“La política petrolera es igual a la de la cuarta república”: Armando García Miragaya
Gerente de Planificación Estratégica e Inteligencia de Negocios de Pdvsa entre 2003 y 2004, explica que la producción que la corporación dice manejar, incluye una parte que no es venezolana. Por otra parte, afirma que las restricciones de su liquidez tienen su origen en la internacionalización que abrió Luis Giusti y otros en esta industria. García Miragaya considera imprescindible implementar una gran estrategia de refinación a largo plazo.
Gerente de Planificación Estratégica e Inteligencia de Negocios de Pdvsa entre 2003 y 2004, explica que la producción que la corporación dice manejar, incluye una parte que no es venezolana. Por otra parte, afirma que las restricciones de su liquidez tienen su origen en la internacionalización que abrió Luis Giusti y otros en esta industria. García Miragaya considera imprescindible implementar una gran estrategia de refinación a largo plazo.
Caracas, noviembre 15 de 2009 (Foto Wilfredo Yustis).- Armando García Miragaya, uno de los más solventes expertos petroleros de Venezuela, entra raudo al lobby del hotel Paseo Las Mercedes en Caracas, cuyo gélido ambiente debería bajar las altas temperaturas que obligan a su cuerpo a sudar.
No parece hacerle caso a la transpiración, y en vez de sofocarla, despliega una ancha sonrisa acompañada por un grueso cartapacio de papeles del cual van saliendo hojas y hojas de cifras, gráficos, estadísticas y artículos que harían las delicias de un estudiante de postgrado en la universidad.
García Miragaya se blinda con números, pero sorprende a continuación con el despliegue de conceptos: no en balde ocupó la Gerencia de Planificación Estratégica e Inteligencia de Negocios de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) entre los años 2003 y 2004, período crítico en nuestra principal industria de exportación.
Habla vehementemente, como si quisiese convencer a incrédulos o aclarar el panorama a discípulos universitarios. No hace falta: todo lo que tenga que ver con petróleo es crucial para cualquier venezolano.
-Usted es un experto petrolero y la oposición hace fiesta con la fabulosa cifra de ingresos petroleros que habría manejado el presidente Chávez en sus 10 años de gobierno. ¿En realidad de cuánto dinero estamos hablando?
-En vez de los 900 millardos de dólares de los que habla la oposición -que estarían integrados por los ingresos totales de Pdvsa consolidada-, realmente los ingresos netos de divisas al país por exportaciones netas (exportaciones brutas menos compras de crudos y productos) son un tercio de aquella suma proclamada, es decir, unos 300 millardos de dólares. Primero, es una afirmación objetiva que se puede demostrar con los balances de Pdvsa y corroborar con los ingresos de divisas que publica el Banco Central de Venezuela anualmente. Por ejemplo, para el año 2008, las ventas de Pdvsa fueron 126 millardos de dólares, pero de esos 126, 37 corresponden a Citgo, que es una empresa de Pdvsa que no genera ni un dólar para Venezuela aunque tuvo que pagarle al Estado norteamericano un millardo de dólares y a nosotros nada.
Segundo, compramos en el mismo 2008 40 millardos de dólares en crudo y productos para alimentar nuestras refinerías en el exterior en la medida en que ellas no refinen crudo venezolano. Por tanto, las exportaciones netas reales el año pasado fueron de 89 millardos de dólares menos esos 40 que mencioné de compras de crudo y productos, lo que da 50 millardos de dólares netos, que representan apenas 39% de las ventas totales consolidadas de Pdvsa.
-La oposición afirma a este respecto que las cifras de Pdvsa no son confiables. Es más, dicen que son falsas y que la realidad es peor. Que exporta menos petróleo del que informa e ingresa menos de lo que dice.
-La explicación de ese enigma es la siguiente: que se suma a la producción de crudo de Pdvsa -que no llega a los tres millones de barriles diarios que aparecen correctamente en los números de la Opep-, unos 800.000 barriles diarios que Pdvsa maneja pero no produce. Entonces, cuando la corporación afirma que está manejando más de tres millones de barriles diarios de producción, es correcto lo que dice, aunque esa producción no sea venezolana totalmente. Esa es la razón de que Venezuela no objete las cifras de producción que publica la Opep. En pocas palabras es una verdad con palabras equívocas, porque el sistema de refinación de Pdvsa sí tiene una capacidad mayor de tres millones de barriles diarios, pero sólo refina en Venezuela 1.2 millones de barriles diarios -y se consume en el país más de 500.000 barriles diarios, más gas.
-Se ha señalado otro aspecto preocupante de Pdvsa: sus restricciones de liquidez. ¿Se deben solamente a la baja en el precio del petróleo?
– Esa situación actual de restricciones de liquidez , tanto en dólares como en bolívares, tiene su origen en el arrastre del proceso de internacionalización que abrió Luis Giusti y otros en la industria, que tuvo como argumento espúreo que había un diferencial de fletes entre los tanqueros de crudos y de productos (más costosos) que favorecía la refinación en el exterior.
-¿Y eso era mentira?
-Esa conclusión era relativamente cierta cuando el precio bajó a 10 dólares el barril pero a un precio de 70 dólares el barril esa afirmación pasa a convertirse en falsa.
-Explíquenos por qué.
– Se tomó una decisión estratégica en los años 80 y 90, pensando que el crudo iba a ser barato, lo que en términos estratégicos de mediano plazo cualquier analista serio decía que no era cierto, porque el precio promedio de referencia de los escenarios al 2020 -con el gran crecimiento del consumo de Asia- implicaba un precio de aproximadamente 50 a 60 dólares el barril. A estas consideraciones equivocadas, enmascaradas en una coyuntura táctica muy especial de sobreproducción de la Opep que no iba a durar, se añade que a Venezuela le interesa controlar el mercado final de sus productos con el valor añadido en empleo, ingeniería y tecnología propia desarrollada en su territorio. Este proyecto integral de ventajas excede con mucho a las marginales consideraciones de fletes que, en todo caso, le corresponde a los consumidores pues puede compartirse el costo de flete negociado y vendiendo en nuestros puertos.
-El gobierno del presidente Chávez plantea diversificar sus ventas y salir de la órbita norteamericana, vendiendo petróleo a mercados asiáticos como China. En ese caso ¿Quién pagaría los fletes?
-Ahí está una gran pregunta. Al venderle a China, lo pagamos nosotros. Y eso no nos conviene.
NO CONVIENE ATARNOS
-¿Que otras objeciones sostiene contra las políticas de Pdvsa?
-No es conveniene atarnos a plazo infinito en la Faja Petrolífera del Orinoco a empresas mixtas sin duración determinada. Igual que se objetaron los convenios operativos que se convirtieron en convenios estratégicos a 20 años, con mayor razón hay que objetar que nos atemos a empresas mixtas -aunque sean con mayoría nuestra- pues en principio estas empresas duran mucho más que 20 años. Otra cuestión que adicionalmente hay que considerar es que necesitamos 6.000 pies cúbicos de gas por cada barril que produzcamos en la Faja, a lo que se añadiría el déficit de gas que ya tenemos en el Zulia, y por ello tenemos que ser muy cuidadosos en comprometer grandes cantidades de gas para la exportación sin pensar que necesitamos producir durante más de 100 años en la faja.
– ¿Cómo caracterizaría la política petrolera que actualmente tenemos? ¿Tan entreguista e imprevisiva como la de la IV República, como llaman a aquella los factores aliados al presidente?
-Es igual a la de la cuarta república, pues de 1975 a 1982 no necesitamos ni la internacionalización de la refinación ni las empresas mixtas, mientras que de 1982 a 1998 estos dos factores entraron en nuestra industria petrolera y el presidente Chávez todavía no ha logrado revertir estas estrangulaciones y solamente ha tenido el mérito de aumentar la regalía petrolera del 17% al 40%, pero no la carga fiscal total que ha venido bajando desde 1984 al tener una Pdvsa en el exterior que no nos rinde ningún beneficio.