Protestas al cuadrado
Ciudad Guayana. Martes, 07 de Febrero de 2012 (Foto Demetrio Karaindros).- Una nueva manifestación, con incidencia en la ya mermada producción, ocurrió en CVG Alcasa. Trabajadores del área de Laminación demandan un trato conforme a su antigüedad, toda vez que los cooperativistas recién ingresados perciben mejores salarios. El descontento de los trabajadores de laminación se extendió como pólvora a todas los departamentos de CVG Alcasa. Empleados de todas las áreas concurrieron en el salón de usos múltiples de la empresa para exigir al presidente de la estatal, Elio Sayago, una respuesta sobre el pago de pasivos laborales.
Ciudad Guayana. Martes, 07 de Febrero de 2012 (Foto Demetrio Karaindros).- Una nueva manifestación, con incidencia en la ya mermada producción, ocurrió en CVG Alcasa. Trabajadores del área de Laminación demandan un trato conforme a su antigüedad, toda vez que los cooperativistas recién ingresados perciben mejores salarios. El descontento de los trabajadores de laminación se extendió como pólvora a todas los departamentos de CVG Alcasa. Empleados de todas las áreas concurrieron en el salón de usos múltiples de la empresa para exigir al presidente de la estatal, Elio Sayago, una respuesta sobre el pago de pasivos laborales.
La chispa fue la incorporación de nuevos trabajadores al área de laminación con sueldos y cargos superiores a quienes tienen no menos de 20 años de experiencia.
El grupo de empleados que el jueves pasado hizo el reclamo decidió ayer subir a las oficinas de presidencia a presionar una respuesta a su demanda.
Pero como la molestia involucró otros departamentos, la discusión fue trasladada al salón de usos múltiples, en el que directivos de Sintralcasa, gerentes, trabajadores y el presidente de la reductora discurrieron nuevamente sobre el futuro de la fábrica.
Irregularidades
Sayago reiteró su reconocimiento de los pasivos laborales y su disposición a cancelarlos cuando cuenta con suficiente flujo de caja, lo cual pasa, primero, por la aprobación de los puntos de cuentas corporativos.
Defendió los ingresos de cooperativistas como un acto de justicia social con quienes tienen laborando más de 15 años en la planta en situación de tercerizados.
Por tanto, el responsable de la fábrica explicó que la escasa comunicación generó un conflicto innecesario pues todos los trabajadores serán reconocidos.
Cerca de las 6:00 de la tarde, las partes firmaron una minuta en la que se comprometieron a sostener una reunión este miércoles 8.
Por cada área los trabajadores designarán a tres de ellos que los representarán en la discusión del tabulador y clasificador de cargos; también buscarán salidas para la cancelación de siete meses de ahorro y bono de alimentación (cestaticket).
Con la aplicación de la nueva escala salarial, pendiente desde el 2007, se desea corregir los solapamientos de los cargos y definir la posición de los nuevos ingresos.
El objetivo es que este miércoles puedan tener un informe detallado en el que se puntualice lo necesario para implementar el tabulador, la disponibilidad de caja y el cronograma de pago de otros pasivos.
Piezas políticas
La crisis operativa volvió a ocupar tiempo. El debate en el edificio administrativo produjo que se bajara el ritmo en el departamento de celdas y en el resto de la cadena productiva donde el personal detuvo las operaciones en protesta.
Ni el sindicato ni el presidente estuvieron de acuerdo con la revuelta en las áreas. Sayago insistió en que hay que preservar la “poca” producción y el secretario general, Henry Arias, recalcó que no dará argumentos al Gobierno para que justifique el cierre de la reductora.
Los objetivos del sindicato están concentrados, por ahora, en una movilización que se hará el 17 de marzo en Caracas con la participación de dirigentes y trabajadores de todo el país.
“Vamos a decirle al presidente (Hugo Chávez) que amor con hambre no dura”, señaló Arias a los alcasianos.
Baja calidad
Pero mientras la situación laboral apremia, el calor de las celdas y la calidad del aluminio preocupa a todos en silencio.
Aunque Sayago se muestra tranquilo, con capacidad para negociar un producto fuera de los estándares y, aún así, cancelar 6 mil 600 toneladas de aluminio en deudas; otros empleados tienen dudas de que Alcasa salga -esta vez- airosa de la nueva coyuntura.
Desde hace más de 15 días, Alcasa produce con “cero calidad” producto de que se han visto obligados a utilizar un coque de petróleo calcinado grado empaque, proveniente de Pdvsa.
Aunque las empresas con las que se tenía comprometida la producción requieren de aluminio con otros estándares, Sayago aseguró que los despachos se han realizado sin contratiempos a los clientes.
Promete que para mayo no tendrán preocupaciones por el suministro de materias primas.