Pdvsa miente «descaradamente» sobre operatividad de Tavsa
Miércoles, 20 de Junio de 2012. (Fotos Demetrio Karaindros)
Trabajadores denuncian intención de la estatal petrolera de eliminar el contrato colectivo y sustituirlo por un “paquete socioeconómico”.
Miércoles, 20 de Junio de 2012. (Fotos Demetrio Karaindros)
Trabajadores denuncian intención de la estatal petrolera de eliminar el contrato colectivo y sustituirlo por un “paquete socioeconómico”.
Sutiss y trabajadores de Tavsa se concentraron en la sede de Pdvsa Industrial donde juraron no desistir en la protesta
La última protesta fue en el portón III de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor). Los trabajadores de la fábrica de tubos mantuvieron retenida la flota de transporte y tres días después decidieron reanudar el tránsito tras una promesa de reunirse con el ministro de Petróleo y Minas, Rafael Ramírez.
Cuatro meses después, las condiciones operativas y laborales de Empresa Socialista Batalla de San Félix (Antigua Tavsa) son las mismas. Casi no producen, no hay gerencia en el área y ahora se suma la amenaza de la eliminación del contrato colectivo.
De manera que, como ya han viajado a Caracas, paralizado operaciones y cerrado los portones de Sidor, el último paso fue marchar hasta la sede de Pdvsa Industrial, más por un afán mediático que por alguna respuesta en esa sede.
Los trabajadores tomaron sus vehículos y en caravana llegaron a la sede de la petrolera, en Unare. Al ver la protesta, cinco ejecutivos chinos que desayunaban frente a las oficinas entraron rápidamente al edificio.
José Luis Hernández, presidente de Sutiss. “Así como hubo una mafia de las cabillas, presumimos que hay una mafia de los tubos y por eso pedimos la intervención del ministro Rafael Ramírez”.
En Pdvsa no se reunieron con nadie, pero sí enumeraron ante los medios de comunicación la retahíla de incumplidos: les deben el tabulador, el 10 por ciento de meritocracia, las inversiones prometidas y -para muchos lo más importante- la transferencia de la fábrica a la administración de Sidor como funcionó hasta el 2008.
Cadena de mentiras
El delegado departamental del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y Sus Similares (Sutiss), José Saracual, desmintió al vicepresidente de Exploración y Producción de Pdvsa, Eulogio Del Pino, quien en cadena nacional le dijo al presidente Hugo Chávez que la fábrica de tubos operaba a un 100 por ciento.
La realidad es que, desde que fue nacionalizada en el 2009, la estatal no ha superado el 30 por ciento de operaciones. En sus patios acumulan casi 8 mil toneladas de tubos que no son despachados a Pdvsa porque ésta importa el producto a Tenaris y a una transnacional china.
Abajo, cadenas
Los trabajadores presumen que el presidente Chávez y el ministro Ramírez son engañados; el presidente de Sutiss, José Luis Hernández, cree que se trata de una mafia “anti-chavista” que atenta contra el “proceso revolucionario”.
José Saracual, delegado departamental de Tavsa. “Presidente (Chávez), ese señor (Eulogio Del Pino) le mintió descaradamente cuando le dijo que no se estaban importando tubos y que esta planta (Tavsa) estaba a un 100%”.
Ante esto, Hernández planteó tomar el control operativo de la fábrica. ¿Cómo? Destituyendo a la gerencial, que nunca está en la fábrica, y designando a los trabajadores del área como responsables de la administración del único fabricante de tubos sin costura en Venezuela.
Primero recogerán firmas, luego designarán a los trabajadores y, con esa decisión -explicó el presidente del sindicato- habrá suficiente presión como para que Ramírez reactive la empresa y conceda los beneficios adeudados.
La posición del presidente de Sutiss fue respaldada por el secretario general, Julio López, el directivo ante la junta directiva, José Rodríguez y demás delegados departamentales.
Intocable
Los trabajadores dejaron claro que, ante la propuesta de Pdvsa de un “paquete económico”, no desistirán de su contrato colectivo. No tienen dudas de que la intención de la gerencia petrolera es nivelar los salarios anulando la convención y desmejorándolos con una remuneración -como las de otras filiales- que no poseen contrato.
La manifestación se dispersó al poco tiempo y en las paredes de Pdvsa quedó impresa la gigantografía: “Trabajadores petroleros resteados con Chávez”.