La Sierra de la Culata en peligro
Erase una vez una Gallina que ponía un huevo de oro al dueño cada día. Aun con tanta ganancia mal contento, quiso el rico avariento descubrir de una vez la mina de oro y hallar en menos tiempo más tesoro. Matóla y abrióla en el vientre de contado; pero después de haberla registrado, descubrió que muerta la Gallina, perdió su huevo diario y no halló la mina de oro.
Erase una vez una Gallina que ponía un huevo de oro al dueño cada día. Aun con tanta ganancia mal contento, quiso el rico avariento descubrir de una vez la mina de oro y hallar en menos tiempo más tesoro. Matóla y abrióla en el vientre de contado; pero después de haberla registrado, descubrió que muerta la Gallina, perdió su huevo diario y no halló la mina de oro.
Importancia
La Ciudad de Mérida tiene el privilegio de estar rodeada por dos inmensas áreas protegidas, el Parque Nacional Sierra de la Culata al norte y el Parque Nacional Sierra Nevada al sur. Nuestros Parques Nacionales (PN) son espacios del territorio que se han reservado para la protección de los elementos naturales que producen los recursos vitales que sustentan la vida: el aire, el agua, el clima y la energía, entre otros.
En el caso del PN Sierra de La Culata, cuya extensión territorial abarca 200.400 ha (algo así como 20 veces la ciudad de Mérida), podemos destacar los páramos y bosques nublados andinos que producen millones de toneladas de oxigeno, lo cual mantiene purificado el aire merideño y garantiza el agradable clima que caracteriza a nuestra región, también podemos resaltar el nacimiento de los ríos Capaz, Tucaní, Torondoy, Pocó, Las Gonzales, Albarregas y Mucujun, los cuales abastecen de agua a casi 800 mil personas que habitan los pueblos que se encuentran alrededor del Parque: Jaji, La Azulita, Tucani, La Mesa, Timotes, Sto. Domingo, Apartaderos, Mucuchies, Tabay, Ejido, Lagunillas y La Ciudad de Mérida.Innumerable es la biodiversidad y el endemismo que se encuentran en nuestro PN Sierra de La Culata, representada por plantas y animales como los Osos Frontinos, los casi extintos Cóndores de Los Andes, los radiantes Frailejones, los incomparables Coloraditos, entre otros millones, que en conjunto forman una gran cadena ecológica que sustenta nuestra vida.
Problemas
El PN La Culata fue decretado en diciembre de 1989 y a casi 20 años de su creación, se encuentra amenazado y agredido, por diversos factores entre los cuales podemos mencionar: la cacería de fauna silvestre que ha diezmado la población de animales como el Oso Frontino, como lo demuestran las investigaciones de la fundación Andigena (www.andigena.org) y los casos denunciados por la fundación Orca (www.orca.com.ve).
La tala y la quema que han acabado con bosques y paramos especialmente en la época de sequia que se extiende de noviembre a abril, tal como lo evidencia el caso de la desforestación del sector Las Cuadras en el Valle denunciado al Ministerio del Ambiente por un grupo de estudiantes de Gestión Ambiental de la UBV. La agricultura y la ganadería comercial han deteriorado paramos, compactando pantanos y secando lagunas y nacientes. Las siembras de especies exóticas como los alevines de Truchas promovidas por Insopesca han acabado con especies de peces autóctonos y ha impulsado el ingreso de pescadores y excursionistas inconscientes que han abandonado toneladas de basura como lo evidencian las investigaciones del Colectivo Tatuy (www.tatut.org) y la Red de Protección de Humedales.
El ingreso de motorizados y rústicos deportivos ha destruido miles de plantas y ha contaminado con aceite y gasolina lagunas y nacientes tal cual como lo comprueban las denuncias formales del Colectivo Tatuy. Los deportes de aventura como el montañismo, el cayoning, el ciclismo de montaña, impulsados por las agencias de turismo irresponsables han contribuido también con el deterioro de estos ecosistemas. Las construcciones de viviendas y carreteras ilegales como en el caso del Paramo de Los Conejos – Caserío de Las Gonzales, han impulsado exponencialmente la penetración de estos vicios y problemas al Parque Nacional.
Heroica pero muy débil ha sido la gestión de la Dirección Regional del Instituto Nacional de Parques en estos casi 20 años, con apenas 12.000 Bsf de presupuesto anual, 6 Vehículos, 5 Motos, aproximadamente 60 personas entre personal administrativo, técnico y obrero, compartidos para la administración de: 3 Parques nacionales (Sierra Nevada de 276.446ha, Sierra de La Culata de 200.400ha y Guaramacal de 21.000ha) 4 Monumentos Naturales (Laguna de Urao, La Galera, Las Chorreras y Teta de Niquitao) y 3 Áreas Recreativas (Albarregas, Arco de La Federación y La Beatriz) en los Estados Mérida, Trujillo y Barinas. Y con solo 6 guarda parques: 4 en el Valle de la Culata y 2 en Mifafi y 1 solo puesto de guarda parques en Mifafi, asignados a las 200.400 ha del PN La Culata (la ciudad de Mérida posee apenas 12.000 ha) donde se producen los recursos que sustentan la vida de los merideños, causa alarma comparar la importancia y la relevancia de este Parque Nacional como elemento estratégico para el desarrollo de la región y los pocos recursos, de nuestra pujante economía, que le son asignados.
Propuestas para la protección y conservación del Parque Nacional Sierra de la Culata
Bajo la premisa de educar al niño de hoy para no reprimir al hombre de mañana, pero sin dejar de castigar hoy al hombre de que no fue educado en el pasado. Expondremos algunas propuestas para la protección y conservación del Parque.
Con respecto a la educación y comunicación ambiental. Además del registro y cobro de tarifa de los usuarios del PN, es necesario que al momento del ingreso, las personas reciban una charla, un folleto, una bolsa y un contrato que informe sobre las normas que regulan las actividades dentro del PN. Es necesario desplegar en los caminos y lugares concurridos avisos con mensajes educativos que destaquen la importancia de cada elemento o ecosistema, otros mensajes deberán hacer énfasis en el comportamiento de acuerdo a las normas que rigen en el PN: plan de ordenamiento y reglamento de uso.
En los pueblos cercanos o beneficiarios del PN es necesario insertar el tema del conociemiento y conservación de Parque La Culata en las materias, ejes o proyectos de los programas escolares. Se deben realizar permanentemente excursiones didácticas que destaquen la importancia de los recursos que almacena el PN (por ejemplo a la Laguna Tapada y al Rio Mucujun, donde nace el agua de Mérida). Actividades como los Juegos Ecológicos deben mantenerse y extenderse a todas las comunidades vinculadas con el PN. Debe promoverse en los usuarios del PN (scouts, montañistas, guías turisticos, etc) el montanismo de bajo impacto, a través de folletos, talleres y cursos, incluso este tema debería ser requisito en el proceso de certificación de los prestadores de servicios turísticos. Se debe incentivar la participación comunitaria a través de grupos como los Amigos de los parques, los Vigilantes voluntarios del ambiente, la Red de humedales, etc.
En materia de comunicación es necesario que fuera de los límites del parque se despliegue permanentemente una campaña de medios de comunicación y medios publicitarios a través de materiales gráficos y audiovisuales, que destaquen aspectos relevantes del PN: definición, ubicación, importancia, reglamentos, beneficios, objetivos, problemas y recomendaciones para su conservación.
A nivel de investigación, se debe mantener, impulsar, financiar y divulgar estudios sobre los ecosistemas del PN, tal como los que han sido llevados a cabo por: el ICAE (www.ciens.ula.ve/icae), el libro «PN de Mérida» (Rincón, Sulbaran, Matos, Zambrano 2007. Fonacit, Bioandina) o el libro «PN de Venezuela» (Reig 2003. Todman, Ecograf). Así mismo deben elaborarse los distintos inventarios de elementos y ecosistemas tales como: humedales, bosques, paramos, picos, vegetación, fauna, etc.
Con respecto a las comunidades ubicadas dentro del parque, es imprescindible mantener y actualizar un registro de poblaciones autóctonas, que permita identificar a los habitantes permanentes, itinerantes y herederos, lo cual permitirá controlar eficazmente los permisos para construcciones y desarrollos dentro del Parque Nacional. Es necesario que los entes financiadores y promotores del desarrollo (Mpp Agricultura y Tierras, Inder, Inti, Insopesca, Inia, Fides, Fundacomunal, Alcaldías, Gobernaciones) exijan condiciones sustentables y ecológicas para el financiamientos de proyectos dentro de los límites del parque, lo cual también debe contar con aval definitivo de Inparques bajo el absoluto apego al plan de ordenamiento y reglamento de uso.
Debe considerarse que el modelo de desarrollo de las comunidades dentro del PN debe ser distinto al de los pueblos y ciudades, por ello la formación y capacitación de sus habitantes debe ser un proceso permanente y con un alto sentido ecológico, para ello deben emularse experiencias como las emprendidas por el Proyecto Paramo Andino o el programa de Turismo Rural de Andes Tropicales en la capacitación y financiamiento sustentable para los habitantes de los páramos y bosques andinos. Antes de cualquier actividad consuntiva, se debe propiciar el mantenimiento de las condiciones ambientales originales, a través de pagos por servicios ambientales a los propietarios originarios de los terrenos, tal como se ha hecho en países como Costa Rica.
En materia de vigilancia y control, es necesaria la instalación de Puestos de Control (PC) en todos los puntos importantes de acceso y actividad dentro del PN, a su vez cada PC deberá ser el epicentro de una amplia zona de control que será patrullada por dos Guarda Parques (GP) mientras un tercero permanecerá en el PC. Cada GP deberá estar formado con un perfil ambientalista, que sea capaz de prevenir posibles impactos ambientales pero que también sea capaz de neutralizar actividades ilícitas que atenten contra el valioso patrimonio natural que custodia. Para tal fin deberá poseer condiciones físicas adecuadas que le permitan afrontar las condiciones topográficas y climáticas a las que se verá sometido. De acuerdo con la responsabilidad y la exigencia que este trabajo presenta, deberá devengar un salario equivalente a 4 sueldos mínimos además de todos los bonos y beneficios que por ley le correspondan.
Con respecto a la dotación y equipamiento, cada PC deberá contar, además de todos los insumos necesarios para la estadía, con una moto y dos mulas o caballos que permitan la movilización eficiente de los GP, y así mismo considerando el altísimo valor ecológico, económico, social y cultural del área que se encuentra bajo su protección, cada GP deberá tener 1 arma de fuego, 1 arma de choque eléctrico, 1 receptor gps, 1 larga vista, 1 cámara de video y 1 radio transmisor. Paralela o sustitutivamente es necesario desplegar permanentemente, en el territorio del PN, un comando militar de guardería ambiental.
Con respecto a la mitigación de impactos, se deben propiciar jornadas de saneamiento ambiental como la «Pesca de desechos», así mismo deben mantenerse y expandirse proyectos como la «Misión árbol» y el programa de control de Incendios Forestales, y definitivamente debe ejecutarse la demolición de infraestructuras ilegales como viviendas y carreteras.
En materia institucional, hemos observado como a lo largo de 15 años como han transitado múltiples directores en la dirección regional de Inparques, donde cada nueva gestión ha sido una esperanza que finaliza en frustración, ya que las mismas limitaciones presupuestarias y de personal (antes y después de la revolución), siguen siendo la excusa para la inoperancia institucional. Es por ello que solicitamos que todas las propuestas anteriores se enmarquen y materialicen en un proceso de transformación radical de la institución que pudiera denominarse Misión Herencia Natural, que debería pasar por cambios de estructura organizativa, de funciones de los cargos, de nombre, de imagen, hasta de la modificación conceptos como el de Parque Nacional al de Reserva Natural Nacional y muchos cambios más que garanticen la protección y conservación del único y verdadero tesoro que heredaran nuestros hijos en el futuro.
El día que se acaben todos los ríos, bosques y ecosistemas, nos daremos cuenta que no podremos respirar, beber o ingerir nuestro dinero.
Exigencias
Solicitamos y exigimos: a la Asamblea Nacional y a su comisión de Ambiente (atención Diputado Merideño Manuel Briceño), a los Ministerios del Poder Popular de Finanzas, de Planificación, del Ambiente (atención Viceministro Merideño Alex Cegarra), al Instituto Nacional de Parques (atención Director Merideño Juan Carlos Velázquez), urgentes y enérgicas gestiones y acciones para el fortalecimiento, la protección y la conservación del Parque Nacional Sierra de La Culata y todas las Áreas Protegidas de Venezuela, ya que el desarrollo sin el aire y sin el agua no tiene ningún destino seguro.
Más información en www.tatuy.net y programa radial Zona Verde en Mérida: Ecos 93.9 miércoles 8pm, domingos 9am, Horizonte 106.7 jueves 8pm, sábados 10am, Vida 99.7 sábados 11am y ULA F.M. 107.7 domingos 9pm