Las causas de las luchas estudiantiles de ayer y siguen vigentes hoy

Hace 53 años, un 21 de noviembre, arranca una contundente huelga estudiantil en los centros de estudios universitarios y de educación media en la ciudad de Caracas. De esta manera, los estudiantes se colocaron en la vanguardia revolucionaria contra la dictadura fascista de Marcos Pérez Jiménez. La Universidad Central fue la primera en declararse en huelga, y rápidamente fue seguida por otros centros de estudio, y se quemó la Ley Electoral fraudulenta que legitimaba el régimen dictatorial que vivía el país.

A pesar de la gran represión que desplegó el gobierno central, poniendo presos a una gran cantidad de estudiantes, y cerrando las puertas de las Universidades, la huelga estudiantil tuvo gran éxito, y fue un antecedente directo de la gran rebelión popular que liquidó el régimen de Marcos Pérez Jiménez. Desde entonces se conmemora el 21 de Noviembre el día del estudiante. Ya en 1928, los estudiantes universitarios habían encabezado las protestas populares más importantes contra la dictadura de Juan Vicente Gómez.

Las luchas revolucionarias y democráticas son una tradición del movimiento estudiantil, desde la Reforma de Córdoba, con la que se conquistó el cogobierno universitario y se reivindicó el principio de la autonomía universitaria, y que dio origen a todo un movimiento por la democracia y la autonomía universitaria a nivel latinoamericano y mundial. El Mayo Francés de 1968, protagonizado por estudiantes y trabajadores, en el marco de las luchas estudiantiles contra la invasión imperialista de Vietnam, y el intento de reforma universitaria en Venezuela en 1969, que llevó a la militarización de la UCV por parte del gobierno asesino de Rafael Caldera, plantearon banderas de luchas como la necesidad de una educación liberadora, una universidad democrática y abierta.

Domingo Salazar, Carlos Bello, José Uribe, Manuel Quiroz, Rosa Piña, Magdiel Páez, Douglas Rojas, y muchos otros dirigentes estudiantiles continuaron las tradiciones democráticas y revolucionarias del movimiento estudiantil, y murieron por la represión de los gobiernos autoritarios de Acción Democrática y COPEI.

Pese a las conquistas obtenidas por medio de las luchas históricas del estudiantado, (como el cogobierno de profesores y estudiantes, y la autonomía) la universidad venezolana hoy en día sigue siendo un claustro antidemocrático y corrupto, que reproduce el conformismo y la aceptación pasiva del status quo. Las autoridades universitarias han secuestrado la autonomía universitaria y niegan la democracia asamblearia.

Por eso hoy es necesario refundar el movimiento estudiantil, retomando sus reivindicaciones históricas:

– Por democracia universitaria: voto paritario para todos los gremios universitarios.

– Por una universidad abierta: por una política de libre ingreso estudiantil.

– Por verdadera autonomía universitaria: que la planificación y ejecución del presupuesto universitario sea controlado por las Asambleas de Facultad.

– Por una universidad laica y no racista.

– Por una universidad solidaria con los pueblos oprimidos, como Irak, Afganistán, Palestina, y el Sáhara Occidental.

– Por servicios estudiantiles de calidad.

Colectivo Libre Aquiles Nazoa, Ruptura Universitaria, Colectivo «Diferentes», Ecologistas-Facijup, Estudiantes independientes