¿Qué quieren hacer los Kirchner con Papel Prensa?
En un largo discurso, Cristina denunció “la apropiación ilegal” de Papel Prensa, acusando a los propietarios de los diarios Clarín, La Nación y la Razón. Papel Prensa es el monopolio con mayoría del Grupo Clarín y minorías de La Nación y el Estado Nacional que controla la producción de papel de diario. No está mal recordar hechos de la última dictadura militar. Pero los Kirchner se acuerdan ahora de enviar el caso a la justicia, después de siete años de gobierno, cuando están enfrentados con el Grupo Clarín. El gobierno es padre del doble discurso. Si se habla de hechos aberrantes ocurridos en la dictadura, sería bueno que anulara los indultos o dejara de pagar una deuda externa contraída por Videla y Martínez de Hoz a costa de nuestros 30.000 compañeros detenidos desaparecidos.
En un largo discurso, Cristina denunció “la apropiación ilegal” de Papel Prensa, acusando a los propietarios de los diarios Clarín, La Nación y la Razón. Papel Prensa es el monopolio con mayoría del Grupo Clarín y minorías de La Nación y el Estado Nacional que controla la producción de papel de diario. No está mal recordar hechos de la última dictadura militar. Pero los Kirchner se acuerdan ahora de enviar el caso a la justicia, después de siete años de gobierno, cuando están enfrentados con el Grupo Clarín. El gobierno es padre del doble discurso. Si se habla de hechos aberrantes ocurridos en la dictadura, sería bueno que anulara los indultos o dejara de pagar una deuda externa contraída por Videla y Martínez de Hoz a costa de nuestros 30.000 compañeros detenidos desaparecidos.
El gobierno vino amenazando con expropiar Papel Prensa para ponerla bajo control del patotero Guillermo Moreno y Beatriz Paglieri, su mano derecha en la intervención del Indec. Ahora, además de anunciar que llevará el caso a la justicia, enviará al Congreso un proyecto de ley para “declarar de interés público la producción de pasta celulosa y papel de diario, su distribución y comercialización, y establecer el marco regulatorio de este insumo básico que garantice un tratamiento igualitario para todos los diarios de la República”. Supuestamente, para que haya más “amplitud de voces”. Puras mentiras.
Si ésa fuera la intención del gobierno, ya lo hubiera hecho con Canal 7. Pero en la TV pública no se aceptan voces opositoras, sino sólo alabanzas al kirchnerismo, como hace escandalosamente el programa 6,7,8. Ni qué hablar del silencio sobre los conflictos cotidianos de los trabajadores o los nulos espacios hacia los partidos de izquierda.
Miremos, como otro ejemplo, Fútbol para Todos. Aprovechando el sentimiento popular por ver los partidos de cada fecha del torneo oficial, el gobierno está gastando 1.000 millones de pesos en propaganda que mecha entre gol y gol para anunciar “sus obras”, muchas de ellas mentirosas. Por eso es que, hasta Julio Grondona, presidente de la AFA desde la dictadura, ha dicho que en 2011 votaría por Cristina, por los negocios que mantiene con el matrimonio presidencial.
Los socialistas no aceptamos que un gobierno patronal maneje el papel a su gusto y antojo. Tampoco que lo hagan los grandes grupos como Clarín o La Nación. El único objetivo que mueve al gobierno es tener medios gráficos adeptos. Nuestra propuesta es que el Estado se haga cargo de garantizar el papel para que todas las corrientes de pensamiento, sean políticas, culturales y sociales, sin excepción, puedan dar a conocer su opinión sin ningún tipo de censura. Y defendemos el derecho inalienable de la clase trabajadora y los sectores populares a hacer escuchar su voz, sus luchas y exigencias. Lo opuesto a lo que aspira al gobierno con sus nuevos anuncios mediáticos.