Testimonio de trabajadora del Hospital Industrial de San Tomé contagiada con covid-19: nos cuenta su calvario
Por Laclase.info
Caracas, 19 de julio de 2020.- En los últimos dos meses han aumentado los casos de contagio con covid-19, y esto ha afectado directamente a las trabajadoras y trabajadores del sector salud, que siguen prestando sus labores en los diferentes centros hospitalarios del país; a pesar de sufrir la destrucción de sus salarios y condiciones de trabajo, y tampoco contar con los insumos de bioseguridad, pruebas PCR e instalaciones adecuadas para realizar el aislamiento de los pacientes contagiados.
Presentamos un valiente testimonio de una trabajadora del Hospital Industrial de San Tomé de Pdvsa, que presentó los síntomas del covid-19, le realizaron pruebas rápidas y salió positiva en la segunda oportunidad. Desde ese momento, se encuentra aislada en una oficina de ese centro hospitalario, esperando la realización de una prueba PCR, que es la verdaderamente confiable para confirmar o descartar esa enfermedad. Una muestra de las condiciones de trabajo que padecen las trabajadoras y trabajadores del sector salud.
Testimonio
Mi nombre es Alexandra Farías, técnico radiólogo, trabajo en el Hospital Industrial de San tomé y en una clínica privada debido a que no me escapó de la situación país y tengo que llevar el sustentó a mí casa. Les voy a contar toda La injusticia y atropello que he recibido de parte de la directiva del Hospital.
Comenzó como una simple gripe, tomé el respectivo tratamiento de la gripe y no mejoraba nada, el día 28 de junio vengo al Hospital porque tenía guardia de 24 horas, y aprovecho de realizarme el rayos x, ya venía con exceso de tos. Me voy al área de emergencia, donde le muestro el rayos x a un doctor, y me dice que tengo una bronquitis, hay que colocar tratamiento y reposo. Ese mismo día me realizaron una prueba rápida de covid-19 que salió negativa. Le notificó al coordinador de mí servicio que me dieron reposo, y él me dice que continúe la guardia; lo hice.
Luego viene la subdirectora y me notifica que van a traer un paciente del Hospital del Tigre, que le salió positiva la prueba de covid-19, le informo que no tengo el equipo de protección para atender al paciente, ella me responde que lo va a buscar para dármelo. Llegó el paciente a las 12:50 pm, obviamente, que yo me coloque mi bata, guantes, lentes, gorro y las botas; realizó el estudio y se va el paciente. Nadie vienen a limpiar el área dónde yo hice el servicio. A las 10:30, me llama el director diciendo que él desconoce por completo la razón por qué yo tengo el servicio inactivo, le expliqué que estuvo un paciente contagiado de covid-19, él me dice que eso no es motivo para paralizar.
Nosotros, nos alarmamos, pero en ningún lado dice que por recibir un paciente positivo de covid-19, se debe detener el servicio de rayos x. Pero, que el director al conocer mi temor, al día siguiente envió personal para que desinfecten servicio de rayos. Yo escribí en el cuaderno de reporte todo lo ocurrido en mi guardia, y me voy de reposo los cinco días indicados por el médico, cumplo con el tratamiento indicado y no evoluciono bien.
Regresó a una revaloración está vez me ve la doctora Carmen Carrero, médico internista. Ella sugiere realizar otros rayos x, y me dice que vamos a cambiar el tratamiento por levofloxacina, nebulización, antialérgico. Me voy de reposo nuevamente diez días. Pasa el lapso del reposó.
Vuelvo, nuevamente, me revalúa la doctora Carmen Carrero y me ve disneica. Aunque no quería realizaron otra rayos x, y era necesario realizar exámenes de sangré, y sugiere hacerme la prueba rápida del covid-19, como lineamientos a seguir para poder ser ingresada a la institución con la finalidad de cumplir tratamiento endovenoso. Ella le notifica al licenciado de epidemiología, le informan que no hay, pero ella dice que resuelve. Me llevan a mí para el triaje respiratorio. Ya eran las 10:00 am, estaba el enfermero de guardia y la doctora Daniela Cabeza, estuvimos hablando, como a las 11:00 llega la doctora Carmen Carrero, notificado que la prueba rápida dio positivo a covid-19. En el momento, lloré del simple hecho de pensar que pude haber contagiado a mí familia.
De ahí, en adelanté, todo ha sido un show, los médicos no me quieren evaluar porque los voy a contagiar, los enfermeros han cumplido dos funciones cómo enfermero y médicos a la vez. Mi pregunta es los pacientes que tienen covid-19 confirmado por una PCR, no son dignos de ser atendidos por el personal médico de salud, para qué estudiaste medicina, no sabías que en cualquier momento podía llegar un pandemia y te ibas a exponer, no hubieses estudiado esa carrera. Lamentablemente todo el personal de salud va a estar expuesto a cualquier enfermedad.
A todas estas ellos no sabían qué hacer conmigo. Si mandarme para un CDI, el Hospital Centinela del Tigre o mandarme para Barcelona al Hospital Razetti. A todas estás en ninguno de los centros me quisieron recibir gracias a dios para mí, pero para ellos fue lo peor porque tuvieron que habilitar el área de consulta interna, un consultorio para que me mantuviera en aislamiento hasta que llegarán los resultados de la prueba PCR. La directiva quiere que me vaya, de cualquier forma. El doctor Belisario, dice que no me puedo ir porque no tienen los resultados debido a que tiene que seguir los lineamientos por el servicio de epidemiologia.
Hoy es viernes 17 de julio y continúo aquí, hace dos días no tengo aire acondicionado porque se dañó de la noche a la mañana, y creo que no he recibido un trato digno de partes de mis superiores. Hoy me tocó a mí pasar por esté mal momento, mañana pueden ser ustedes. Yo estoy en mi deber de exigir como trabajadora que soy de la institución; como un apoyo comunitario si hay que brindarle las mejores atenciones y para mí no. Aquí se trata de tomar conciencia, soy un ser humano, no compré está enfermedad en la panadería. Póngase en mi lugar a ustedes les gustaría adquirir cualquier enfermedad contagiosa y ser discriminado de la misma forma que a mí.
Les recuerdo, que lo que siembra hoy lo cosecharás mañana. Mi estadía aquí no ha sido fácil. Le doy las gracias al doctor Belisario, a la licenciada Belkis, la doctora Daniela Cabeza, Licenciada Mayloris Colmenares, al Doctor Yordany, y otras personas que no me sé el nombre les pido disculpas pero sé que han estado pendientes de mí. Dios los bendiga, gracias por todo el apoyo sin ustedes no sé qué hubiera sido de mí, ya me encuentro en mejore condiciones física recuperándome para irme a casa.