguesa. Los locales de los bancos deben quedar en las comunidades, en las fábricas, en los hospitales, en el campo, en donde sea necesario y útil para los verdaderos usuarios como son todos los trabajadores y sus familias, en las comunidades.

Mientras más aguda es la crisis Chávez saca más argumentos para engañar. En la actual sociedad planetaria capitalista, el marxismo es la herramienta para que los trabajadores se organicen, se unan y luchen por alcanzar un gobierno de ellos mismos, previamente destruyendo al Estado de coerción, de dominación de la burguesía. O se está para el capital o se está para los trabajadores, no dominan las riendas de la economía los campesinos o la clase media, la revolución que es la forma de echar abajo el sistema que nos domina, se lleva a cabo por una vanguardia consciente de los trabajadores que es su partido revolucionario, no el mamotreto mas grande del mundo según ellos, el PSUV, que se encuentra entrampado en dirimir quienes serán los que se repartan los puestos en las próximas elecciones parlamentarias y de los consejos legislativos estadales.

La Nacionalización del Comercio Exterior, tanto la exportación como la importación deben ser realizados de acuerdo a las imperiosas necesidades del país y no para lucro de unos pocos. La banca nacionalizada debe estar estrechamente ligada a estas necesidades.

Todas estas nacionalizaciones así como el control de cambio deben ser bajo estricto control de los trabajadores, los funcionarios del estado y los empleados bancarios, de igual modo del comercio y las aduanas. En vez de ser guardianes del dinero para el lucro de un puñado de burgueses tanto criollos como extranjeros se tendría que cambiar su gestión para dirigirlo hacia el país ya que técnicamente estos trabajadores fueron entrenados y cumplen sus funciones para una minoría, numéricamente insignificante, que son los dueños del capital, es decir de nuestro trabajo. Toda su resistencia a nuestra labor tenemos que vencerla para poder enrumbar al país y sacarlo de la crisis.

Que la crisis capitalista la paguen ellos, los capitalistas.
Nacionalización de la banca y del comercio exterior, con control directo por parte de los trabajadores.

* Opción Obrera

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