Asier Guridi tiene tres semanas en huelga de hambre sin respuesta del consulado del Estado español y el Saime
Por Laclase.info
Caracas, 19 de abril de 2022.- Hace tres semanas, el refugiado político vasco Asier Guridi Zaloña comenzó una huelga de hambre, en las adyacencias del consulado del Estado español, ubicado en el sector la Castellana, en la ciudad de Caracas. La protesta es efectuada para demandar la entrega del pasaporte español o la cédula venezolana como transeúnte, que le garantice tener identidad jurídica y el ejercicio de todos sus derechos humanos.
Después de veintiún días en huelga de hambre, Asier Guridi Zaloña continúa esperando respuestas del consulado del Estado español o el Saime del Estado venezolano, que siguen negando su derecho humano a la identidad como sujeto jurídico, a pesar del riesgo para su salud e integridad física que acarrea la acción de protesta. Recordemos que ha sido hostigado por efectivos policiales del Municipio Chacao y, el pasado fin de semana, fue golpeado por dos ladrones para robarle una garrafa de agua.
Asier Guridi Zaloña requiere pasaporte del Estado español o cédula venezolana de transeúnte para poder ejercer un conjunto de derechos humanos como trabajar, casarse, votar y legar su nacionalidad a su hijo, nacido en Venezuela, pero residente en la actualidad en el país vasco.
El consulado del Estado español ha mantenido por casi 20 años sin su pasaporte, su identidad jurídica, al refugiado político vasco Asier Guridi Zaloña como expresión de una persecución política del nacionalismo español en contra de un militante que ha defendido la autodeterminación del pueblo vasco.
También, Asier Guridi Zaloña le sigue requiriendo al Saime del Estado venezolano que le entregue su cédula venezolana de transeúnte, como lo establece el estatus de refugiado que le fue concedido el año pasado por la Comisión Nacional para los Refugiados (Conare), para proceder con los trámites jurídicos dirigidos a formalizar la relación filial con su hijo.
La lucha de Asier Guridi Zaloña por su identidad jurídica debe ser acompañada por el conjunto de las organizaciones políticas, sociales y de derechos humanos del Estado español y Venezuela; porque es al mismo tiempo la defensa universal e irrestricta del estatus de refugiado político.