Fedeindustria llama terroristas a los trabajadores
Caracas, 17 de octubre de 2009. En una declaración al diario Ultimas Noticias del día de ayer , uno de los supuestos empresarios socialistas, Miguel Pérez Abad, presidente de Fedeindustria, se lanza furibundo contra los trabajadores -definitivamente no puede haber empresarios socialistas- y los acusa de estar generando un supuesto clima de “terrorismo laboral”. Así como se oye, califica de terroristas a los trabajadores.
Caracas, 17 de octubre de 2009. En una declaración al diario Ultimas Noticias del día de ayer , uno de los supuestos empresarios socialistas, Miguel Pérez Abad, presidente de Fedeindustria, se lanza furibundo contra los trabajadores -definitivamente no puede haber empresarios socialistas- y los acusa de estar generando un supuesto clima de “terrorismo laboral”. Así como se oye, califica de terroristas a los trabajadores.
El presidente de Fedeindustria exhorta al Ministerio del Trabajo a “desmontar la conflictividad laboral que amenaza a las empresas públicas y privadas”. Desconoce así las razones que están motivando dicha conflictividad laboral, incluso, llega a decir que “no se trata de reclamos por contratación colectiva”, sino de que habría “un ambiente de impunidad laboral derivada de la aplicación de la inamovilidad laboral”.
No sólo le pide a las inspectorías del Trabajo que liquiden los conflictos obreros, sino que además se lanza contra la inamovilidad laboral decretada por el gobierno, y la responsabiliza de la situación de conflictividad que actualmente existe en las empresas. Ante esto dice que “el despido calificado es lo correcto”.
Agrega el flamante empresario “socialista”, beneficiario boliburgués del actual gobierno, que “Fedeindustria posee numerosas denuncias de empresarios que se consideran atropellados por trabajadores (as), que amparados en la inamovilidad obstaculizan la actividad de las empresas, incluso en conchupancia con las inspectorías del Trabajo”.
Ahora resulta que se invirtieron los papeles, los “pobrecitos” e “indefensos” patronos son atropellados por los agresivos y abusadores trabajadores. Esto no tiene nada que ver con la realidad cotidiana de millones de empleados y obreros de empresas públicas y privadas. Los que tienen el poder, las relaciones institucionales y la complicidad de las inspectorías son los empresarios que a diario explotan y desconocen los derechos de los trabajadores, muchas veces con el aval y el respaldo de tribunales, fiscales, inspectorías, e incluso, la fuerza pública.
En dos platos, Pérez Abad le solicita al Ministerio del Trabajo que utilice todo el poder del Estado contra los trabajadores terroristas; que de una vez por todas termine con la odiosa inamovilidad laboral que les impide a los patronos despedir a los trabajadores, cada vez que la racionalidad capitalista así lo requiera, todo esto con el objetivo de lograr la estabilidad necesaria para explotar a los trabajadores y continuar la extracción de plusvalía.
Definitivamente no es posible congeniar los intereses de los empresarios con los de los trabajadores. Por ello es absurdo creer que puedan existir patronos socialistas.