Grecia: medida de fuerza contra la política de austeridad del Premier Papandreu
El gobierno griego enfrenta hoy una masiva huelga general
No habrá aviones, ni trenes. El paro será total en el sector privado y público.
El gobierno griego enfrenta hoy una masiva huelga general
No habrá aviones, ni trenes. El paro será total en el sector privado y público.
El legendario Politécnico de Atenas lucía casi desierto ayer por la mañana, cuando Clarín lo recorrió a la búsqueda de los estudiantes duros y puros, de los grupos anarcos y de los okupas que hoy podrían agitar el barrio de Exarkia, que esta unos dos kilómetros al norte de la plaza Syntagma, que equivale a nuestra plaza de Mayo por todo lo que representa. Pero nada, el enorme recinto universitario estaba muy tranquilo, con las pintadas y los letreros de siempre. A la entrada hay un enorme busto a nivel del suelo que recuerda la resistencia estudiantil que convirtió en mártires a 20 muchachos y chicas el 17 de diciembre de 1973, cuando los tanques de los coroneles griegos asaltaron el recinto universitario del Politécnico, convirtiéndolo definitivamente en un mito. Los 20 muertos marcaron a fuego a la dictadura de la Junta Militar, que entró en agonía. Hoy hay una huelga general de protesta en Grecia contra las medidas de austeridad del gobierno para afrontar la muy grave crisis financiera que amenaza extenderse a los países del euro y dañar tal vez en forma irremediable la moneda única europea.
En dos largas recorridas por los lugares más sensibles de Atenas a las protestas sociales, Clarín no encontró preparativos de protesta que fueran más allá de los reclamos legítimos. El único episodio que hasta anoche se había registrado como aperitivo de la jornada de huelga fue el bloqueo de la Bolsa de Valores de Atenas por parte de 120 militantes de PAME, la central obrera controlada por los comunistas.
La protesta fue ruidosa pero de pocos efectos prácticos. Y la policía no intervino porque nadie quiere que las cosas «se salgan de madre».
La huelga general de hoy será masiva. No habrá aviones, ni trenes, poco transporte público, paro total en el sector privado, absoluto en el área pública. Las escuelas y las universidad estarán cerradas igual que una parte del comercio.
El líder de la mayor central obrera, Yiannis Panagopoulus anunció que la bronca popular es grande por las medidas de austeridad. «Sigue aumentando la desocupación que pronto llegará al 12%», dijo ayer. «Las reducciones de gastos van a causar más recesión y auténticas conmociones sociales».
Los sondeos revelan la gran popularidad del primer ministro socialista Georgis Papandreu, que ganó las elecciones de octubre prometiendo pleno empleo y mayores consumos populares. Se encontró que el gobierno conservador de Costas Karamanlís había falseado las cuentas en forma salvaje para afrontar mejor la confrontación electoral. El gobierno había dicho que el déficit de presupuesto era del 6% y en realidad llegaba al 12,8%. Grecia además debe más de 300 mil millones de euros. La noticia de este dato hizo estallar la crisis que hoy conmueve a Grecia y a Europa, porque si los helénicos se hunden en el default, el desastre se extenderá al resto de los 16 países de la llamada Eurozona.
El gobierno de Papandreu ha puesto en marcha un Plan de Estabilidad y Crecimiento que es una versión blanda de medidas de austeridad para evitar que los conflictos sociales se agudicen. Pero La Unión Europea le reclama purgas sociales mucho más rígidas para bajar el déficit, que en 2010 debería caer del 12,7% al 2,8%.
El gobierno ha bajado los sueldos, aumentado impuestos, recortado muchos gastos. Pero no basta. Los aduaneros siguen todavía en huelga y por ellos no pasan la frontera los combustibles refinados. Los taxistas también han hecho varias huelgas porque no quieren dar recibos obligatorios sobre los que hay que pagar impuestos.
En Grecia evadir impuestos es un deporte nacional. El clientelismo y la corrupción, como en los otros países europeos del Mediterráneo, están fuertemente instalados en el estilo nacional. Un interlocutor cuenta a Clarín: «Aquí todo se hace dando el fakelaki, el sobrecito».
El gobierno no ha pedido ayuda concreta a la UE porque si lo hace tendrá que aceptar la supervisión rígida de los socios, encabezados por Alemania y Francia. A mitad de marzo en Bruselas esperan el informe de Atenas para saber como va el plan de rígida austeridad. Si los resultados no son satisfactorios, Papandreu tendrá que anunciar nuevas medidas muy impopulares.