Magistrados del TSJ aprueban jubilación masiva y multimillonaria
Anticipándose a la aplicación de la Ley de Emolumentos, que limitaría sus sueldos a «apenas» 15.000 BsF mensuales, el TSJ aprobó un reglamento que dicta la jubilación forzada de todos aquellos magistrados que cumplen los requisitos para acogerse a la jubilación. De esta manera, el 90% de los magistrados actuales se jubilaría con pensiones superiores a los 30.000 BsF mensuales, y continuaría en funciones hasta tanto culmine el período por el cual fueron designados. Los magistrados lograrían de esta manera cobrar sumas astronómicas por concepto de prestaciones sociales, y luego mantener una pensión grotescamente alta, sin separarse de sus cargos.
Anticipándose a la aplicación de la Ley de Emolumentos, que limitaría sus sueldos a «apenas» 15.000 BsF mensuales, el TSJ aprobó un reglamento que dicta la jubilación forzada de todos aquellos magistrados que cumplen los requisitos para acogerse a la jubilación. De esta manera, el 90% de los magistrados actuales se jubilaría con pensiones superiores a los 30.000 BsF mensuales, y continuaría en funciones hasta tanto culmine el período por el cual fueron designados. Los magistrados lograrían de esta manera cobrar sumas astronómicas por concepto de prestaciones sociales, y luego mantener una pensión grotescamente alta, sin separarse de sus cargos.
Sólo la magistrada Blanca Mármol de León salvó su voto en la decisión que aprobó el reglamento en cuestión. En declaraciones a la prensa, Mármol de León dijo que el móvil del reglamento era evadir la aplicación de la Ley de Emolumentos, al tiempo que criticó dicho instrumento por vulnerar el principio de la progresividad de los derechos de los trabajadores. Con este argumento bastardo, la magistrada pretende justificar los deshonrosamente altos salarios que ganan los magistrados del TSJ.
La Asamblea Nacional informó que constituirá una comisión para investigar acerca de esta decisión tomada por el TSJ. Diputados del PSUV, como Carlos Escarrá, y opositores como Juan José Molina, criticaron por igual la decisión del TSJ. Expertos en Derecho opinaron que los magistrados que se mantengan en funciones luego de jubilarse no tendrían responsabilidades disciplinarias, funcionariales o penales, ya que no tendrían el vínculo con la Administración Pública de los funcionarios activos.
El dirigente del Sindicato de Trabajadores Tribunalicios, Kennedy Bolívar, también rechazó la jubilación masiva. Denunció que los trabajadores tribunalicios no llegan a los 2 mil BsF mensuales y ni siquiera se les reconoce su contratación colectiva, mientras que un magistrado estaría ganando más de 40 mil BsF, una desproporción aberrante.
El reglamento aprobado por el TSJ cita textualmente al artículo 89 de la Constitución, que reza «ninguna ley podrá establecer disposiciones que alteren la intangibilidad y progresividad de los derechos y beneficios laborales», en alusión a la Ley de Emolumentos, aprobada recientemente por la AN.