Trabajadores paralizaron todo Puerto Cabello
El despliegue de efectivos de la Guardia Nacional y de la armada que amanecieron apostados en todos los rincones de la ciudad porteña, no fue impedimento para que cientos de trabajadores del puerto de Puerto Cabello, protagonizaran una extensa que protesta por espacio de cinco horas, paralizaron diversos sectores de la ciudad
El despliegue de efectivos de la Guardia Nacional y de la armada que amanecieron apostados en todos los rincones de la ciudad porteña, no fue impedimento para que cientos de trabajadores del puerto de Puerto Cabello, protagonizaran una extensa que protesta por espacio de cinco horas, paralizaron diversos sectores de la ciudad
Puerto Cabello (El Carabobeño – Foto Noel Palencia).- De esta forma, transportistas, estibadores, operadores de grúas, logística, recursos humanos, cooperativistas y hasta agentes aduánales manifestaron así el descontento reinante entre ellos, ante la posibilidad de que estas instalaciones sean administradas por un ente extranjero.
La autopista El Palito-Muelles, autopista Sorpresa- Muelles y las inmediaciones de la puerta siete del puerto, fueron los escenarios en los que la masa laboral portuaria hizo catarsis de su sentir ante la toma de BoliPuertos, de los patios, silos y almacenadoras y la detención -que califican como injusta- de sus 13 compañeros de Intermarca, detenidos e investigados por los más de mil kilos de droga, detectados días dentro de un contenedor en el patio seis de la almacenadora.
“¡Estamos dispuestos a todo!”. Gritaban airadamente los trabajadores quienes en todo momento hicieron ver que la acción no tenía el más mínimo viso de tinte político, sino más bien el defender sus derechos como trabajadores que, según se les había informados, habían perdido al tomar la estatal el control de los patios, silos y almacenadoras, teniendo que conformarse con las condiciones que BoliPuertos impusiera a partir de ahora.
«Pretenden contratarnos por tres meses, no reconocer mis doce años de trabajo y encima me quieren pagar salario mínimo», espetaba José Núñez, trabajador de la ahora extinta almacenadora Deporca.
Sobre las razones que motivaron la protesta, la que cobraba más fuerza a medida que transcurrían las horas, era la negativa de los trabajadores de aceptar que el puerto local sea administrado por una empresa extranjera.
Gritos como, sí caerán, fuera los cubanos, no a BoliPuertos, fuimos engañados y no más estafas, eran vociferados por los trabajadores portuarios, mientras accionaban las cornetas de las motocicletas, quemaban cauchos y hasta formaban cadenas humanas en la vía para impedir cualquier represalia a manos de los efectivos de la Brigada Antimotines de la Guardia Nacional.
¡Acciones inconsultas!. Fue la principal acusación que los manifestantes hicieron en contra de las autoridades portuarias y el Ejecutivo Nacional, señalando que todas las decisiones tomadas por BoliPuertos en el terminal carabobeño -desde su reversión al Estado- han sido unilaterales, sin tomar en cuenta la opinión de la fuerza laboral y de la comunidad.
«Nunca se nos preguntó si estábamos de acuerdo o no con esta acción. Se nos dijo que el puerto era nuestro y ahora pretenden entregárselo a unos extranjeros o a gente que no es del puerto», precisó otro de los trabajadores que lideraba la protesta.
Cuatro horas de protesta, un calor intenso y un sol que quemaba la capa asfáltica de la vía cerrada, no lograban mermar los exaltados ánimos de los manifestantes que exigían en todo momento la presencia del presidente de BoliPuertos, Javier Torres Dávila o en su defecto al coordinador de la terminal carabobeña por la estatal, Luis Gregorio Marín Campos.
Encuentro y conversación
Pese a que minutos antes un encontronazo entre un oficial de la GN y los manifestantes provocó un conato de agresión con piedras y botellas; en tono pausado y conciliador, el coronel (GN) Fabio Zavarse Pavón, comandante del Destacamento 25 de la Guardia Nacional en Puerto Cabello, logró adueñarse de la situación, a un extremo tal, que concilió con los manifestantes, y coordinó el encuentro allí mismo, con Luis Marín Campos, coordinador de la BoliPuertos en Puerto Cabello, quien en todo momento, pese al rechazo inicial de los trabajadores, insistió en conversar con ellos, escuchar sus planteamientos y conciliar, a través de la firma de un convenio escrito en el que ambas partes establecerían una serie de protestas.
Tras cinco horas de manifestación y tranca de las vías, que provocaron además el colapso total de la capital porteña, Marín Campos y Zavarse Pavón lograron convencer a los trabajadores para que despejaran todas las vías y se trasladaran hasta la sede de la Tercera Compañía del D-25 a las puertas del puerto y allí instalar una mesa de diálogo.
¡Es un problema de desinformación!. Exclamaba con preocupación en todo momento el Coordinador de la BoliPuertos en Puerto Cabello, inclusive antes de sentarse en la mesa de diálogo. Luego de escuchar todos los planteamientos Marín aclaró que la información manejada por los trabajadores era totalmente errada, negando rotundamente que el puerto estuviese en manos de los cubanos tal y como lo señalaban durante la protesta la fuerza laboral.
Hoy a las diez de la mañana
Ya más calmadas, ambas partes se escucharon y acordaron establecer una mesa de trabajo, que se instaurará este mismo martes, a las 10 de la mañana, en la sede del Puerto Turístico.
Se espera contar con el rol protagónico de funcionarios del Seniat y Guardia Nacional, así como representantes de agentes de aduana, transportistas, trabajadores de las almacenadoras y todos los involucrados en el movimiento portuario.
Se presume que el alcalde Rafael Lacava, señalado por los trabajadores como uno de los promotores de la reversión del puerto, acudan a la convocatoria. «Con las bases, vamos a aclarar todo el escenario portuario con las bases para que de una vez por todas nos pongamos a trabajar», sentenció Marín Campos.
El Coordinador de BoliPuertos deberá subir todas las inquietudes manifestadas por los trabajadores de ser posible hasta el propio presidente Hugo Chávez. El tema de un posible referendo consultivo quedó en el olvido, pues Marín propuso a los trabajadores mejorar la resolución para sacar adelante el primer puerto del país.
Puerto paralizado desde hace tres días
Los trabajadores portuarios advirtieron al Coordinador de BoliPuertos, ser testigos oculares de cómo, desde el viernes pasado, las actividades dentro del puerto están paralizadas.
Osmel Zambrano, agente aduanero le advirtió a Marín que los costos, ocasionados por estas 72 horas de paralización del puerto, son incalculables.
Recalcó que será el consumidor final el que pague este incremento. «Innecesario, porque lo que había que hacer desde un principio, es esto que estamos haciendo ahora, dialogar».
A Marín no le quedó más remedio que reconocer esta situación, pero aseguró que desde primera horas de la mañana de este lunes, los sistemas para facturación, operaciones y demás actividades inherentes al comercio marítimo internacional se estaban desarrollando con normalidad en el terminal carabobeño.
¿Quién administra el puerto?
Por primera vez, desde que se iniciara el proceso de inspección en las almacenadoras y patios del puerto de Puerto Cabello, se escuchó una versión oficial sobre quién realmente administra el primer terminal marítimo del país y bajo qué esquema operativo se hará.
Luis Marín Campos aclaró -tal y como lo hiciera el presidente de la Comisión Nacional de Aduana y Asuntos Portuarios de Consecomercio, José Sabatino- que las operaciones y administración del puerto carabobeño está en manos de BoliPuertos.
Añadió que Puertos del Alba estarán exclusivamente a cargo de la construcción de espacios, modernización y reestructuración de las instalaciones portuarias.
Sobre los derechos de los trabajadores, el Coordinador negó que a éstos se les fuese a desmejorar sus sueldos y salarios, al tiempo que negó que serían despedidos y contratados bajo una figura temporal. «Todos los trabajadores del puerto pasarán a la nómina fija de BoliPuertos, con beneficios laborales que contempla aspectos como 120 días de utilidades, 44 días de vacaciones, póliza de seguro HCM para hasta cuatro miembros de la familia, pago de útiles escolares en 800 Bs.F. y otros beneficios», aclaró Marín para dejar como cerradas las especulaciones que en torno al destino de los trabajadores se tejen desde el pasado viernes cuando se iniciara el proceso de toma de los patios y almacenadoras por el Estado.