La crisis del capitalismo golpea a Europa
Resulta interesante observar y analizar los últimos acontecimientos que se vienen desarrollando en algunos países de la Unión Europea como Grecia, España, Portugal, Irlanda, Letonia, entre otros.
Resulta interesante observar y analizar los últimos acontecimientos que se vienen desarrollando en algunos países de la Unión Europea como Grecia, España, Portugal, Irlanda, Letonia, entre otros. Acontecimientos que expresan dramáticos efectos de la Crisis Mundial del Capitalismo en las economías más débiles de la Eurozona. Muchas de estas naciones que se asumían del Primer Mundo, están hoy sufriendo una serie estragos que las coloca hoy al borde de la quiebra.
En la actual coyuntura de la crisis, han empezado aflorar una serie de contradicciones inherentes a la composición de la Unión Europea, el desarrollo desigual salta a la vista y se devela el carácter imperialista de este organismo de integración supranacional. Hoy está en clara evidencia que a lo interno de este organismo prevalece la hegemonía de los capitales norteamericanos, alemanes, franceses e ingleses, estos capitales subordinan al resto de los componentes de la Unión, por lo cual países como Portugal, República Checa, España, los países bálticos y balcánicos, antiguas repúblicas soviéticas, entre otros, no son más que neocolonias que participan como socios subalternos en el reparto de la riqueza planetaria, son naciones dependientes del gran capital financiero e industrial mundial.
Los capitales financieros globales con el pretexto de reducir las deudas públicas y el déficit de las naciones más débiles de Europa, están exigiendo que estas apliquen medidas de liberalización de sus economías, de reducción del gasto público, y los derechos sociales-laborales de la clase trabajadora, nada más y nada menos que una ofensiva neoliberal sin precedentes en la región. Con respecto al tema del endeudamiento público veamos estas cifras dadas por Hedelberto López Blanch (La metástasis de la crisis capitalista, rebelión.org):
“… en 2010, la deuda pública de Grecia se cifra en 125 %; Portugal, 85%; Irlanda, 83%, y España, 66%. No obstante, las potencias pueden darse el lujo de tener cifras rojas parecidas como las de Estados Unidos, 85 %, Francia, 76 %, Reino Unido, 75 %, sin que nadie las obligue a tomar medidas extremas de austeridad. Este sobreendeudamiento representa un grave problema para cualquier nación pues al no cumplir con los pagos, el Estado no recauda, las personas se limitan en sus gastos en una sociedad puramente de consumo, las producciones bajan, el desempleo crece. Es como un alud que arrastra todo lo que encuentra a su paso”.
Revisemos a continuación las crisis económicas nacionales más importantes que en estos últimos tiempos se han venido desarrollando en Europa. En primer lugar revisemos el caso de Grecia que en estos días abarca una amplia cobertura mediática. De acuerdo a una opinión del sociólogo James Petras, las potencias capitalistas fundamentalmente Alemania y los Estados Unidos, plantean que la economía griega pase a control del Fondo Monetario Internacional y de gobiernos como el de la propia Alemania y Francia, para que los inversionistas y los acreedores ganen mayor confianza, se trata de una burda maniobra colonial.
Un dato interesante es que el endeudamiento (330 mil millones de euros, 125% de su PIB) y el déficit (40 mil millones de dólares) de la economía griega es producto de su desproporcionado gasto militar anual (4,5%) con respecto a su PIB, mientras que países como Alemania y Reino Unido gastan 1,5% y 2,6% respectivamente. Más del 50% del gasto militar griego va dirigido a la compra de equipamientos del complejo militar industrial franco-alemán, precisamente los países que exigen políticas de ajuste estructural, de austeridad extrema. La UE exige a Grecia que en 2010 reduzca el déficit cuatro puntos porcentuales, del 12,75% del PBI hasta el 8,7%, y situarlo por debajo del 3% como muy tarde en 2012 (http://www.javierortiz.net/voz/samuel/detras-del-deficit-griego).
En este orden el dirigente trotskista Jorge Altamira (Grecia convertida en protectorado, rebelión.org) nos advierte que:
“En el breve lapso de un mes, el gobierno de Atenas ha sido forzado a aumentar diversos impuestos, cortar gastos presupuestados de capital, reducir los salarios del sector público y aumentar la edad requerida para la jubilación. Ocurre que al cabo de esas cuatro semanas vencen deudas estatales del orden de los 17 mil millones de dólares. Más adelante, bajo la ‘supervisión’ de un comité de la UE, Grecia tendrá que aumentar el IVA, reducir los salarios en la actividad privada e hipotecar los ingresos de aduana”.
Es decir, toda una política antipopular que ya está empezando a calentar las calles de las principales ciudades griegas, donde cada vez más trabajadores y trabajadoras empiezan ha movilizarse, por lo cual se han iniciado huelgas generales y paros.
Otro caso patético, es la dura situación por la cual está atravesando Letonia. En menos de dos años su PIB se ha derrumbado en un 25,5%, y este año se espera una caída adicional de un 4% de acuerdo a estimaciones del FMI. Actualmente el déficit de este país supera los 5 mil millones de euros (mas del 9% del PIB) un exabrupto teniendo en cuenta el tamaño de su economía. En menos de dos años ha acumulado una deuda pública que asciende al 74% del PIB, que en el mejor de los casos se incrementará en un 89% en los próximos cuatro años, estos altos niveles de la deuda pública impiden que Letonia pueda ingresar a la eurozona. Un último dato a destacar es que la producción industrial letona registró una caída del 38% durante el último trimestre del año 2009. La grave crisis que vive este país lo está despoblando la juventud está emigrando de forma masiva a otros países en busca de oportunidades.
Finalmente debe destacarse, que todo este panorama ha venido debilitando en estas últimas semanas la posición del euro frente al dólar, los capitales financieros especulativos atemorizados por síntomas de una insolvencia de pago generalizada, están buscando refugio en la golpeada economía estadounidense. Esta crisis puede resquebrajar a la Unión Europea, producto de las asimetrías y la actitud mafiosa de las principales potencias.
Igualmente hay que resaltar que la crisis profunda de estos países europeos abren las puertas a un escenario de aguda lucha de clases en esta parte del planeta. Los sectores trabajadores tendrán que combatir férreamente para no dejarse arrebatar los derechos conquistados en más de un siglo de intensa lucha social y política. Y si quieren escapar de la barbarie, deberán plantearse un horizonte socialista único capaz de dar al traste con las causas de su creciente explotación, miseria y opresión.