Impulsemos una Corriente Universitaria Autónoma en la ULA

Las universidades autónomas atraviesan una situación crítica, agobiadas por la corrupción y la falta de presupuesto, en la cual el gobierno y las autoridades universitarias se disponen a liquidar conquistas históricas del movimiento estudiantil. Los sueldos de los trabajadores muchas veces están por debajo del salario mínimo, mientras que las remuneraciones de profesores y empleados se deterioran rápidamente ante la inflación. Las bibliotecas están mal dotadas y hay carencias importantes de infraestructura. Es una situación terrible cuyos responsables son las autoridades universitarias y el gobierno nacional.

Colectivo Libre Aquiles Nazoa

Por: Colectivo Libre Aquiles Nazoa

Las universidades autónomas atraviesan una situación crítica, agobiadas por la corrupción y la falta de presupuesto, en la cual el gobierno y las autoridades universitarias se disponen a liquidar conquistas históricas del movimiento estudiantil. Los sueldos de los trabajadores muchas veces están por debajo del salario mínimo, mientras que las remuneraciones de profesores y empleados se deterioran rápidamente ante la inflación. Las bibliotecas están mal dotadas y hay carencias importantes de infraestructura. Es una situación terrible cuyos responsables son las autoridades universitarias y el gobierno nacional.


Frente a esta situación, la mayor parte de las organizaciones estudiantiles, en vez de defender a los estudiantes y luchar por una universidad democrática, se cuadran con el gobierno o con las autoridades universitarias. Ni la actual FCU, controlada por la derecha, ni los grupos estudiantiles del gobierno, defienden de manera consecuente los intereses de los estudiantes, ni luchan por una agenda propia de la comunidad universitaria.

Pero lo cierto es que la mayoría de los estudiantes no son gobierneros ni borregos de las autoridades universitarias. Consideramos que es necesario impulsar en la ULA una Corriente Universitaria Autónoma (CUA), tal y como han propuesto un grupo de profesores y estudiantes de la UCV, para articular a todas las organizaciones estudiantiles independientes, así como trabajadores y profesores, que coincidan en torno a una agenda de movilización que incluya la lucha por un presupuesto universitario adecuado a las necesidades de la comunidad universitaria; planificado y ejecutado bajo el control democrático de los profesores, estudiantes, y trabajadores, para evitar que se sigan robando los recursos; un presupuesto que permita la apertura de los concursos para cubrir los cargos docentes que las facultades requieren, y para otorgar cargos fijos a todos los trabajadores de la ULA. De igual manera, hay que exigir un aumento general de sueldos y salarios para trabajadores, empleados y profesores.

La CUA debe ser vanguardia en la lucha por servicios estudiantiles de calidad y becas dignas, así como preparadurías cuyo pago equivalga al monto del salario mínimo. Además, debe luchar por el derecho democrático a la educación superior, exigiendo la eliminación de las pruebas de ingreso y la apertura de cursos propedéuticos de nivelación para alumnos de nuevo ingreso. Debe defender el voto paritario y un gobierno universitario ejercido a través de las Asambleas de Facultad. Además, debe denunciar las leyes que el gobierno impone de manera inconsulta al sector universitario, y exigir el derecho a organización estudiantil y a la sindicalización en la UNEFA y la UBV. Esta agenda se puede ampliar, con el objetivo de convocar a todos los miembros de la comunidad universitaria honestos y comprometidos.

A nivel del gobierno estudiantil, es necesario exigir la inmediata convocatoria a elecciones de las FCU y los centros de estudiantes que esten deslegitimados. En la ULA hay que exigir el cumplimiento de los estatutos de la FCU y la convocatoria a la Asamblea de Representación Estudiantil, para que el gobierno estudiantil también se democratice. Es hora de refundar el movimiento estudiantil, y dotarlo de una dirección democrática y luchadora, dispuesta a defender la independencia política del movimiento contra los demagogos del gobierno y de la derecha. Construyendo la unidad en torno al programa de lucha que proponemos, es posible enfrentar esta ofensiva del gobierno y las autoridades universitarias.

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