VIH y solidaridad internacional: medicinas para afuera, desabastecimiento para adentro
El pasado 23 de abril las agencias informativas difundieron la donación del gobierno venezolano, a su par nicaragüense, de 400 mil dólares en medicinas para el tratamiento del VIH-Sida.
El pasado 23 de abril las agencias informativas difundieron la donación del gobierno venezolano, a su par nicaragüense, de 400 mil dólares en medicinas para el tratamiento del VIH-Sida. El anuncio fue realizado por el secretario general del ministerio nicaragüense Enrique Beteta. Como organización que lucha por los derechos humanos, desde hace 21 años, hemos promovido valores como la solidaridad y cooperación, por lo que sería una inconsistencia el cuestionar per se la política de ayudas internacionales promovida por el Ejecutivo Nacional. Sin embargo, lo que sí exigimos es que las materias que son objeto de donación a países hermanos estén satisfactoriamente garantizadas en nuestro país.
Con Provea se comunicó uno de los activistas, con amplia experiencia en la promoción de políticas de prevención y tratamiento para la pandemia del Sida, comentando la noticia. Sus alegatos, al igual que los nuestros, coincidían que el problema no era el desarrollo de lazos de apoyo intergubernamentales, pues en ese tipo de alianzas quienes pudieran salir más beneficiados serían los afectados y afectadas de ambas naciones. Su queja, al contrario, apuntaba al hecho de la donación de medicinas que impiden el desarrollo de la resistencia del virus VIH se realizara, precisamente, en un momento en que los mismos escasean en nuestro país. Esta situación de desabastecimiento no es nueva, y ha motivado la contraloría social permanente de más de 40 organizaciones de la sociedad civil a nivel nacional que trabajan el tema, la realización de diferentes movilizaciones de presión, el envío de decenas de cartas a las instituciones oficiales, así como reuniones con sucesivas y diferentes autoridades del ministerio de salud. Sin embargo, la situación persiste hasta el día de hoy.
Según mandato constitucional del Tribunal Supremo de Justicia de fecha 15 de julio de 1999, el Estado venezolano, a través de los organismos con competencia en el área, está obligado a suministrar los medicamentos antirretrovirales y toda la atención integral que requieran venezolanos y venezolanas que viven con VIH, con la finalidad de garantizar su derecho a la vida, salud y el acceso a los avances de la ciencia y tecnología consagrados tanto en la propia Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, como en los diferentes pactos y acuerdos internacionales suscritos por la nación.
En fecha reciente, uno de los momentos más álgidos del desabastecimiento de medicamentos antirretrovirales (ARVs) ocurrió a finales del 2009. En los meses de noviembre y diciembre el programa de suministro de medicamentos ARVs del Programa Nacional de Sida/ITS del Ministerio de Salud (MPPS) presentó desabastecimiento de siete tipos de ARVs, varios fármacos para infecciones oportunistas, de suplemento nutricional y sucedáneos de leche materna. La suspensión del tratamiento antirretroviral ocasiona en las personas que viven con VIH el desarrollo de la resistencia viral, lo que pudiera genera daños irreversibles en la salud, cambio a otros tipos de medicamentos ARVs que inciden de forma significativa en el presupuesto del programa de suministro de ARVs, y finalmente generando la muerte de las personas. Esta situación ha sido determinada en el Estudio sobre Adherencia a los Medicamentos Antirretrovirales efectuado por el Programa Nacional de VIH/Sida del MPPS, así como en las investigaciones médicas a nivel mundial.
Para alertar sobre la situación durante los meses de diciembre y enero se remitieron comunicaciones institucionales al ministro de salud Carlos Rotondaro, a la viceministra Indira Corado y a diferentes funcionarios del ente. Ninguna de estas comunicaciones obtuvo respuesta, violando el derecho a la petición de información garantizado en la Carta Magna. Finalmente el 22 de enero lograron realizar una reunión de trabajo Hector Corobo, Director de Bienes y Servicios del MPPS y la doctora Deisy Matos, Jefa del Plan Nacional de Sida, MPPS. A pesar de que los funcionarios rechazaron que existiera un desabastecimiento de medicinas, afirmaron que el despacho de salud garantizaría la disponibilidad de la partida presupuestaria para la compra de ARVs, kits de laboratorio y todo lo relacionado durante el año 2010. Sin embargo, tres meses después persistían las denuncias de falta de medicamentos, por lo que el 09 de abril las ONGs vuelven a remitir una comunicación a la doctora Matos para exigir el suministro oportuno de los ARVs faltantes.
No es solamente la ausencia de los medicamentos lo que impediría que Venezuela pudiera mostrarse internacionalmente como un modelo en la lucha contra el sida. Actualmente, es inexistente la promoción de una campaña masiva que fomente formas de prevención del VIH, que incluya el uso de condones femeninos y masculinos. Asimismo, se reportan periódicamente casos de discriminación a personas que viven con VIH, cuyas violaciones por parte de funcionarios públicos persisten en el tiempo al quedar impunes.
El tipo de ideal de solidaridad es la implementación local de unas políticas públicas de calidad tal que generen una cultura institucional, con satisfacciones progresivas del derecho, que podamos compartir con otros países. Sin embargo este no es el caso actual, reincidiendo en la lógica, que ha demostrado sobradamente sus limitaciones en nuestros predios, que los recursos económicos solucionan mágicamente todo.
*Coordinador Área de Investigación de Provea
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