México: ¡Impulsemos el paro del 16 de marzo!
Para el próximo martes 16 de marzo varias organizaciones sindicales convocan a un paro nacional.
Para el próximo martes 16 de marzo varias organizaciones sindicales convocan a un paro nacional. Entre las principales demandas está la lucha contra los despidos de los trabajadores de la electricidad agrupados en el Sindicato Mexicano de Electricistas, y la defensa de los mineros de Cananea, que están en huelga hace 3 años pidiendo mejores condiciones de trabajo y seguridad. Reproducimos a continuación el editorial de El Socialista, periódico del Partido Obrero Socialista
Para enfrentar al gobierno:
¡Impulsemos el Paro del 16 de marzo!
El gobierno mexicano, siempre fiel a los intereses de los grandes capitales, ha golpeado al pueblo trabajador con aumentos a la gasolina y con incrementos a los precios. No sólo es incapaz de contener la ola de violencia que azota al país, sino que cada vez hay más evidencia que liga a altos personajes de la política mexicana con el narcotráfico. Y es lógico, ante la crisis financiera, el gobierno siempre responderá a los intereses –incluso a los ilícitos- que le dieron el poder, y esos intereses no se encuentran entre el pueblo trabajador.
El pueblo se da cuenta de que el gobierno lejos de solucionar, genera cada vez más problemas. Esto se refleja en la caída de la popularidad de Calderón; de acuerdo a una encuesta presentada a finales de febrero por El Universal, el 60 por ciento de los mexicanos reprueba la labor del presidente. Y el 16 de marzo podremos convertir el descontento en acciones.
Debemos dejar atrás la confianza en las instituciones que responden a un sólo amo, al capital, y empezar a generar nuestros propias instancias de organización, para exigir que los aumentos a la gasolina y a los precios se echen abajo, que se grave a las grandes fortunas, para exigir un aumento salarial de emergencia, equivalente al que Calderón le concedió al ejército como premio por cuidar a los narcos y pisotear a la ciudadanía. La organización popular debe servir para defender nuestros derechos laborales, fundamentales para garantizar una vida laboral digna a todas y todos los mexicanos.
En este sentido, los valientes mineros de Cananea, con su inquebrantable lucha contra el poderoso Grupo México (GM) son ejemplo de lo que la clase trabajadora debe hacer. Ellos, junto con sus compañeras y familiares, se han organizado y han llamado a todo el pueblo a rodear la mina con la mayor solidaridad posible. Miles han respondido a su llamado, pero no es suficiente aún. El golpe que el gobierno pretende asestar a los mineros es una probada de lo que son capaces con tal de acabar con la Ley Federal del Trabajo, especialmente con el derecho de huelga, arma fundamental de la clase trabajadora para defenderse de empresarios sin escrúpulos como los del GM.
Es momento de hermanar las luchas y las demandas de la clase trabajadora mexicana. El SME tuvo el reflejo de llamar a la Asamblea Nacional de Resistencia en cuanto se supo del golpe a Cananea, y este es el primer paso para construir la unidad. Esta asamblea debe dar origen a un Frente Nacional de Lucha que impulse movilizaciones y brigadas de información a lo largo y ancho del país, que lleve brigadas en las que se integren no sólo dirigentes sindicales, sino también los mineros, los electricistas, el magisterio, los petroleros y representantes de todas las luchas que hoy se encuentran en resistencia.
Este Frente, que empieza a tomar forma en torno a los mineros, no sólo debe defender a Cananea, debe exigir también que los presos de Atenco salgan libres y debe exigir que la factura de la crisis dejen de cobrársela a los trabajadores, que la paguen quienes la ocasionaron. Quienes nos integremos a esta iniciativa, deberemos garantizar discusiones democráticas, que permitan identificar las demandas más urgentes para agrupar a un gran número de organizaciones y personas dispuestas a ejecutar un plan de lucha nacional decidido entre todos.
El próximo 16 de marzo, precisamente cuando vence formalmente la revisión del Contrato Colectivo de los trabajadores del SME, esa Asamblea ha convocado a realizar una huelga política nacional, para rodear de solidaridad a los electricistas. E independientemente de que la mayoría de las direcciones sindicales charras y burocráticas, no acatarán la huelga, debemos de realizar acciones para demostrar el enorme descontento que se viene acumulando entre la clase trabajadora. Todas las personas, aún aquellas que no están integradas a un sindicato u organización, deben participar. Hay que sumarse a las movilizaciones, cierres de carreteras, manifestaciones, organizar con los vecinos cacerolazos, en fin, paralizar al país.
No más confianza en los partidos ligados al gobierno ni en las instituciones, hoy es momento de construir las instancias organizativas de la clase trabajadora, hoy es momento de salir a las calles.