¡La crisis no deben pagarla los estudiantes!

Pese a todos los anuncios oficiales que aseguraban que Venezuela estaba blindada ante la crisis capitalista, la economía nacional se ve golpeada por la caída de los precios del petróleo. El gobierno nacional, lejos de tomar medidas socialistas para enfrentar la crisis, ha optado por el recetario capitalista de aumentar el IVA.

Pese a todos los anuncios oficiales que aseguraban que Venezuela estaba blindada ante la crisis capitalista, la economía nacional se ve golpeada por la caída de los precios del petróleo. El gobierno nacional, lejos de tomar medidas socialistas para enfrentar la crisis, ha optado por el recetario capitalista de aumentar el IVA.

Para nadie es un secreto que el presupuesto de la ULA, como el del resto del aparato estatal, cae en saco roto debido a la corrupción administrativa. Tampoco es un misterio para nadie que las autoridades universitarias no ejecutan, desde hace muchos años, la totalidad del presupuesto que se le asigna a las universidades, y que siempre dejan un monto para engordar con los intereses de la banca. Y también cabe recordar que, las autoridades, con su criterio neoliberal y privatizador, dan prioridad a vulgares negocios y elefantes blancos como Corpoula, para generar «ingresos propios», dando uso ilegal a bienes de la universidad como ULA TV, o como ocurre con el alquiler del terreno destinado a la construcción de la Escuela de Medios Audiovisuales.

El presupuesto de la universidad ha crecido en los últimos 4 años, pasando de 401 millones de Bsf en 2004 a 1018 millones de Bsf en 2008 (esto es el presupuesto ejecutado, sin tomar en cuenta que cada año se ha dejado de ejecutar un porcentaje del presupuesto asignado, y en los últimos 10 años ese remanente ha oscilado entre el 6,7% y el 13,7% del presupuesto). A pesar de manejar tal cantidad de recursos, las autoridades universitarias no han resuelto los problemas de dotación de la ULA, ni han corregido los problemas con los servicios estudiantiles. Por el contrario, han dilapidado los recursos en costosas e inútiles remodelaciones de oficinas y edificios, renovación de flotas de carros de lujo, movilizaciones derechistas, viajes injustificados por parte del equipo rectoral, la campaña electoral de Léster, y otros ejemplos de corrupción. El reclamo de las autoridades con relación al presupuesto es hipócrita, y los estudiantes no deben atender a convocatorias de parte de unos ladrones de cuello blanco, que son los primeros culpables de la mala situación de la universidad.

Pero nada de esto significa que los estudiantes deban justificar las medidas «anticrisis» del gobierno, y plantear que un recorte presupuestario es positivo para las universidades. La campaña justificadora del recorte presupuestario por parte de los grupos estudiantiles vinculados al PSUV contradice toda la tradición de luchas del movimiento estudiantil revolucionario, pues los estudiantes de izquierda de todas las épocas siempre hemos reivindicado la defensa del presupuesto universitario. Es falso que la corrupción y el gasto suntuario vayan a desaparecer gracias al recorte del presupuesto, al contrario, sabemos que ese recorte terminaremos pagándolo los estudiantes, si no nos movilizamos en defensa de nuestras reivindicaciones y exigiendo el control democrático del gasto administrativo en la ULA. La eliminación del gasto suntuario y la corrupción sólo la conquistarán los estudiantes peleando al lado de los profesores y obreros honestos por la contraloría social.

Planteamos con claridad que los revolucionarios no podemos dar apoyo político a las autoridades universitarias, pero tampoco al gobierno, pues ambos bandos representan a sectores burgueses, que son realmente los que deberían pagar el precio de la crisis económica. Además, el tira y encoge entre ambos grupos de poder suele terminar en pactos y negociados, todo en perjuicio de la comunidad universitaria y el pueblo. Una de las muestras más claras del carácter antiobrero de las medidas «anticrisis» es la recomendación hecha por el ministro Acuña a los rectores derechistas de las universidades autónomas, de que hagan recortes de personal para cumplir con el recorte presupuestario. Como vemos, el gobierno y la oposición de derecha coinciden en que nosotros, los estudiantes y los trabajadores, debemos pagar la crisis. Por todo eso decimos:

¡Ni recorte presupuestario ni recursos para la corrupción, contraloría estudiantil ya!
¡Exijamos cuentas a las autoridades universitarias!
¡Que la crisis la paguen los de arriba!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *