19 de abril de 1943. 77 años del levantamiento del Gueto de Varsovia
Por Laclase.info
El 19 de abril de 1943, los judíos del Gueto de Varsovia protagonizaron una de las páginas más heroicas de la lucha contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial. Ese día se produjo un desesperado levantamiento armado de los habitantes del Gueto contra los invasores alemanes.
La invasión a Polonia por parte del ejército alemán, se produjo el 1 de septiembre de 1939, en acuerdo con la Unión Soviética de Stalin, que invadió Polonia por el este el 17 de septiembre, en virtud del pacto firmado entre la URSS y la Alemania nazi el 23 de agosto de ese año.
Desde el comienzo de la invasión los nazis desataron una feroz campaña de persecución a los judíos de ese país. El muro tras del cual se aisló a la población judía de Varsovia comenzó a construirse el 1 de abril de 1940. En el Gueto también se concentró a judíos traídos de otras regiones de Polonia y de países ocupados por Alemania. Llegó a haber dentro de sus muros unas 460.000 personas, en un área de 3,4 kilómetros cuadrados. El objetivo de la Alemania nazi era matar de inanición a los miles de pobladores del Gueto. Entre noviembre de 1940 y julio de 1942 unas 100.000 personas murieron de hambre o enfermedades en el Gueto de Varsovia.
El 22 de julio de 1942 los alemanes empezaron a trasladar a judíos del Gueto al campo de exterminio de Treblinka. En enero de 1943 la Organización de Lucha Judía (Żydowska Organizacja Bojowa/ ZOB), de orientación izquierdista, encabezada por el joven de 23 años Mordejai Anielevich, enfrentó exitosamente un intento de deportación que estaban instrumentando los nazis. Esta acción sirvió de inspiración para que dicha organización armada preparara el levantamiento con apoyo del Ejército Nacional polaco (Armia Krajowa/AK), la principal organización de la resistencia polaca, que desde el exterior del Gueto aportó armas y explosivos. En el levantamiento también participó la Unión Militar Judía (Żydowski Związek Wojskowy/ZZW), que agrupaba a judíos de derecha.
El 19 de abril estaba previsto realizar la requisa del Gueto para asesinar y deportar a los judíos que quedaban en el mismo, unos 50 a 70 mil. Sin embargo, los combatientes del ZOB y ZZW atacaron con granadas y cócteles molotov a las tropas alemanas que incursionaron en el Gueto, al mando del general de las SS Juergen Stroop. Después de varias semanas de encarnizados combates, el ejército alemán arrasó con la mayoría de los edificios del Gueto, incendiándolos para hacer salir a los combatientes que se encontraban atrincherados en bunkers subterráneos. Como dijo uno de los sobrevivientes, ellos sabían que no tenían ninguna oportunidad ante el poder de fuego de la poderosa máquina de guerra nazi. Y su objetivo era “morir con dignidad”.
Desde el exterior, los insurgentes del Gueto fueron apoyados por soldados del Ejército Polaco (Armia Krajowa) y partisanos de la Gwardia Ludowa de orientación comunista. Varios soldados de la resistencia polaca murieron apoyando a los judíos del Gueto.
Con la destrucción de la Gran Sinagoga de Varsovia, el 16 de mayo de 1943, terminaron los combates, y comenzó la destrucción definitiva del Gueto por parte de las tropas alemanas. Después de un mes de heroica entrega por parte de los combatientes del Gueto, callan los fusiles y las ametralladoras. Sin embargo, el sonido metálico de estas volverá a resonar el 1 de agosto de 1944 cuando toda Varsovia se rebelará contra la ocupación nazi, iniciándose el levantamiento de la población de la capital polaca.
El balance del levantamiento del Gueto fue muy desigual. Los alemanes tuvieron 86 muertos y 420 heridos, según cálculos de la resistencia polaca, mientras que entre los judíos del Gueto hubo más de 56.000 que resultaron muertos o acabaron prisioneros de los nazis, siendo enviados a campos de concentración.