Quieren imponer a Rodney Alvarez que confiese un crimen que no cometió
Por Corriente Clasista Unitaria Revolucionaria y Autónoma (C-cura)
El 1ro. de julio es la próxima audiencia en el caso que el Estado venezolano le sigue al trabajador de Ferrominera del Orinoco (FMO), Rodney Álvarez. Ocho largos años privado de su libertad lleva este trabajador, sin que hasta la fecha el Estado y el sistema de justicia venezolano hayan podido demostrar vínculo alguno entre Rodney y el asesinato de Renny Rojas, también trabajador de FMO.
Desde los inicios de este montaje judicial, la más insistente táctica asumida por sucesivos fiscales y otros voceros del Estado, ha sido intentar convencer a Rodney Alvarez, de que admita su culpabilidad, contraviniendo su palabra y los testimonios de los trabajadores de FMO que en todas y cada una de las audiencias han señalado y defendido su inocencia.
El asesinato del trabajador Renny Rojas, fue un suceso que presenció gran cantidad de trabajadores de FMO, ya que ocurrió mientras se realizaba una asamblea en el portón de dicha empresa en Puerto Ordaz, el 9 de junio de 2011. En esa asamblea, que fue filmada por las cámaras de seguridad de la empresa, se constata cuando Héctor Maicán, sindicalista y militante del Psuv, realizó los únicos disparos registrados ese día, a consecuencia de los cuales fallece Renny Rojas y resultan heridos Luis Quilarque y Agustín Lezama.
Desde C-cura, hemos denunciado muchas veces que en Venezuela no existe justicia para los trabajadores, como tampoco para los sectores humildes. Hemos denunciado que este gobierno y su falso discurso socialista, ha amparado un putrefacto sistema de justicia, que junto al resto del Estado, están al servicio de las trasnacionales y la explotación capitalista. Hemos denunciado su paquete económico y los planes de hambre con los que oprimen a la familia del trabajador. También hemos dicho que este gobierno ampara las mafias que desvalijan las empresas básicas y Pdvsa, arruinando al país.
Este Estado y sus funcionarios mantienen a Rodney en sus cárceles, muy a pesar de no demostrar su culpabilidad, porque pretenden quebrarlo y que él asuma, un hecho, contrario a la verdad, su verdad y la verdad de todos los ferromineros. Rodney es inocente, y la única posibilidad de que impongamos su libertad es con la denuncia diaria del caso, extendiendo la solidaridad dentro y fuera de Venezuela, con la movilización de los trabajadores.
El 1ro. de julio acudamos a la puerta de los tribunales, a denunciar y manifestar nuestra solidaridad. Esa misma noche (7 p.m.) convocamos a realizar un tuitazo en su defensa y en denuncia del caso.
Libertad a Rodney Álvarez, Rubén González, Alfonso Román.