Ninguna paz podrá liberar a Palestina mientras el estado de Israel siga existiendo
Ninguna paz podrá liberar a Palestina mientras el estado Israel siga existiendo
Israel realiza un masacre a un pueblo que está encarcelado en una franjita de
Ninguna paz podrá liberar a Palestina mientras el estado Israel siga existiendo
Israel realiza un masacre a un pueblo que está encarcelado en una franjita de
tierra, de una extensión similar a un cuarto de la isla Oland (perteneciente a
Suecia). El baño de sangre en la franja de Gaza es parte de la política
sionista genocida, mientras en el mundo muchos intentan echarle la culpa a las víctimas, el
pueblo palestino. Como si estos fueran responsables de las ansias de expansión del estado sionista. Como si los palestinos fueran responsables de sus propios asesinatos indiscriminados.
Primero: el bloqueo de 18 meses del estado Israel y ahora la guerra abierta
contra Gaza, no son producto de un conflicto entre dos partes. Segundo: la solución para la
lucha para liberar a los palestinos no está en la diplomacia ni en el
derecho
internacional, sometido a restricciones establecidas por el imperialismo.
En el primer aspecto se pueden ver fácilmente en las relaciones de fuerza. Una de las maquinas de guerra más entrenada y poderosa del mundo, apoyada económica y
militarmente por los EEUU y la UE, confronta a 1,5 millones de pobres y encarcelados en un gran campamento de reclusión, donde la resistencia debe actuar clandestinamente y producir artesanalmente su armamento. Según las estadísticas de muerte durante la guerra actual, una vida israelí vale unas cien vidas palestinas. Durante los últimos ocho años han muerto 20 israelíes por los cohetes Qassam lanzados desde la franja Gaza, mientras el ejército israelí ha matado a
más de 5.000 palestinos. Es una tontería afirmar que el estado de Israel está amenazado y debe defenderse de la exterminación. La hipocresía y las mentiras
del mundo, de la prensa, de los altos políticos y el ministro sueco de los asuntos exteriores, Carl Bildt, vienen del interés del mundo imperialista a
proteger y defender su cabeza de puente, el estado de Israel como campamento militar para sus incursiones de caza en el Oriente Próximo.
El segundo se puede ver en la política sionista genocida donde no cabe paz durable ni diplomacia. La meta de Israel es crear un estado judío limpio étnicamente,
mediante la expansión territorial y la exterminación de la población
autóctona palestina, y entonces no es posible negociar para llegar a la paz. Es por eso que la independencia palestina nunca se alcanzará por medio de una solución de dos estados. La política de Israel lo demuestra en que se ha mantenido el asedio y los ataques pese a la tregua. Otra evidencia contra la solución de dos estados es el colaborador Abbas y sus autoridades en Cisjordania. Abbas se ha sentado a la mesa de negociaciones con el imperialismo,
¿con cuál resultado? Se le ha convertido en un agente subordinado de la política genocida lo que resulta que Cisjordania ha llegado a una ocupación agravada. Los asentamientos sionistas se expanden, se levanta el muro y el ejército israelí persigue, veja y mata a los palestinos. Cuando el pueblo de Cisjordania se levanta en solidaridad con hermanos y hermanas asesinados en la franja Gaza, se encuentran confrontados con prohibiciones y cachiporras de Abbas.
¡Apoya a Hamás contra Israel!
La resistencia incondicional de Gaza, con Hamás en primera línea, se debe
confirmar y apoyar bajo sus condiciones propias. Esto significa el apoyo a
Hamás por su resistencia contra Israel, sin responsabilidad por su política.
El no ponerse al lado de Hamás significaría desarmarse al frente de las
masacres de Israel. Sin embargo, se debe de afirmar que la política de Hamás
es patriarcal y contra-judío. Una Palestina libre nunca se podrá
alcanzar sin levantar a las mujeres de Gaza como luchadoras iguales; sino que expandirá la lucha hacia los judíos de pocos ingresos, que
están reprimidos bajo del estado sionista.
Ninguna paz podrá liberar a Palestina mientras el estado Israel exista Y los luchadores por la liberación, encarcelados en la franja Gaza, nunca llegarán a aplastar al estado de Israel solos.
Para que pueda avanzar la lucha para la sobrevivencia y la independencia, es
necesario que los que no tienen poder del mundo árabe destronen a sus regímenes
reaccionarios y que los oprimidos dentro de Israel se levanten contra su propio
gobierno sionista. Una fuerza unida de rebelión en el Oriente Próximo, con las
mujeres como soldados y líderes políticos, tendría la fuerza para aplastar el
sionismo y avanzar sociedades árabes donde se respeten los derechos de las minorías con una zona judía independiente.
La Asociación Intersocialista, Suecia
12-01-2009