“Micheletti” Rafael Lacava, alcalde de Puerto Cabello propicia golpe de estado contra Concejo Municipal
Puerto Cabello, 21 de agosto de 2009 (foto Roberto González).- Como parte de la grave crisis interna que vive el PSUV en el Estado Carabobo, que ya tuvo una fuerte expresión con la expulsión de varios dirigentes de esa tolda en Guacara, este miércoles 19 de agosto se produjo un nuevo hecho bochornoso que bien podemos catalogar como un verdadero “golpe de estado” en contra del Concejo Municipal promovido por el alcalde del municipio de Puerto Cabello, “Micheletti” Rafael Lacava.
Puerto Cabello, 21 de agosto de 2009 (foto Roberto González).- Como parte de la grave crisis interna que vive el PSUV en el Estado Carabobo, que ya tuvo una fuerte expresión con la expulsión de varios dirigentes de esa tolda en Guacara, este miércoles 19 de agosto se produjo un nuevo hecho bochornoso que bien podemos catalogar como un verdadero “golpe de estado” en contra del Concejo Municipal promovido por el alcalde del municipio de Puerto Cabello, “Micheletti” Rafael Lacava.
Los hechos
Las diferencias internas en el PSUV, conllevaron a un distanciamiento entre la fracción que encabezan el actual alcalde “Micheletti” Rafael Lacava, Juan Samuel Cohen y Noé Reyes, mientras que en la trinchera opuesta se ubicaron los ediles Canuto Rodríguez, Fanny Rendón, Fernando Arévalo y Orlando Rodríguez. Estos últimos ocupan los cargos principales del Concejo, desde hace más de ochoe meses.
Para solventar esta grave crisis, el “Micheletti” Lacava no tuvo mejor idea que propiciar el miércoles 19 de agosto una acción ilegítima, al ordenar a sus allegados Noé Reyes y Samuel Cohen a que convocaran a una sesión del cabildo, a la cual no fueran invitados los concejales principales y en su reemplazo participaran los concejales suplentes, en un claro hecho de suplantación fraudulenta. Y en un abrir y cerrar de ojos, como ya nos tienen acostumbrados las rutilantes figuras de la boli-burguesía y la burocracia rojo-rojita psuvista, el «Concejo Paralelo» promovido por «Micheletti» Lacava proclamó a Noé Reyes como Presidente, Samuel Cohen como vice-presidente y destituyó al actual contralor municipal José Francisco Rodríguez, quien fue sustituido por Hildegar Tovar. Todo esto ante la mirada indolente y cómplice de los organismos de seguridad del municipio.
En respuesta a esta acción írrita, los concejales suplantados en asocio con concejales afectos a Un Nuevo Tiempo, acompañados de un cerrajero reabrieron las oficinas y procedieron a reinstalar el concejo municipal y declararse en sesión permanente hasta que se restituya al decir de los afectados “el estado de derecho”.
Este tipo de comportamientos vergonzosos muestra a las claras varias cosas. La primera, el profundo grado de deterioro y degeneración política que vive la dirigencia del PSUV en el Estado Carabobo. En segundo lugar los métodos burocráticos y totalitarios de las principales figuras de ese partido que prefieren recurrir a soluciones que desconocen la participación directa y protagónica del pueblo y se apoyan en bandas agresivas para imponer sus decisiones. En tercer, lugar, los ediles que fueron elegidos por la población son desconocidos por las autoridades del PSUV y en cuerto lugar, estos mismos concejales, que hasta ayer eran rojo-rojitos y se rasgaban las vestidueras por Chávez, invariablemente retornan al lugar de donde provienen la inmensa mayoría de las figuras públicas del PSUV, es decir a sus fuentes originarias adecas y copeyanas.
A resaltar también la extraordinaria similitud en las actuaciones de Rafael Lacava con las del golpista hondureño Micheletti. Y saber que hace poco, este alcalde que pretende ser más revolucionario que cualquiera, utilizó en forma abusiva los micrófonos de una emisora para descalificar y señalar como supuestos delincuentes a honestos y reconocidos dirigentes sindicales que en Puerto Cabello defienden a 13 padres de familia acusados injustamente de narcotrafico y que llaman a la movilización para proteger los derechos conculcados de más de 7.000 trabajadores portuarios afectdos con la creación del ente burocrático Boli-puertos.
Definitivamente en esa tolda política del PSUV, sus dirigentes tienen poca o ninguna autoridad moral para descalificar a nadie, ya que ellos actúan igual que las peores lacras de los partidos capitalistas del mundo. No por casualidad, en las movilizaciones de los portuarios, los primeros «iconos» en caer fueron las vallas con las imágenes de este alcalde rojo-rojito, antiobrero, anti-popular y ahora golpista.