Falleció en Miami el ex presidente Carlos Andrés Pérez
Caracas, 26 de diciembre.- A los 88 años de edad, falleció ayer en la ciudad de Miami el ex presidente venezolano Carlos Andrés Pérez, quien accedió en dos ocasiones a la jefatura del Estado con el apoyo del partido Acción Democrática (AD). Pérez es recordado por el paquete neoliberal que impuso en el año 1989 y la masacre con la que su gobierno aplastó la rebelión popular, en los eventos ocurridos a partir del 27 de febrero de ese año, mejor conocidos como El Caracazo.
Caracas, 26 de diciembre.- A los 88 años de edad, falleció ayer en la ciudad de Miami el ex presidente venezolano Carlos Andrés Pérez, quien accedió en dos ocasiones a la jefatura del Estado con el apoyo del partido Acción Democrática (AD). Pérez es recordado por el paquete neoliberal que impuso en el año 1989 y la masacre con la que su gobierno aplastó la rebelión popular, en los eventos ocurridos a partir del 27 de febrero de ese año, mejor conocidos como El Caracazo.
Representantes de la derecha venezolana e internacional expresaron su pesar por el fallecimiento de Pérez y elogiaron su trayectoria política. El gobernador de Táchira, el copeyano César Pérez Vivas, anunció tres días de duelo en esa entidad. La coalición derechista «Mesa de la Unidad Democrática» también elogió la trayectoria del fallecido ex mandatario. Los presidentes de Perú y Colombia, Alan García y Juan Manuel Santos, así como el gobernante PSOE español emitieron declaraciones favorables al ex mandatario venezolano, calificándolo como «demócrata». Distinción que difícilmente se corresponde con el prontuario de Pérez.
Pérez se hizo dirigente adeco desde su juventud. Luego del golpe de Estado de octubre de 1945 se desempeñó como secretario privado de Rómulo Betancourt, quien dirigía la Junta de Gobierno. Luego de la caída de la dictadura de Pérez Jiménez, pasa a desempeñarse a partir de 1960 como Ministro del Interior durante el infame gobierno de Rómulo Betancourt. La consigna que acuñó Betancourt «disparen primero y pregunten después» se reflejó fielmente en las sistemáticas violaciones a los derechos humanos por parte de ese gobierno. La estrategia provocadora de Betancourt y Pérez, de atacar las libertades democráticas, aunada a la subordinación del gobierno adeco al imperialismo, provocó la ruptura de AD que dio origen al Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). El MIR y el PCV se volcaron en esos años a la lucha guerrillera.
Entre 1974 y 1979, ejerció la presidencia de la República, en un período de bonanza petrolera conocido como el de la «Venezuela saudí». Pérez efectuó la nacionalización de la industria petrolera y la creación de Petróleos de Venezuela (Pdvsa). Su orientación económica fue desarrollista, basada en el apoyo estatal a los capitales monopólicos, consolidándose bajo esta dinámica parasitaria algunos de los más importantes grupos empresariales del país, como el Grupo Cisneros. También se multiplicó la deuda externa. El voto del entonces diputado José Vicente Rangel permitió a Pérez salvarse de un juicio por corrupción.
En 1988 fue elegido nuevamente presidente, y a la cabeza de un gabinete tecnocrático acometió la aplicación de un paquete acordado con el Fondo Montetario Internacional a cambio de financiamiento. El paquete antipopular era apoyado por Fedecámaras, e incluía un aumento del 100% en el precio de la gasolina, liberación de precios, congelamiento de salarios, y privatización de empresas estatales. A partir del 27 de febrero de 1989 se generalizaron las protestas en Caracas y otras ciudades contra las medidas económicas, ante lo cual el gobierno desató la represión militar. Las Fuerzas Armadas y los cuerpos policiales asesinaron a más de 3 mil personas y desaparecieron centenares de cadáveres, lanzándolos en fosas comunes. Algunas de ellas, como la de La Peste, fueron posteriormente descubiertas.
Si bien El Caracazo tuvo antecedentes en rebeliones populares como la de Mérida en 1987, se considera que esta masiva protesta de 1989 marcó la decadencia irreversible del bipartidismo puntofijista, y abrió una crisis histórica que se mantiene abierta hasta nuestros días. En 1992 hubo dos alzamientos militares, uno de ellos encabezado por el entonces teniente coronel Hugo Chávez, que fueron derrotados por las fuerzas leales al gobierno.
En 1993, Pérez fue destituido de la presidencia para someterlo a un juicio por corrupción, que culminó en 1996 con una sentencia a dos años y cuatro meses de prisión por la malversación de 17 millones de dólares.
A partir de 2000, Pérez se exilió para evitar ser juzgado por corrupción, por las millonarias cuentas mancomunadas que tenía en el exterior con su secretaria, Cecilia Matos. Luego de una estadía en República Dominicana, se estableció en Miami, donde la protección del gobierno yanqui le permitió morir en calidad de prófugo de la justicia.
Por su parte, el gobierno del presidente Hugo Chávez se ha encargado de mantener bajo el amparo de la impunidad a los militares responsables de los crímenes de El Caracazo.