Un testimonio ante la historia

Por Javier Antonio Vivas Santana

Domingo, 28/06/2020

A mi esposa y mis amigos.

Amada Olys y apreciados amigos.

Como bien lo saben desde el pasado 25 de marzo en horas de la noche y violando lo sagrado de mi residencia y sin orden judicial un grupo de la Direccion de Contrainteligencia Militar me detuvo ilegalmente (Dgcim).

A partir de alli comenzó un calvario que jamás imaginé vivir para mi familia y personas cercanas. En efecto, a las 48 horas fuí presentado ante un tribunal ordinario en la isla de Margarita en donde la fiscal no encontró elementos para imputarme, pero la juez «declinó» mi caso alegando que mi aprehensión fue ordenada por un tribunal nacional.

Ante tal realidad, mi esposa es testigo que el propio general y los oficiales del Dgcim en la isla de Margarita dijeron en su sede palabras mas, palabras menos: «Profesor, nosotros sabemos que usted no es ningún delincuente y menos un criminal, pero su detención son órdenes de arriba»…

Entonces fui trasladado via maritima a Caracas a la sede del Dgcim Caracas donde estuve detenido desde el 28 de marzo hasta el 12 de mayo en dicha sede donde las «autoridades» se robaron hasta mi ropa y zapatos. Allí pasé los primeros 25 dias en una celda de castigo, durmiendo solo el piso y en interior con un frio terrible y en total oscuridad. Los tres dias iniciales de ese martirio no me dieron comida ni agua.

Asi, cuando sali de esa celda un 23 de abril algo mejoró la reclusíón y pude comprobar que estaba solo con presos politicos entre ellos, ex presidente y ejecutivos de Pdvsa, militares, y hasta el tio del lider opositor Juan Guaidó.

El 13 de mayo me trasladaron junto con otros 56 presos politicos al infierno carcelario del Rodeo III en Guatire donde todo es una violación a los derechos mas esenciales del ser humano. Hoy, de 84 kilos apenas peso 60.

Agradezco al doctor Heinz Dieterich el intelectual mas influyente en Mexico y parte de América Latina y con mucha fuerza en Rusia y China por sus palabras sobre mi, y exigiendo mi liberación. Lo mismo agradezco a Gonzalo y Nicmer quienes desde Aporrea y Punto de Corte luchan a diario pidiendo mi libertad.

Al señor Enrique le doy las gracias para que las trasmita al señor Massimo. A ambos pido perdón por no haber informado nada, pero todo fue muy rápido sin tiempo de hacer nada. Lamento que este hecho involuntario y generado en mi contra haya perjudicado lo que se habia construido. Ya mi esposa le escribirá desde su WhatsApp con detalle.

A Khalet todas las gracias y agradecimiento. Tu hermana Renda fue el enlace con el señor Enrique, y eso solo lo hacen los hermanos.

He vivido torturas y horrores. Les escribo desde la clandestinidad del Rodeo III. Ojala pronto logre la libertad.

Es auténtico,

Javier Vivas Santana

Twitter: @jvivassantana
Email: jvivassantana@gmail.com

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