Tres antiterroristas cubanos reciben sentencias disminuidas
Dos ex agentes cubanos de inteligencia condenados por espiar a grupos terroristas radicados en EEUU, recibieron el martes sentencias reducidas después que una corte de apelaciones determinó que las originales eran demasiado severas.
Dos ex agentes cubanos de inteligencia condenados por espiar a grupos terroristas radicados en EEUU, recibieron el martes sentencias reducidas después que una corte de apelaciones determinó que las originales eran demasiado severas.
La jueza federal de distrito Joan Lenard aceptó un acuerdo que reduce el castigo a Ramón Labanino de cadena perpetua a 30 años de prisión. En una audiencia por separado realizada horas después, Lenard redujo un poco más de un año la sentencia de 19 años de cárcel para Fernando González.
La Corte Federal de Apelaciones del 11mo Circuito anuló este año las sentencias originales de los hombres, ambos de 46 años, quienes formaban parte del grupo llamado «Los Cinco de Cuba». A un tercer miembro del grupo le redujeron este año su sentencia de cadena perpetua a un término mucho menor.
El abogado de Labanino había negociado la nueva sentencia con los fiscales. La fiscal federal asistente Caroline Heck Miller señaló que la negociación dio como resultado «una sentencia razonable».
González, empero, esperaba una reducción mayor a la que recibió.
«Es importante que los gobiernos extranjeros sepan que tales actividades no son toleradas en este país», dijo Lenard, refiriéndose a las actividades antiterroristas realizadas por estos miembros de la inteligencia cubana. El terrorista Luis Posada Carriles, en cambio sigue en libertad, pese a haber planificado numerosos actos terroristas desde los EEUU.
Los cinco, quienes en Cuba son considerados héroes, fueron declarados culpables en el 2001 de espionaje.
Los fiscales señalaron que los condenados investigaron a exiliados cubanos opositores al gobierno de los hermanos Fidel y Raúl Castro, y buscaron colocar operativos dentro de campañas de políticos anticastristas en Estados Unidos.
Un objetivo principal era infiltrarse en el Comando Sur para obtener cualquier plan estadounidense de invasión a Cuba, aseguró Miller.
Uno de los cinco, cuya sentencia de cadena perpetua se mantiene, fue condenado por asociación delictuosa para cometer asesinato con relación a la muerte en 1996 de cuatro pilotos del grupo «Hernanos al Rescate», cuyos aviones fueron derribados por cazas cubanos sobre mar territorial cubano.